M¨¢rquez no podr¨¢ correr en Malasia tras su accidente
El piloto promete m¨¢s en Valencia: "Esto no acaba aqu¨ª". -Bradl ser¨¢ campe¨®n hoy si gana la carrera
"No es momento para la ¨¦pica", dec¨ªa el s¨¢bado por la tarde Emilio Alzamora. Su m¨¢xima preocupaci¨®n era la salud de Marc M¨¢rquez, su representado, su pupilo. Se marcharon ambos para el hotel deseando despertar al d¨ªa siguiente y que los problemas se hubieran desvanecido, como si todo aquello hubiera sido una cruel pesadilla. Pero cuando el piloto se levant¨® la ma?ana del domingo sus problemas f¨ªsicos no hab¨ªan mejorado lo suficiente. No estar¨¢ en la parrilla de salida del GP de Malasia, donde se jugaba el t¨ªtulo de campe¨®n del mundo de Moto2, a tres puntos como est¨¢ del l¨ªder, el alem¨¢n Stefan Bradl, que podr¨ªa lograr el campeonato en su ausencia hoy mismo si gana la carrera.
No le ha acompa?ado la suerte lo suficiente al peque?o genio de Cervera (Lleida) en el tramo final de la temporada. Un accidente la ma?ana del viernes, sobre una pista empapada en una curva que se convirti¨® en una trampa fatal, le dej¨® sin fin de semana (tambi¨¦n a Bradley Smith, con una fisura en la clav¨ªcula y una contusi¨®n en las costillas). M¨¢rquez, sin fracturas pero con fuertes contusiones en la zona cervical, la cabeza y el pie, hizo de tripas coraz¨®n la tarde del s¨¢bado para dar tres vueltas al circuito y lograr un tiempo que le permitiera estar en la parrilla, aunque fuera el ¨²ltimo (el pen¨²ltimo en este caso), como le ocurri¨® en Australia por sanci¨®n. Sin embargo, lo que su talento le permite (en solo dos vueltas lanzadas se apunt¨® el tiempo necesario, cinco segundos m¨¢s lento que el primero), no se lo garantiza su f¨ªsico. Su visi¨®n no es perfecta, y la sucesi¨®n de golpes, tres ca¨ªdas en siete d¨ªas, desaconseja su presencia en la pista.
"Ha tenido dos accidentes bastante graves es solo una semana, con dos contusiones cerebrales. Lo mejor es parar, porque un tercer golpe en la cabeza podr¨ªa ser muy peligroso, se arriesgaba a lo que se llama s¨ªndrome del segundo impacto", explicaba el doctor Michele Zasa. A su izquierda, el chico, con dos ojos morados, un corte en la barbilla, heridas en la rodilla y el pecho, las cervicales constracturadas y el cuerpo molido a palos, explicaba sus dolencias: "Lo que me frena es la falta de visi¨®n en el ojo izquierdo, no veo del todo bien cuando me giro. Y eso me impide salir a pista. Cuando me ca¨ª, me dobl¨¦ mucho el cuello y, al parecer, hay un nervio inflamado que es lo que me hace no estar muy bien. Puedes correr con alg¨²n hueso roto, pero la cabeza y la visi¨®n son fundamentales para ir en moto. Cuando no se puede, no se puede", dec¨ªa, al tiempo que esbozaba una sonrisa. "?Qu¨¦ le vamos a hacer!", respond¨ªa cuando se le preguntaba por su optimismo. "Moralmente estoy bien, fue una ca¨ªda extra?a y sal¨ª malparado. Que no sea un error propio fastidia bastante, pero ahora solo quiero recuperarme para ir a Valencia e intentar ganar la carrera".
Su entereza era sorprendente. Pod¨ªa haber perdido el t¨ªtulo, al que no aspiraba al inicio del curso, pero present¨® candidatura a base de victorias y haza?as irrepetibles, como cuando la semana pasada se subi¨® al podio en Australia despu¨¦s de salir el 38?. "No est¨¢ todo perdido, ni esto se acaba aqu¨ª. Estar¨¦ en Valencia para volver a ganar y el a?o que viene habr¨¢ m¨¢s. Si Dios quiere tendr¨¦ una carrera muy larga", se?al¨®. "Sab¨ªamos que pod¨ªa ganar el campeonato, pero es un chico de 18 a?os, hay que mirar por su salud, podr¨¢ ganar en el futuro", zanj¨® el doctor.
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