F¨²tbol ¨¦pico
El Chelsea contiene al Liverpool tras un duelo emotivo e inolvidable que pudo decantarse para cualquiera
Stamford Bridge contempl¨® anoche un partido ¨¦pico . Lleno de goles, alternativas y sorpresas. El viejo estadio de los blues tambi¨¦n escuch¨® el You'll never walk alone de la hinchada del Liverpool, a pesar de que el Chelsea hab¨ªa alcanzado las semifinales de la Liga de Campeones por segundo a?o consecutivo. La afici¨®n de los reds se sinti¨® razonablemente satisfecha pese a la derrota. La haza?a la tuvo al alcance, tanto en su magn¨ªfica primera parte como en una parte final del encuentro afortunada, aunque mucho m¨¢s discreta. El Liverpool se fundi¨® tras el descanso. Superado por el esp¨ªritu indomable de Drogba, que levant¨® a un Chelsea moribundo. La potencia y la voracidad del delantero africano dejaron en evidencia a la defensa del Liverpool, especialmente a Carragher, lastrado por el paso de los a?os. Tampoco ayud¨® el desacierto en el primer gol de Reina, que compensaba los fallos anteriores de Cech, dos porteros muy fiables en una mala noche. Finalmente la clase de Lampard certific¨® el pase a la siguiente ronda del grupo de Hiddink, que supieron rebelarse contra su infame primera parte.
Chelsea 4 - Liverpool 4
Chelsea : Cech; Ivanovic, Carvalho, Alex, Ashley Cole; Ballack, Essien, Lampard, Kalou (Anelka, m.35); Drogba (Franco di Santo, m.90) y Malouda.
Liverpool : Reina, Arbeloa (Babel, m.82), Carragher, Skrtel, Fabio Aurelio, Kuyt, Lucas, Xabi Alonso, Mascherano (Riera, m.70), Benayoun y Torres (Ngog, m.80).
Goles : 0-1, Fabio Aurelio, m.19. 0-2, Xabi Alonso, m.28. 1-2, Didier Drogba, m.51. 2-2, Alex, m.57. 3-2, Lampard, m.76. 3-3, Lucas, m.81. 3-4, Kuyt, m.83, 4-4, Lampard, m.89.
?rbitro : Luis Medina Cantalejo (Espa?a). Sac¨® tarjetas amarillas a Ivanovic y Ashley Cole, del Chelsea; y a Benayoun, del Liverpool.
Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones, disputado en el estadio londinense de Stamford Bridge, ante unos 38.000 espectadores. Los jugadores de ambos equipos llevaron brazaletes negros en se?al de respeto por el vig¨¦simo aniversario, que se cumplir¨¢ ma?ana, mi¨¦rcoles, de la tragedia de Hillsborough, donde perdieron la vida decenas de aficionados del Liverpool en un partido de Copa.
Fabio Aurelio le puso pimienta a la eliminatoria con una obra maestra. El lateral zurdo se fue a lanzar una falta a pie cambiado al carril del 8, a unos 25 metros de la porter¨ªa. Un tumulto de jugadores rojos y azules se peleaba en la l¨ªnea del ¨¢rea grande esperando la llegada del centro. Tambi¨¦n el portero, Peter Cech, segu¨ªa la disputa con la mirada. Todos pendientes del posible fuera de juego cuando el brasile?o golpe¨® el bal¨®n. El golpeo fue prodigioso. Tan enroscado y ajustado al palo izquierdo de Cech que el meta checo lleg¨® tarde. Tarde y humillado por un gol de ciencia ficci¨®n.
El Chelsea se cav¨® su propia tumba en el primer tiempo. Defendi¨® muy dentro de su ¨¢rea. Sin autoridad en ninguna parte del campo. Al contrario de lo que hab¨ªa anunciado Hiddink, los blues trataron de especular con la amplia ventaja del partido de ida. Sin m¨¢s ideolog¨ªa que ¨¦sta: el equipo atr¨¢s y balonazos a Drogba. Pese a necesitar tres goles, el Liverpool jug¨® con frialdad. Sin ninguna prisa. Ganando terreno poco a poco. En otra falta parecida a la del gol de Fabio Aurelio, esta vez el brasile?o centr¨® e Ivanovic agarr¨® por el cuello a Alonso. El penalti lo transform¨® el propio mediocentro espa?ol, que dirigi¨® ese primer periodo a su antojo. Ben¨ªtez contradijo lo que hab¨ªa sugerido su alineaci¨®n. Los tres mediocentros ?Mascherano, Alonso y Lucas Leiva? no supusieron ning¨²n atasco en el centro del campo, sino todo lo contrario. A pesar de que Leiva, de media punta, apenas entr¨® en juego. Alonso y Mascherano se encargaron de que Benayoun y Torres fueran una amenaza constante para Cech, muy desamparado y nervioso sin la presencia del capit¨¢n Terry.
Tras el penalti a favor de los reds, Medina Catalejo, recibido con suspicacias por los jugadores del Chelsea por compartir nacionalidad con cuatro del Liverpool, empez¨® un concierto de pito. Y cualquier m¨ªnimo contacto lo convirti¨® en falta. Lo que desesper¨® al conjunto de Ben¨ªtez, que se sinti¨® perjudicado por tanta interrupci¨®n.
Hiddink no esper¨® al descanso para tratar de darle un vuelco al encuentro. Dio entrada a Anelka en el minuto 35 por un desaparecido Kalou. Las ocasiones, en cualquier caso, siguieron cayendo del lado de los reds. Y su capit¨¢n, Steve Gerrard, despidi¨® a sus compa?eros desde el banquillo con aplausos.
El Liverpool continu¨® atacando, pero se encontr¨® con un contratiempo inesperado. Un centro desde la derecha, pegado al c¨®rner, de Anelka, lo toc¨® ligeramente Drogba y despist¨® a Reina, que introdujo el bal¨®n en su porter¨ªa. Una jugada aparentemente intrascendente afloj¨® a los de Ben¨ªtez. Y el Chelsea aprovech¨® la inercia para conseguir una serie de faltas al borde del ¨¢rea. De una de ellas, el central brasile?o Alex sac¨® un latigazo con un efecto contrario, de dentro hacia fuera, que retrat¨® a Reina. El Liverpool hab¨ªa perdido toda la intensidad de la primera parte. Extravi¨® de repente toda la energ¨ªa el equipo de Ben¨ªtez, que tard¨® en reaccionar. Entr¨® Riera y el Chelsea aument¨® la diferencia con otra gran jugada de Drogba que remat¨® Lampard. Ben¨ªtez pens¨® que la eliminatoria estaba perdida y retir¨® a Torres. ?Todo decidido? As¨ª parec¨ªa hasta que Leiva encontr¨® un rebote de Essien que se convirti¨® en gol. A continuaci¨®n, un centro de Riera lo cabece¨® Kuyt y el Liverpool ten¨ªa 10 minutos y s¨®lo necesitaba un gol. Otra vez en ascuas Stamford Bridge. Hasta que apareci¨® por en¨¦sima vez Drogba. Sirvi¨® a Anelka y el centro del franc¨¦s lo coloc¨® junto al palo Lampard. Noche ¨¦pica en Stamford Bridge. Noche de gloria para los blues.
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