El Levante muestra el abismo al Deportivo

Hubo un momento, a punto de finalizar la primera parte, en el que Antonio Tom¨¢s recogi¨® la pelota en su posici¨®n de mediocentro, salt¨® sobre ella, baj¨® la cabeza y la cedi¨®, resignado, a los centrales. La dejaci¨®n de funciones enerv¨® a la grada, que entiende que debe jugarse con otro criterio y que los centrocampistas est¨¢n para tocar el bal¨®n, no para escaparse de ¨¦l. Ese es el Deportivo actual, el que quiso ser pelotero en septiembre y en marzo es un pelotazo, el que lucha por salvarse de la quema escaso de f¨²tbol, el que deambula cada vez que abandona Riazor y hasta el tropiezo de ayer fiaba su futuro a sus prestaciones como local.

Derrotado y superado de principio a fin, el Deportivo fue un equipo roto por las lesiones, su incapacidad y sus limitaciones. Lo aprovech¨® el Levante, espabilado para sembrar el p¨¢nico con la potencia de Caicedo y la habilidad de Jefferson Montero, desafortunado ante Aranzubia, que salv¨® de nuevo a su equipo en sendos mano a mano, primero ante Caicedo y luego, cuando el fornido punta ecuatoriano se lesion¨®, ante Stuani.

La baja de Caicedo, que grip¨® toda su potencia en una carrera, fue un b¨¢lsamo para el Deportivo, pero no cambi¨® la deriva del partido. El Levante gan¨® porque fue m¨¢s audaz y se defendi¨® sin problemas de un rival que nunca atac¨® con m¨¢s de cuatro hombres. El conjunto valenciano encontr¨® los puntos cuando el partido expiraba gracias a un libre directo botado por Rub¨¦n Su¨¢rez en el que el esf¨¦rico traz¨® un extra?o que despist¨® a Aranzubia.

Deportivo 0 - Levante 1