"Queda claro que no me he dopado"

Experto en demasiadas tardes de expectaci¨®n m¨¢xima detr¨¢s de los micr¨®fonos, el ¨ªdolo Alberto Contador -muy serio, las patillas finas, continuaci¨®n perfecta, lineal, de la cicatriz que recorre su cr¨¢neo, recuerdo t¨¢ctil y visual de su pasado m¨¢s duro, el del cavernoma que en 2004 le dej¨® al borde de la muerte, la l¨ªnea de su memoria- subi¨® firme y decidido, entre aplausos de la claque, al escenario en un hotel de Pinto.

El ambiente -casi asambleario pese a las c¨¢maras, gente tirada por el suelo con ordenadores sobre las rodillas, ancianos, mujeres y ni?os de pecho que llevaban horas guardando su sitio y vitoreando a su as, ?scar Pereiro entre ellos, l¨ªder natural de los indignados- era el decorado ideal para una escena de catarsis, la peripecia del h¨¦roe que se busca tras el error involuntario que hundi¨® su vida.

Pero Contador, de Pinto, de 29 a?os, dos (tres) Tours, un Giro (dos), una Vuelta en sus piernas, no es de esos. Para ¨¦l era, como siempre, una oportunidad para reivindicarse, v¨ªctima del sistema. "He vivido un calvario de a?o y medio que no se lo deseo a nadie", dijo; "por favor, y lo digo pensando en el futuro, que se logre hacer m¨¢s cortos los procesos".

Pese a ello, se mostr¨® exquisito, prudente, evasivo, ante preguntas que le invitaban a criticar a la Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI), su presunta codicia recaudatoria; al TAS, al sistema. "La UCI era una parte en el proceso", dijo en medio de la cacofon¨ªa y el caos de tantas voces chillando a la vez alrededor de la mesa que comparti¨® con su jefe, Bjarne Riis, quien con su presencia mostr¨® expreso su apoyo, y los jefes de prensa del equipo y el suyo personal. "Cada uno est¨¢bamos en un lado y no voy a valorar su comportamiento", apostill¨®.

Cuando le preguntaron si se sent¨ªa perseguido, respondi¨®: "Se dicen cantidad de cosas y se pueden pensar muchas m¨¢s, pero que cada uno saque sus propias conclusiones. Voy a seguir muchos a?os en este mundillo y no voy a valorar eso".

"Me queda la satisfacci¨®n de que la resoluci¨®n del TAS [Tribunal Arbitral del Deporte], sus 98 folios, dejan claro que no me he dopado", a?adi¨®, casi desafiante, para marcar el territorio y el tono; "me queda el sentimiento de inocencia". Con ello, Contador explic¨® por qu¨¦ ha decidido seguir siendo ciclista pese a que, cuando le comunicaron el positivo, prometi¨® que lo dejar¨ªa si le sancionaban: "Voy a seguir en el ciclismo, seguir de forma limpia, como lo he hecho toda mi vida, como marcan los valores de honradez, justicia y disciplina que me han ense?ado desde peque?ito. Ahora estoy bajo de moral, pero estoy seguro de que esto me har¨¢ m¨¢s fuerte en el futuro".

La resoluci¨®n del TAS, en efecto, se?ala que se le sanciona por una infracci¨®n al reglamento antidopaje -si no, ser¨ªa imposible sancionarle, claro- y que, dentro de las tres posibilidades que ante los ¨¢rbitros ofrecieron las partes -carne, sangre, suplementos-, la que m¨¢s peso dio en la balanza de probabilidades fue la de los suplementos energ¨¦ticos: tambi¨¦n se puede entender que el TAS piensa que no se puede afirmar no que se haya dopado, sino que no se ha dopado. "Consumo suplementos, pero no han demostrado ni intencionalidad ni negligencia. Y, pese a ello, me han aplicado la pena m¨¢xima y me han borrado un Tour y un Giro. Y [aplausos y v¨ªtores de su gente de Pinto], en cuanto a esto, no soy una persona que busque un palmar¨¦s lleno de n¨²meros de victorias. Yo me quedo, y disfruto, con el recuerdo que pueda tener de ellas la gente en sus retinas y con la satisfacci¨®n del trabajo bien hecho. Por eso, por m¨¢s vueltas que le doy, no llego a entender la decisi¨®n".

Entre periodistas de toda Europa, c¨¢maras de todo tipo de televisiones y programas, fans familiares y amigos, tambi¨¦n se encontraban entre los asistentes a las primeras palabras de Contador tras la sanci¨®n parte de su equipo de abogados: Mike Morgan, Luis Bardaj¨ª, Andy Ramos y Gorka Villar. Si Contador dijo que a¨²n no sab¨ªa si recurrir¨ªa la sanci¨®n a un tribunal ordinario, el federal helv¨¦tico, pero que pelear¨ªa hasta el final -"les he dicho que quiero luchar hasta que se pueda"-, su entorno tampoco aclar¨® si presentar¨¢n un recurso que se resolver¨ªa dentro de meses y que no suspender¨ªa el cumplimiento de la sanci¨®n. "Lo estamos estudiando", dijo Villar, "pero ser¨¢ ¨¦l quien decida".