La Rep¨²blica independiente de los futbolistas de Sud¨¢n

La selecci¨®n sudanesa de f¨²tbol es una rareza, un grupo extra?o por homog¨¦neo. Solo juega con Sud¨¢n quien juega en Sud¨¢n. Contar con dos o tres jugadores curtidos en las mejores ligas europeas suele marcar la diferencia en la Copa ?frica, pero Sud¨¢n (120 del mundo) se ha presentado en esta edici¨®n con una plantilla ¨ªntegramente formada por futbolistas que disputan la liga nacional. Y con ellos se ha plantado en los cuartos de final. Ha dejado en la cuneta a dos selecciones con m¨¢s pedigr¨ª (Angola y Burkina Faso, 83? y 62? del r¨¢nking FIFA, respectivamente) y aspira a derrotar a Zambia en el duelo de esta tarde en Bata (17.00, Eurosport).

El caso de la selecci¨®n sudanesa es especialmente llamativo en el contexto futbol¨ªstico actual. Los clubes europeos reclutan jugadores africanos cada vez m¨¢s j¨®venes, vali¨¦ndose de la intermediaci¨®n de las escuelas de f¨²tbol, y el Acuerdo de Cotonou, suscrito en el a?o 2000 entre la UE y 78 pa¨ªses de ?frica, Caribe y Pac¨ªfico, que evita que los futbolistas de casi todos los pa¨ªses africanos ocupen plaza de extracomunitarios en el f¨²tbol europeo. El resultado es que Europa ha enviado 184 futbolistas a Guinea Ecuatorial y Gab¨®n, donde se disputa el torneo. A ello hay que a?adir la pujanza econ¨®mica de los clubes saud¨ªes, representados en selecciones como la guineana, la marroqu¨ª o la costamarfile?a. A todo esto es ajena la selecci¨®n de Sud¨¢n.

El hecho de que todos los jugadores residan en el pa¨ªs priva al equipo de experiencia competitiva internacional, pero tiene ventajas. "Podemos juntar a los jugadores mucho m¨¢s frecuentemente que otros equipos", declar¨® el seleccionador, Mohammed Abdullah, despu¨¦s de la victoria ante Burkina Faso (2-1) que certific¨® la primera clasificaci¨®n de Sud¨¢n para los cuartos de final en los ¨²ltimos 40 a?os. La frase se explica mejor si se atiende al hecho de que el Al-Hilal y el Al Merreikh, los dos clubes que aportan el grueso de la selecci¨®n nacional, comparten casa en Omdurdan, en la orilla izquierda del r¨ªo Nilo y frente a la capital sudanesa, Jartum. "Intento reunirlos cada semana", dice el seleccionador. El buen nivel de los clubes sudaneses en las competiciones continentales explica tambi¨¦n que Abdullah no haya tenido que buscar fuera lo que tiene en casa. El Al Hilal (nueve jugadores en la selecci¨®n) alcanz¨® las semifinales de la Liga de Campeones africana en 2007, 2009 y 2011, y el Al Merreikh (10) fue finalista de la Copa Confederaciones africana de 2007. Los dos clubes suelen repartirse tambi¨¦n los campeonatos nacionales (26 para el Al-Hilal; 18 para el Al Merreikh, incluido el ¨²ltimo).

Otro factor que explica la reticencia de los sudaneses a hacer las maletas es el dinero y el reconocimiento social del futbolista profesional en el pa¨ªs. Los contratos televisivos y de patrocinio son relativamente altos y el campeonato retiene a sus mayores talentos. Haytham Tambal es el m¨¢ximo goleador hist¨®rico de la selecci¨®n sudanesa con 21 tantos en 20 partidos. Prob¨® suerte en los Orlando Pirates de Sud¨¢frica en la temporada 2007-2008, jug¨® un partido y volvi¨® a Sud¨¢n. Hoy se mantiene en el Al Merreikh, aunque no ha sido seleccionado.

La ¨²ltima selecci¨®n que se clasific¨® para la fase de cruces con un equipo formado solo por jugadores que disputaban la liga nacional fue T¨²nez, en 1996. Ocho campeonatos se han disputado desde entonces y ninguna hab¨ªa repetido la gesta. Sud¨¢n ha conseguido reverdecer laureles olvidados hace tiempo: campeona de la edici¨®n de 1970, solo hab¨ªa participado en dos torneos desde entonces -el ¨²ltimo en 2008-, sin pasar de la primera fase. Ahora, a la Rep¨²blica independiente de los futbolistas de Sud¨¢n le toca Zambia.