Navarro y Pau ponen las cosas en su sitio

Espa?a convirti¨® en un paseo el partido en que se jugaba el pase a los cuartos de final. Hoy (21.00, La Sexta), en Katowice, se enfrenta a Francia con la clara conciencia de haber dado por fin con la tecla, consciente de que lo esperado era esto. Que un rival de medio pelo no pudiera decir esta boca es m¨ªa, que Polonia no diera para mucho m¨¢s que alg¨²n escarceo, que Pau Gasol se merendara a Gortat, que Navarro las enchufara, que el juego espa?ol volviera a fluir a chorros como tantas veces suced¨ªa desde que est¨¢ en manos de la generaci¨®n del ochenta.

El aluvi¨®n de canastas, transiciones a toda pastilla y combinaciones certeras que puso en pr¨¢ctica el equipo de Sergio Scariolo disip¨® cualquier asomo de drama. Cont¨® con la inestimable producci¨®n de una pareja demoledora, dos cl¨¢sicos en la materia, Pau Gasol y Navarro, que cuando est¨¢n en vena de aciertos arrollan al m¨¢s pintado. El primero dentro de la zona y el segundo desde el exterior machacaron a los polacos, incapaces de defenderles.

En ning¨²n momento cundi¨® el p¨¢nico. Gentileza del rival, se podr¨¢ deducir. Pero eso, la debilidad del rival, no decide por s¨ª solo. Basta repasar lo que ocurri¨® ante un tercera divisi¨®n como Gran Breta?a, cuando a punto estuvo Espa?a de hacer las maletas de tan mal que jug¨®. O ante Serbia, el primer d¨ªa, cuando no hubo la m¨¢s m¨ªnima opci¨®n al triunfo. Pero el equipo de Scariolo parece haber dejado atr¨¢s la tempestad: las lesiones, la torpeza supina que caracteriz¨® su juego en los primeros partidos, las dudas en la composici¨®n de algunos de sus quintetos en pista, la ceguera en la lectura del juego, la perplejidad por algunas decisiones estrat¨¦gicas, los errores a mansalva, desde los tiros de campo pasando por los tiros libres hasta las p¨¦rdidas de bal¨®n.

La recuperaci¨®n se produce en un momento crucial. No hay tiempo para nada. Si Espa?a pierde ante Francia, deber¨¢ hacer las maletas. Entra dentro de lo posible porque los franceses cuentan con un buen equipo, legitimado para aspirar a todo. Sucede que, si el equipo espa?ol contin¨²a con la chispa que por fin ha dejado ver ante Lituania y Polonia, podr¨¢ volver a so?ar con la medalla de oro.

La diferencia empez¨® a plasmarse desde el minuto uno. Los polacos no lograron ni un peque?o respiro: alg¨²n tiro del escolta Logan, nacido en Chicago y reci¨¦n nacionalizado, alg¨²n movimiento de Gortat en la zona, pero nada que tuviera cierta continuidad o le hiciera realmente da?o a la defensa espa?ola. Pau Gasol empez¨® marcando la l¨ªnea y todo el equipo le sigui¨® la corriente. Navarro estuvo demoledor. Hasta el punto de que en el minuto 25, cuando entre ambos hab¨ªan anotado 43 puntos, cinco m¨¢s de los que sumaba Polonia (38-58), Scariolo decidi¨® sentarlos. De tan bien que estaban, no era su partido. Mejor dosificar las fuerzas. No se not¨® demasiado. El resto del equipo mantuvo un nivel excelente y consigui¨® incluso que algunos de los jugadores m¨¢s necesitados de mejorar su nivel, caso de Marc Gasol o Mumbr¨², se sumaran a la fiesta.