Montgomery: "Marion y yo guard¨¢bamos las drogas cerca de las verduras"
El ex plusmarquista mundial de los 100m lisos habla desde la c¨¢rcel sobre el dopaje
El estadounidense Tim Montgomery, ex plusmarquista mundial de los 100 metros lisos, ha confesado en una entrevista que ha concedido a Times que la competitividad con su compatriota Maurice Greene fue la que le llev¨® a consumir sustancias prohibidas. "Maurice irrumpi¨® en mi cabeza muy mal. Quer¨ªa todo lo que ¨¦l ten¨ªa. Era embarazoso el modo en que ¨¦l estaba all¨ª ri¨¦ndose de otros atletas. Nuestras carreras no ten¨ªan que ver con el tiempo que hac¨ªamos, para m¨ª era algo personal. Todo lo que quer¨ªa era la persona", asegura.
Montgomery ha reconocido adem¨¢s que exist¨ªa mucha presi¨®n desde fuera. "Los organizadores de las reuniones y las compa?¨ªas de zapatillas me dec¨ªan ''Si no puedes batir a los dem¨¢s, no podemos pagarte como a ellos''. Habr¨ªa dado todo por ser el m¨¢s r¨¢pido del mundo y no dejar¨ªa que nada se interpusiera en mi camino". El velocista norteamericano, que estableci¨® una plusmarca mundial de 9.78 durante la reuni¨®n de Par¨ªs en septiembre de 2002, se retir¨® en el a?o 2005 al ser suspendido dos a?os por dopaje. Desde ese momento actividades relacionadas con el fraude bancario y la venta de hero¨ªna le han llevado a la c¨¢rcel, donde cumplir¨¢ pena hasta enero de 2016.
Desde all¨ª tambi¨¦n ha hablado de su relaci¨®n con Marion Jones, ganadora de cinco medallas en los juegos ol¨ªmpicos de Sidney 2000 que le fueron retiradas tras confesar haber tomado sustancias dopantes. El corredor ha explivado que, con su compa?era de entrenamientos, todo fue muy r¨¢pido. "Habl¨¦ con Marion en un vuelo a Roma durante al menos ocho horas. Dos horas despu¨¦s est¨¢bamos juntos en la habitaci¨®n de un hotel. Dos semanas m¨¢s tarde fuimos coronados como la pareja m¨¢s r¨¢pida del mundo y seis meses despu¨¦s de eso ella ya estaba embarazada".
"Marion y yo ¨¦ramos como colegas. Es dif¨ªcil encontrar una mujer con la que ver el f¨²tbol americano juntos y con la que jugar despu¨¦s al baloncesto contra ella. ?bamos a pescar y compet¨ªamos por ver qui¨¦n cog¨ªa m¨¢s peces. Es una persona realmente excitante. Probar¨ªa cualquier cosa. Si la retabas a conducir a 200 millas por hora ella lo hac¨ªa". A pesar de todo cree que la personalidad de Jones era inestable. "Habl¨® de quitarse la vida en numerosas ocasiones. Pens¨¦ que Marion era la persona m¨¢s fuerte del mundo pero se her¨ªa con facilidad. Ella es d¨¦bil aunque no lo muestre en p¨²blico. No cocinaba, no hac¨ªa nada que un hombre querr¨ªa que hiciera una mujer".
El corredor ha admitido que cuando ambos conviv¨ªan guardaban las drogas en el frigor¨ªfico "cerca de las verduras" y las jeringuillas "debajo de una pila de ropa" y que la que fue su pareja era "m¨¢s fr¨ªa" que ¨¦l y "no se preocupaba por nada". Adem¨¢s ha asegurado que ambos colocaban "c¨¢maras en la puerta para que si ven¨ªa un ''vampiro'', supiera que no ten¨ªa que abrir la puerta". "Un atleta puede consumirse mucho tratando de ser el mejor. ?ramos muy similares, los dos quer¨ªamos triunfar a cualquier precio y no puedes tener a dos personas as¨ª juntas". Adem¨¢s se ha lamentado de que tras romper la relaci¨®n no ha podido ver a su hijo en tres a?os. "Escrib¨ª a Marion desde prisi¨®n. Le dije: 'S¨¦ que hemos salido adelante de muchas cosas, se que ambos hemos hecho cosas err¨®neas y te deseo lo mejor pero no entiendo por qu¨¦ no puedo ver a mi hijo'. Nunca me contest¨®".
Sobre sus devaneos con los productos prohibidos ha explicado que sus or¨ªgenes no le hicieron ver realmente la magnitud del problema. "?Si sent¨ª que estaba cruzando la l¨ªnea cuando me dopaba? No, no viniendo de las calles. No voy a endulzarlo, ni siquiera pens¨¦ un segundo en que estaba haciendo trampas. Era todo quedar por encima del sistema, y si pod¨ªa, lo hac¨ªa. Hab¨ªa andado con drogas desde peque?o as¨ª que era una rutina parecida".
"Ser suspendido por dos a?os no pasaba por mi cabeza. Otras personas nunca fueron cogidas. Tuve todas las cualidades para lograr lo que quer¨ªa si las explotaba al cien por cien. Pero nunca lo hice. Quer¨ªa ser la persona que estuviera en los clubes, de fiesta, viviendo la vida. Tuve el mejor trabajo del mundo y ahora, en prisi¨®n, barro las hojas", ha lamentado. Sobre su experiencia en la c¨¢rcel ha reconocido que para hacerse un nombre dentro de ella ha tenido que hacer cosas de las que se arrepiente: "En una celda de Nueva York estuve encerrado con un ped¨®filo y tuve que golpearle. Estaba en contra de mi moral, creo que todos merecen una segunda oportunidad. Pero si no lo hac¨ªa el resto de presos pensar¨ªan que soy d¨¦bil".
"En una prisi¨®n presenci¨¦ unas 35 peleas y me vi envuelto en un mot¨ªn. Pensaron que yo era el l¨ªder. Nos tuvieron arrodillados contra la pared durante 90 minutos, y uno de los guardias me dio con su escudo en la espalda dos veces y me dio un shock el¨¦ctrico mientras me gritaba ''?Eres el l¨ªder?. Sabemos que eres el que dirige el grupo", ha explicado. Adem¨¢s ha reconocido que para sobrevivir en prisi¨®n su don fue una bendici¨®n. "En una prisi¨®n es todo cuesti¨®n de respeto, igual que en la pista. Mi don, la velocidad, fue mi salvador. Me hizo ganarme el respeto de los que mandan y ellos son normalmente los m¨¢s fuertes. Me he destruido a mi mismo. Llevo toda mi vida tratando de ser un hombre y ahora soy tratado como un ni?o peque?o".
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