El Bar?a se retuerce para pasar

Navarro fue el m¨¢ximo anotador, Ricky Rubio reparti¨® siete asistencias, el Bar?a se acerc¨® a los 80 puntos y estar¨¢ en las semifinales contra el Valencia, como estaba en los escritos . Sin embargo, obligado por lo mucho y bien que ha sembrado esta temporada, el equipo de Xavi Pascual no siempre brilla. Habida cuenta de la tremenda intensidad defensiva por la que opt¨® el Cajasol y la calidad de jugadores como Kirksay o Calloway, el Bar?a apel¨® a sus virtudes menos vistosas pero igualmente efectivas para pasar lo que fue un aut¨¦ntico muro de granito en los cuartos de final.

El Barcelona incurri¨® en un error de c¨¢lculo. No midi¨® bien en su trinchera. Kirksay y Ellis le daban al gatillo tan pronto como se situaban en las inmediaciones de los ocho metros, con demasiada impunidad, muy metidos atr¨¢s sus defensores, a verlas venir. La determinaci¨®n de los ca?oneros del Cajasol se descubri¨® de manera descarada cuando Ellis insisti¨® en el lanzamiento a campo abierto, sin cortarse un pelo por haber enviado su primer triple al m¨¢s absoluto vac¨ªo. En un abrir y cerrar de ojos sum¨® el tercero para su equipo, que empez¨® a despegar: 6-13.

Las dificultades empezaban para el Bar?a desde su generador de juego. Ricky Rubio se encasquill¨® m¨¢s de lo habitual. Las acciones se conceb¨ªan desde la incomodidad forzada por los defensores del Cajasol y llegaban a la orilla de la zona deshilachadas, sin posibilidad de engarzar pases y aperturas claras. El juego se le hac¨ªa espeso al Bar?a. Ndong, adem¨¢s del sitio, perdi¨® la cabeza y se gan¨® a pulso una t¨¦cnica. Acumul¨® tres personales en poco m¨¢s de seis minutos que le dejaron con medio pie fuera del partido. Decididamente, no funcionaba la maquinaria azulgrana, que acumul¨® cuatro p¨¦rdidas de bal¨®n y, con el primer baile de cambios ya avanzado, vio alejarse al Cajasol: 13-23.

Otro s¨ªntoma de la rigidez y la escasa profundidad del juego del Bar?a fue que no sac¨® los primeros tiros libres hasta muy poco antes del descanso. M¨¢s p¨¦rdidas, menos tiros libres, menos rebotes. Y, sin embargo, el Barcelona consigui¨® llegar al receso sin da?os considerables; de hecho, con un empate a 37 que castig¨® el primer respiro para Kirksay en el banquillo, combinado con la superioridad del Bar?a de Lakovic, Grimau y Navarro en los enredos en la media cancha y las dificultades de Rey, Miso y Radenovic para estar a la altura de sus compa?eros titulares.

Aprendida la lecci¨®n, ambos equipos apostaron por una sucesi¨®n de ataques y defensa en est¨¢tico, todo el juego contenido en un pu?o. Lakovic, Lorbek y especialmente Mickeal sacaron m¨¢s ventaja que los jugadores del Cajasol cuando era su turno para atacar la bien posicionada defensa del Barcelona. Resultado: 22-12 en el tercer cuarto y 59-49 para encarar el ¨²ltimo acto. No todo estaba dicho. No lo estuvo hasta que un triple de Navarro, a tres minutos para el final, y a rengl¨®n casi seguido un robo de bal¨®n de V¨¢zquez le permitieron poner siete puntos de distancia (70-63). Radenovic, Douglas y Savanovic le hab¨ªan puesto contra las cuerdas. Pero al Bar?a le salv¨® su seriedad y solvencia.

El Bar?a, en semifinales