El Bilbao Basket estruja 'La Fonteta'

El Bizkaia Bilbao Basket se ha llevado un sustancioso triunfo de La Fonteta, donde el Valencia naufrag¨® poco a poco y de la peor forma posible: sin atisbar la soluci¨®n a las fugas de su hasta ayer s¨®lido e intimidante buque. El paso hacia una hist¨®rica semifinal est¨¢ dado, aunque ma?ana aguarda en Bilbao la necesaria confirmaci¨®n de que la brillante actuaci¨®n de los bilba¨ªnos no fue solo un espejismo afortunado.

El equipo de Katsikaris sorprendi¨® a los valencianos desde el primer minuto de partido. No se equivocaba nada Svetislav Pesic cuando aseguraba que una de las grandes cualidades del equipo bilba¨ªno era ser "muy competitivo". Ayer el conjunto bilba¨ªno disimul¨® su cojera defensiva, asegur¨® rebotes y potenci¨® una excelente estrategia ofensiva de la mano de Hervelle y Mavroeidis en la primera parte del encuentro de tal forma que el equipo taronja se vio desbordado por varios flancos.

As¨ª, el regreso de Katsikaris a La Fonteta despu¨¦s de dos a?os dirigiendo al Valencia empez¨® con las espadas en alto, con defensas espinosas, y con De Colo y Claver aprovechando los contragolpes con fruici¨®n. Pese a los esfuerzos de Pesic por reconducir una situaci¨®n inesperada, el Bilbao Basket supo aguantar la presi¨®n y las broncas espor¨¢dicas para mantener vivo su sue?o de alcanzar las semifinales. El Valencia ven¨ªa lanzado despu¨¦s de encadenar ocho victorias seguidas en la liga, pero se asom¨® al descanso once puntos por debajo en el marcador y con la moral seriamente tocada. Savanovic y Cook pusieron la p¨®lvora y amagaron con poner a los bilba¨ªnos en aprietos cuando perd¨ªan, con una cadencia menor cada vez, el bal¨®n.

Un intenso Rafa Mart¨ªnez empez¨® estrechando los m¨¢rgenes de maniobra de los bilba¨ªnos, aunque la sangre no lleg¨® al r¨ªo. El objetivo de los de Katsikaris era no perder pie y Mavroeidis, r¨¢pido y listo, lo pill¨® a la primera. L¨¢stima que no todos sus compa?eros sintonizaran la misma frecuencia hasta los ¨²ltimos dos minutos. La hostigante defensa bilba¨ªna se volvi¨® simplemente infranqueable justo cuando fue preciso y los ataques, de Vasileiadis y Jackson, fueron punzantes y precisos en los envites finales.