Messi, capit¨¢n, estrella y sin gol

Ha comenzado la nueva era de Alejandro Sabella como seleccionador argentino y tiene a Lionel Messi con el brazalete en el brazo izquierdo. Messi hab¨ªa sido capit¨¢n de la albiceleste en un partido del Mundial de Sud¨¢frica 2010, contra Grecia, cuando Diego Maradona le dio un descanso a Javier Mascherano. Pero Sabella, el exentrenador del Estudiantes de La Plata que reemplaz¨® a Sergio Batista tras el fracaso argentino en la Copa Am¨¦rica que se jug¨® en su pa¨ªs, quiere que la m¨¢xima estrella del f¨²tbol mundial vista siempre la cinta de capit¨¢n, pese a su personalidad retra¨ªda. En el primer partido, el pasado viernes, Argentina venci¨® 1-0 a Venezuela en India. Hoy, en Bangladesh, derrot¨® 3-1 a Nigeria, con una gran actuaci¨®n de Messi, que, de todos modos, no ha podido quebrar su mala racha cara a las porter¨ªas rivales con la albiceleste. La Pulga lleva 16 partidos oficiales sin marcar a los que se suman los dos amistosos de la gesti¨®n de Sabella. Solo un gol ante Albania, en un amistoso en junio, suaviza esta estad¨ªstica. Todo lo contrario le ocurre con el Barcelona, donde pone la vista pone el bal¨®n.

Cada vez que Messi tocaba el cuero estallaban en gritos los 40.000 espectadores del estadio Bangabandhu, en Daca. El goleador del Barcelona revolucion¨® a los fan¨¢ticos del f¨²tbol en India y Bangladesh, donde Argentina despierta furor desde tiempos de Maradona. Y La Pulga no los defraud¨®.

En el minuto 24, recibi¨® un bal¨®n en campo nigeriano y con un solo toque dej¨® al borde del ¨¢rea a Gonzalo Higua¨ªn, que lo baj¨® con el pecho y remat¨® el primer tanto. Un minuto despu¨¦s, Messi rob¨® un bal¨®n en la mitad de la cancha y comenz¨® a correr. Tres nigerianos lo persegu¨ªan, intentaban patear el bal¨®n, pero no se animaban a derribar al jugador rosarino. Messi lleg¨® al ¨¢rea, el portero Dele Ayenugba rechaz¨® el remate, pero finalmente ?ngel Di Mar¨ªa empuj¨® el bal¨®n hacia adentro.

Sabella demostraba en el primer tiempo un mejor rendimiento de Messi que en la era Batista. A diferencia de su antecesor y de Maradona, el nuevo seleccionador puso a Messi como atacante, en compa?¨ªa solo de Higua¨ªn, y no le exigi¨® un papel creativo en el medio campo. La Pulga, de todos modos, se mostr¨® por aqu¨ª y por all¨¢, en buena conexi¨®n con el centrocampista ofensivo Jos¨¦ Sosa. Era otra imagen de aquella Argentina, que con un plantel suplente, hab¨ªa perdido 4-1 con Nigeria en junio pasado en Abuya. Solo el defensa Pablo Zabaleta jug¨® los dos partidos por parte de la albiceleste, mientras que Nigeria repiti¨® casi la misma formaci¨®n.

Pero en el segundo tiempo el equipo de Sabella volvi¨® a mostrar los errores defensivos y las inconsistencias en el dominio del bal¨®n de los ¨²ltimos seleccionados argentinos. Siasia, el entrenador nigeriano, introdujo en el entretiempo al atacante Obasi, que en menos de un minuto de la segunda mitad convirti¨® el 1-2. Pero cuando parec¨ªa que Nigeria estaba m¨¢s cerca del empate, una jugada con el sello del Madrid acab¨® en el tercer gol argentino a los 19 minutos del segundo tiempo. Di Mar¨ªa habilit¨® con un pase al ¨¢rea para Higua¨ªn, que remat¨® suave. Ayenugba rechaz¨® el bal¨®n, que rebot¨® en Taiwo y acab¨® dentro de la porter¨ªa.

Sabella no justific¨® por qu¨¦ eligi¨® a Messi como capit¨¢n, pero algunos comentaristas recuerdan que uno de sus maestros, Carlos Bilardo, hizo lo mismo con Maradona en los 80. Antes del partido con Nigeria, La Pulga, de 24 a?os, que el a?o pasado se convirti¨® en el m¨¢s joven capit¨¢n del seleccionado argentino, dio su versi¨®n: "Se dec¨ªa que no soy l¨ªder o no pod¨ªa ser capit¨¢n. Hay muchas otras cosas que hacen falta para ser capit¨¢n, que hay que demostrar. Me gan¨¦ el respeto de mis compa?eros y eso es lo fundamental". Tambi¨¦n se refiri¨® a su sequ¨ªa goleadora con Argentina: "Hago goles de todas las maneras con Barcelona, hasta casi sin querer, y ac¨¢ (en la selecci¨®n) los busco de todas maneras y no los encuentro. La mayor¨ªa de las veces, capaz es eso, tener la tranquilidad para cambiar, para delante de situaciones no tener la presi¨®n esa de querer hacer el gol".