Manute Bol, gigante ef¨ªmero

En octubre de 1985, un joven de cuerpo infinito y cara de ni?o era asediado por decenas de periodistas que, de puntillas y con el brazo estirado, le interrogaban con la inquietud del que presencia algo ins¨®lito. El chico era Manute Bol, que a sus 23 a?os acababa de aterrizar en la mejor liga de baloncesto del mundo, la NBA. Observado como un extraterrestre, le preguntaron por el v¨¦rtigo que supon¨ªa la nueva experiencia, por el desarraigo de un joven de Sud¨¢n que iniciaba su aventura estadounidense, por el miedo ante el reto sobrevenido. ?l respondi¨® con timidez y naturalidad: "No me asusta nada. Recuerdo que cuando era m¨¢s joven tuve que cazar un le¨®n con mis propias manos".

Manute Bol, cuyo abuelo med¨ªa 1,39 metros, naci¨® en 1962 en Gogrial, en el seno de la tribu de los Dinka, al sur de Sud¨¢n. Cuando la NBA tuvo noticias de sus 231 cent¨ªmetros de estatura, le cambi¨® la vida. En 1985, Manute fue elegido en el draft de la Liga norteamericana con el n¨²mero 31 por los entonces Washington Bullets (actuales Wizards) y se convirti¨® en el jugador m¨¢s alto de la historia de la competici¨®n, honor que a?os m¨¢s tarde tuvo que compartir con el rumano Gheorghe Muresan. En su primer a?o ya logr¨® el r¨¦cord de tapones para un novato con 397. Su media en esa temporada fue de 3,7 puntos y 5,9 rebotes en 26,1 minutos. Siempre estuvo apoyado por emblemas de la franquicia como Jeff Ruland, Frank Johnson o Jeff Malone. Despu¨¦s de tres temporadas en los Bullets, fich¨® por Golden State Warriors. Tambi¨¦n jug¨® en Filadelfia Seventy Sixers y Miami Heat.

El sue?o americano dur¨® 10 a?os. En 1995, los Milwaukee Bucks despidieron a Bol sin que llegase a debutar. Su artritis cr¨®nica en las rodillas se convirti¨® en un obst¨¢culo insalvable que le imped¨ªa mantener la exigencia f¨ªsica de la competici¨®n. El mismo cuerpo que le hab¨ªa encumbrado se revelaba con constantes achaques. Ah¨ª acab¨® la carrera del africano en la NBA. Para las enciclopedias qued¨® el dato de ser el octavo taponador de la historia de la Liga con 2.082 tapones.

Se apag¨® como deportista en modestos equipos de Uganda y Qatar y regres¨® a Estados Unidos a?os m¨¢s tarde buscando su para¨ªso de juventud. Pero ya nada fue igual. Su maltrecha salud y sus problemas familiares le sumieron en la quiebra y la desdicha. Un grave accidente de tr¨¢fico en 2004 acab¨® por lastrarle f¨ªsicamente de por vida.

Ayer falleci¨® a los 47 a?os en un hospital de Charlottesville (Virginia) a causa de un fallo hep¨¢tico. Tambi¨¦n padec¨ªa en la piel el s¨ªndrome de Stevens-Johnson, seg¨²n inform¨® un amigo del ex jugador. La NBA pierde su techo. Un hombre grande con cara de ni?o.