La sociedad Canales-Thiago lleva a Espa?a a la final del Europeo

Por si quedaba alg¨²n atisbo de duda sobre el futuro de la selecci¨®n espa?ola, tras la reciente conquista mundialista en Johanesburgo, acaba de quedar definitivamente disipada. La inercia del ¨¦xito contin¨²a con los Sub-19, donde los pupilos de Luis Milla han obtenido el pase a la final del Europeo de la categor¨ªa. Para lograrlo abusaron de Inglaterra, una de las favoritas al t¨ªtulo, con una contundente victoria (3-1) que se antoja corta a tenor de las ocasiones producidas por los espa?oles.

M¨¢s all¨¢ de engordar su curr¨ªculum con los triunfos en la Eurocopa, en 2008, y el reciente Mundial, Espa?a ha creado su propio estilo de juego, su sello, basado en el toque y que ha impregnado a la Federaci¨®n de arriba a abajo. Desde los seniors hasta las diversas categor¨ªas inferiores. Tambi¨¦n los Sub-19. Los esquemas de juego en el plantel de Milla son claros. Todo gira en torno al medio campo, y en ¨¦l se encuentran los dos motores de la selecci¨®n: Thiago y Canales. Barcelonista uno, madridista el otro, ambos hilvanaron las jugadas para suministrar el bal¨®n al tridente ofensivo compuesto por Keko, Rodrigo y Pacheco. La muestra del funcionamiento de este gui¨®n lo delata el primer gol: centro de Canales desde la derecha del ¨¢rea que remata Pacheco al segundo palo. Ah¨ª, en el minuto 13 de partido, qued¨® desarbolado el conjunto ingl¨¦s, m¨¢s preocupado por el error del rival para realizar su juego directo que en la creaci¨®n.

Con los brit¨¢nicos renegando del esf¨¦rico, una gran arrancada de Keko desde la derecha hasta el ¨¢rea rival constituy¨® la puntilla para los anglosajones, quienes recortaron distancias minutos m¨¢s tarde por medio de Bostock con una volea a ra¨ªz de un despeje mal resuelto en el ¨¢rea de ?lex. Pero Espa?a no perdi¨® la compostura. Amas¨® la bola y se rehizo pese a los tibios intentos de Inglaterra de achicar el campo y esper¨® pacientemente a culminar las jugadas creadas. De todas, consigui¨® la m¨¢s dif¨ªcil. Una falta botada por Thiago se convirti¨® en un pase milim¨¦trico a Canales dentro del ¨¢rea, donde no perdon¨®. 3-1. El resto del partido fue un mon¨®logo espa?ol junto a un rival noqueado a expensas de conocer al otro finalista, Francia o Croacia. Es la demostraci¨®n de que hay vida m¨¢s all¨¢ de la generaci¨®n de Sud¨¢frica. Bien lo saben Thiago y Canales.