Veinticinco noches de ¨¦xito

Espa?a celebr¨® en el Palma Arena de Mallorca el vig¨¦simo quinto triunfo en serie de la 'era Pepu', bajo cuya direcci¨®n desconoce la derrota y despach¨® a Alemania para seguir siendo el ¨²nico equipo de todos los que participan en el Europeo que se mantiene invicto en la preparaci¨®n. La victoria espa?ola en la capital de Baleares naci¨®, creci¨® y culmin¨® por una v¨ªa completamente in¨¦dita hasta ahora. De entrada, por la madrugadora aparici¨®n que tuvo en el marcador. A continuaci¨®n, porque los hombres de Jos¨¦ Vicente Hern¨¢ndez sacaron las u?as ya en el primer cuarto sin esperar a una de sus t¨ªpicas rachas post-descanso. Y finalmente, porque no es normal que Alemania s¨®lo anote cuatro puntos en el primer cuarto.

Las condiciones resultaron tan at¨ªpicas que el pen¨²ltimo amistoso de los campeones del mundo antes del Europeo confundi¨® a todos sus protagonistas hasta que encajo en otras coordenadas m¨¢s propias. Espa?a tampoco jug¨® un buen primer corte (9-4 m.9), pero le bast¨® una peque?a tromba de las que hace gala para sellar el periodo con la selecci¨®n germana completamente descolocada y una posici¨®n privilegiada para disfrutar de la tarde-noche mallorquina sin sobresaltos (16-4 m.10). El banco local entendi¨® el entorno como una ocasi¨®n pintiparada para mover piezas, para repartir minutos y descansos por igual entre una tropa que dentro de pocos d¨ªas, el pr¨®ximo 3 de septiembre, empieza el Eurobasket con una dosis a?adida de responsabilidad por jugar en casa y hacerlo con el oro mundial de Jap¨®n 2006 colgado del cuello. Las dosis, claro, sin afectar a los objetivos preparatorios de la velada ni bajar el ritmo.

En realidad, el ¨²nico alem¨¢n que sali¨® a la pista del Palma Arena mentalizado para la misi¨®n que esperaba por delante fue el t¨¦cnico Dirk Bauermann. Sus hombres segu¨ªan so?ando con su id¨ªlica estancia en el lujoso enclave de Puerto Portals y, aunque Espa?a tampoco protagoniz¨® un inicio para tocar las campanas, todo se le puso de cara. Sin embargo, Alemania tiene orgullo y calidad, as¨ª que cuando vio el camino tan absolutamente despejado tambi¨¦n seste¨® fuera de horas. Por eso, entre la bronca de Bauermann y la cabezadita espa?ola, el choque recuper¨® el pulso al acabar la primera parte (31-28).

Duelo Gasol-Nowitzki

Al encuentro, sea como fuere, le faltaba algo de picante. Pau Gasol y el ala-p¨ªvot de los Dallas Mavericks Dirk Nowitzki tambi¨¦n hab¨ªan pasado de puntillas, aunque como m¨¢ximos anotadores con seis puntos por barba, los mismos que el interesante Jan-Hendrik Jagla, un tallo con buena mano y mucha juventud como para presagiar que su futuro le reserva algo bueno. El equilibrio agreg¨® la chispa necesaria para animar el patio en el segundo tiempo. De todas formas, Alemania no terminaba de apretar lo suficiente como para inquietar a Espa?a, que en el arranque del tercer tramo intensific¨® la actividad defensiva y volvi¨® a ense?ar los colmillos (39-30 m.24). La llamada al orden del banco germano en la banda no necesitaba justificaci¨®n.

Los alemanes, de cualquier forma, no ten¨ªan su noche. La paz y las bondades de Puerto Portals, definitivamente, les hab¨ªan anestesiado. Espa?a, por lo que parece, les ha terminado por aburrir. Trataron de llegar al cuerpo a cuerpo un par de veces, la del primer y segundo cuartos que limaron diferencias, pero a la tercera ya no movieron tanto las piernas. La diferencia super¨® los diez puntos antes de la conclusi¨®n del tercer cap¨ªtulo (46-32 m.28) y, aunque Bauermann volvi¨® a reunir a los suyos en torno a la pizarra, el boquete an¨ªmico propio y la solidez de una Espa?a que gana sin parar, sentenciaron la pen¨²ltima prueba de los Golden Boys. El r¨¦cord de ''Pepu'', incontestable: veinticinco de veinticinco.