Un minero reanima a los artistas
La energ¨ªa de Alexis entona a un Bar?a que recupera ante el Bayer su versi¨®n m¨¢s reconocible
Un joven minero chileno dispuesto a ser una celebridad reanim¨® al art¨ªstico Bar?a en Leverkusen. A veces, los mejores equipos, aquellos que se distinguen por su juego de sal¨®n, precisan de un futbolista diferente, capaz de cambiar din¨¢micas negativas. Nadie duda de la calidad del Barcelona. La mayor¨ªa de sus futbolistas son una celebridad. Ahora, sin embargo, andan preocupados desde que quedaran descolgados de la Liga. No es extra?o por tanto que ayer jugaran con cautela y muy responsabilizados. Necesitan reencontrar al famoso Messi. Mientras, los partidos pasan y se requieren valientes como Alexis.
La agresividad del chileno fue la mejor terapia para combatir la tristeza del equipo y especialmente la de su amigo Messi, que cerr¨® el partido con un gol despu¨¦s de tirar una pared con Alves. Busca reprogramarse el Bar?a y jugadores como Alexis ayudan a combatir la melancol¨ªa. A partir de la imperfecci¨®n, los azulgrana aspiran a volver a ser alg¨²n d¨ªa perfectos y Messi quiere volver a ser Messi. Hoy est¨¢n al inicio, o si se quiere a mitad de camino, suficiente para ganar al Bayer, un equipo con muchos pies y menos cabeza. Nada mejor que mirar a la alineaci¨®n para entender los males del Bar?a. Hay jugadores que no est¨¢n finos, y el entrenador se?al¨® a Piqu¨¦, al que mand¨® a la tribuna en una decisi¨®n sin precedentes en los tres a?os de jerarqu¨ªa azulgrana. Tambi¨¦n se cuentan futbolistas que entran y salen, magullados por tanta tralla, como Xavi, descartado por culpa del s¨®leo. Y en los momentos dif¨ªciles se impone la experiencia y la polivalencia, la de Adriano por ejemplo, en lugar del atrevimiento de j¨®venes con la chispa de Cuenca y Tello, que completaron un banquillo ¨ªntegramente de la cantera, a excepci¨®n de Pinto.
BAYER LEVERKUSEN, 1 - BARCELONA, 3
Bayer Leverkusen: Leno; Corluka (Da Costa, m. 91), Schwaab, Friendrich, Kadlec; Reinartz, Rolfes (Kiessling, m. 77); Bender, Castro, Sch¨¹rrle (Bellarabi, m. 90); y Renato Augusto. No utilizados: Yelldell; Oczipka, Ortega y Toprak.
Barcelona: Vald¨¦s; Alves, Mascherano, Puyol, Abidal; Cesc, Busquets, Iniesta (Thiago, m. 60); Alexis (Cuenca, m. 85), Messi y Adriano (Pedro, m.69). No utilizados: Pinto; Dos Santos, Sergi Roberto y Bartra.
Goles:0-1. M. 41. Alexis, a pase de Messi. 1-1. M. 52. Kadlec, de cabeza. 1-2. M. 55. Alexis. 1-3. M. 88. Messi, a centro de Alves.
?rbitro: Craig Alexander Thomson (Escocia). Amonest¨® a Schwaab, Corluka, Castro y Thiago.
Bay Arena: unos 30.000 espectadores.
No es f¨¢cil jugar bien sin Xavi, al menos como acostumbra el Bar?a, porque el volante marca el estilo, impone la pausa, mastica la jugada para que la pelota llegue a pies de Messi. Ni resulta sencillo sacar la pelota del ¨¢rea y tirar la l¨ªnea de pase sin la determinaci¨®n de Piqu¨¦. El equipo azulgrana, sin embargo, recuper¨® una de sus versiones m¨¢s reconocibles y acad¨¦micas con la presencia de Busquets, Cesc e Iniesta. Apretados por la defensa y auxiliados por Messi, los centrocampistas del Bar?a gobernaron el partido desde la salida, nada que ver con sus anteriores actuaciones. Los azulgrana desplegaron el rondo, se aseguraron la posesi¨®n del bal¨®n, maduraron a conciencia el encuentro y procuraron acabar cada jugada para no facilitar el contragolpe del Bayer, exigido en su propia cancha y confiado exclusivamente a un f¨²tbol muy directo. No hab¨ªa noticia de los porteros bajo el aguanieve. La concentraci¨®n defensiva del Bayer era tan extrema como la paciencia del Barcelona. El partido se convirti¨® en un thriller que incluso hipnotiz¨® a la hinchada.
Tocaban y tocaban los azulgrana, sin posibilidad de acelerar ni de desequilibrar, pendientes de las rupturas de Alexis. Iba y ven¨ªa el chileno, amagando y profundizando, esperando un pase filtrado de los volantes o de Messi. Una y otra vez corr¨ªa el campo a trav¨¦s y no hab¨ªa manera de que le llegara el cuero por la excelente aplicaci¨®n de la zaga local. Hasta que decidi¨® convertirse en el origen y final del gol: le rob¨® la pelota a Kadlec, toc¨® para Messi y se desmarc¨® a la carrera, para habilitar el pase al espacio de la Pulga. Recibi¨® la bola el chileno, la control¨® y la meti¨® por entre las piernas de Leno. A la primera acert¨® el Bar?a. Ocurri¨® cuando presion¨® y fue valiente, en el momento en que perdi¨® el miedo y atac¨® al portero. Antes quiso evitar cualquier frivolidad y a menudo fue excesivamente prudente. No quer¨ªa asumir riesgos y necesitaba recuperar sensaciones. Hab¨ªa como un pacto en la cancha por el que no se pod¨ªa rifar ning¨²n bal¨®n sino que se impon¨ªa encontrar a Alexis. Y as¨ª ocurri¨® con el 1-2, despu¨¦s de una asistencia de Cesc. La combatividad del chileno result¨® decisiva para rescatar de un apuro al Bar?a, sometido a ratos por el poder¨ªo del Bayer, un equipo que ataca en oleadas, con arrebatos e intimidaci¨®n.
Los alemanes regresaron hechos una fiera del vestuario y no pararon hasta empatar. Atacaban todos. A nadie le extra?¨® que la jugada del empate fuera protagonizada por los laterales: Corluka y Kadlec. No pararon ni cuando recibieron el segundo tanto de Alexis y rozaron el empate en tres ocasiones, todas salvadas por un excelente Vald¨¦s. Al Barcelona le llev¨® un buen rato controlar el partido, evitar el ir y venir propuesto por el Bayer. Hasta que reapareci¨® la figura goleadora de Messi y puso el 1-3 en honor de su amigo Alexis. Un minero que triunfa en un equipo de artistas.
Guardiola elogia el arte de competir del equipo
Admiti¨® el entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, que su equipo estuvo mejor en el segundo tiempo que en el primero. Algo que, dijo, ya esperaba. "Uno no puede esperar venir a Alemania y que no le hagan ocasiones de gol. Son muy fuertes, rapid¨ªsimos al espacio, y muy profundos. Pero nosotros tambi¨¦n hemos generado muchas ocasiones en la segunda parte", defendi¨®. El t¨¦cnico se confes¨® satisfecho, porque su equipo va "dando pasitos" y se ve hoy m¨¢s cerca de los cuartos de final de la Champions.
Su satisfacci¨®n se explica en el trabajo, continuado, de sus futbolistas: "Solo se dice que hemos jugado bien cuando ganamos por cuatro goles a cero; pero tengo la sensaci¨®n de que no es que estemos regular, es que antes estuvimos muy bien. Estos futbolistas son unos artistas a la hora de competir", a?adi¨®.
Siguieron con el mismo discurso hombres como Cesc: "Hab¨ªa razones para jugar como lo hicimos en la primera parte; parece aburrido, pero era lo que ped¨ªa el partido de hoy, ten¨ªamos que cansarlos porque son un equipo muy f¨ªsico", explic¨®. Y aunque reconoci¨® que la derrota en Pamplona dej¨® al vestuario muy tocado ¡ª"fue un palo duro"¡ª, las ganas de ganar siguen intactas: "Siempre tenemos la misma ilusi¨®n. El m¨ªster no dejar¨¢ que nos rindamos", apunt¨®.
Y pronunci¨® un deseo: "A ver si podemos ahora recortarle puntos al Madrid", dijo en referencia a la Liga el d¨ªa en que volvi¨® Busquets ¡ª"Estoy un poco cansado y dolorido. Tengo una herida muy profunda y con muchos puntos de sutura"¡ª y se retir¨® Adriano, sustituido por precauci¨®n, pues ten¨ªa unas molestias en el s¨®leo de la pierna derecha. El Bar?a no recuerda una derrota europea desde el 16 de febrero del a?o pasado. Cay¨® en campo del Arsenal, tambi¨¦n en la ida de los octavos de final de la Champions.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.