El rey se congela
El Atl¨¦tico cae eliminado tras empatar bajo la nieve en Leverkusen y la victoria del Aris
El Atl¨¦tico, posiblemente el equipo que mejor refleja que el f¨²tbol es un estado de ¨¢nimo, se despidi¨® de la Liga Europa con un meritorio partido en Leverkusen que no le vali¨® para arreglar las pifias del pasado. Despu¨¦s de perder sus dos partidos con el Aris, el campe¨®n necesitaba una carambola a varias bandas para cantar bingo: mejorar ante el Bayer, ya clasificado, el resultado de los griegos contra un Rosenborg venido a menos. Tal y como era de esperar, el milagro no se produjo a pesar del despliegue de un campe¨®n que muri¨® con las botas puestas. La puesta en escena no escondi¨® que durante la fase de grupos solo fue capaz de ganar al conjunto de Trondheim. Y pas¨¢ndolas canutas.
Bayer Leverkusen 1 - Atl¨¦tico 1
Bayer Leverkusen: Giefer; Castro (Da Costa, m. 46), Schwaab, Hyypia, Vida; Kaplan, Bender (Vidal, m. 88), Balitsch, Augusto (Kiebling, m. 46); Jorgensen y Helmes. No utilizados: Bobel; Kadlec, Reinartz, Barnetta y Derdiyok.
Atl¨¦tico: De Gea; Valera, Perea, Dom¨ªnguez, Filipe Luis; Ra¨²l Garc¨ªa, Mario Su¨¢rez (Tiago, m. 85), Assun??o, Sim?o (Fran M¨¦rida, m. 72); Forl¨¢n (Diego Costa, m. 67) y Ag¨¹ero. No utilizados: Asenjo, Joel; Antonio L¨®pez y God¨ªn.
Goles: 1-0. M. 69. Helmes. 1-1. M. 73. Fran M¨¦rida.
?rbitro: Alexandru Dan Tudor (Rumania). Amonest¨® a Vidal y Mario Su¨¢rez. Unos 17.000 espectadores en el BayArena.
Pese a las dificultades, acentuadas por la tormenta de nieve que empap¨® el tapete, el equipo de Quique Flores luci¨® su vena m¨¢s competitiva cuando peor lo ten¨ªa. Acorralado y con una oreja pendiente del minuto y resultado de Sal¨®nica, el Atl¨¦tico se despleg¨® con m¨¢s orden y menos v¨¦rtigo que otras veces, sin tocar la corneta, porque la alineaci¨®n inclu¨ªa a Ra¨²l Garc¨ªa tirado por la banda derecha en lugar de Reyes. A falta de los caracoleos del utrerano, Sim?o ejerci¨® de ¨²nico extremo y por momentos de tercer delantero pese a tener m¨¢s de pie y medio en el Besiktas, mientras Assun??o y Mario Su¨¢rez le daban al equipo el pegamento suficiente para no partirse.
El Bayer, sin nada en juego salvo la honra y m¨¢s pendiente de recortar distancias ma?ana con el Dortmund, el l¨ªder de la Bundesliga, se tom¨® la partida como un tentempi¨¦. El remate ocasional de Jorgensen por encima del larguero en los preliminares fue testimonial. M¨¢s enchufado, el Atl¨¦tico empez¨® a sacar provecho a su mayor intensidad, con Sim?o y Filipe Luis ensanchando el campo y haciendo diabluras de la suyas. Y qu¨¦ decir Ag¨¹ero. A los diez minutos, el Kun recibi¨® un pase en largo, dej¨® atr¨¢s a los defensas y le dej¨® a Forl¨¢n el gol en bandeja. El uruguayo, solo en el segundo palo, no se lo esperaba y desaprovech¨® el pase de la muerte que el argentino le regal¨® solo en el segundo palo.
Las llegadas rojiblancas se suced¨ªan, una y detr¨¢s de otra, fruto de la pasi¨®n m¨¢s que de la raz¨®n, mientras la ventisca azotaba de lo lindo. Las secuelas del fr¨ªo le dieron un buen susto a Castro: el defensor, hijo de emigrantes espa?oles, se resbal¨® en pleno arre¨®n del Atl¨¦tico, que no supo sacar tajada del tropiezo. A la media hora, cuando m¨¢s arreciaba la nevada y apenas se distingu¨ªan la pelota ni las l¨ªneas del campo, el ¨¢rbitro orden¨® cambiar el bal¨®n por uno rojo. El cambio tuvo un efecto psicotr¨®pico en el Atl¨¦tico, que se lanz¨® sobre la porter¨ªa de Giefer como el s¨¦ptimo de caballer¨ªa. En una de esas, Sim?o se intern¨® hasta la l¨ªnea de fondo, encar¨® hacia el arco y su asistencia estupenda a Forl¨¢n termin¨® despejada por los pies del portero. A continuaci¨®n, el uruguayo enganch¨® una volea que sali¨® rozando el poste derecho. Las ocasiones se suced¨ªan, como otra a quemarropa del Kun, cuando el Aris, justo antes del descanso, cobr¨® ventaja con un gol esperp¨¦ntico frente al Rosenborg.
La ventaja de la escuadra de C¨²per en la soleada riviera griegaindigest¨® al Atl¨¦tico, que empez¨® a dejarse ir en la pista de patinaje del BayArena. La escarcha convirti¨® la pradera de Leverkusen en una topera en la que los futbolistas ya ten¨ªan bastante con mantenerse en pie. Beneficiado por la entrada de Kiebling, Helmes roz¨® el gol tras un despeje a vuela pluma de Valera. El equipo de Heynckes percibi¨® la apat¨ªa del Atl¨¦tico y decidi¨® estirar las l¨ªneas. Quique Flores busc¨® la reacci¨®n sacando a Forl¨¢n, un estilista, por Diego Costa, cuyo perfil, una tanqueta del ¨¢rea que se maneja bien en el cuerpo a cuerpo, le pareci¨® m¨¢s id¨®nea para adaptarse a los elementos. Sin embargo, el primer golpe lo dio el Bayer, que a la de tres aprovech¨® los espacios que dejaba un Atl¨¦tico en el alambre. Helmes bati¨® a De Gea tras ganar un sprint a un dormido Perea, y el pescado estaba vendido, pero el Kun se resisti¨® y pele¨® tanto y tan bien un bal¨®n en el ¨¢rea alemana que Fran M¨¦rida emboc¨® a gol la primera pelota que tocaba.
El empate encabrit¨® al Atl¨¦tico, que hizo de tripas coraz¨®n y mantuvo la fe contra nieve y marea con un centrochut de Filipe Luis. En la siguiente jugada, a toda pastilla, Mario Su¨¢rez fall¨® delante de los palos. Como Ag¨¹ero, que fall¨® en boca de gol otra oportunidad que ni pintada, mientras el Aris marcaba el segundo. Y as¨ª el campe¨®n perdi¨® la corona a las primeras de cambio.
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