¡°?Pero chuta!¡±

El Barcelona no vio puerta en Mil¨¢n, toda una noticia. El actual campe¨®n de Europa no se quedaba sin marcar en un partido de la Champions desde que se le hel¨® la p¨®lvora y empat¨® (0-0) en Kaz¨¢n el 4 de noviembre de 2009 contra el Rubin. Veintinueve partidos consecutivos llevaba marcando en Europa. Hasta el del mi¨¦rcoles. No ser¨¢ que no lo intent¨®. Atac¨® bien y tuvo ocasiones: 18 remates se le contabilizaron. ¡°Eso tiene mucho valor¡±, destac¨® Pep Guardiola. ¡°La sensaci¨®n de juego ha sido buena¡±, apostill¨® Mascherano.

El caso es que el Bar?a domin¨® el partido y remat¨® mucho, pero mal. Solo seis tiros vieron la porter¨ªa. Tuvo mucho la pelota, pero le cost¨® moverla con fluidez y tampoco el Milan le dio opciones para encontrar rendijas: rara fue la jugada de ataque azulgrana que no encontr¨® cinco milanistas esperando al borde de su ¨¢rea. El equipo lleg¨® a Milan con una media de 3,75 goles por partido y se sec¨®. Le falt¨® el instinto de su ¨²ltima visita a San Siro, este mismo curso en la fase de grupos, cuando encontr¨® m¨¢s espacios, lleg¨® menos y decidi¨® mejor para ganar (2-3).

En la comparaci¨®n entre estos dos ¨²ltimos partidos falta un nombre: Villa. Jug¨® El Guaje el pasado noviembre y fue el m¨¢s tenaz de los atacantes del Barcelona: remat¨® cinco veces (una m¨¢s que Messi) y, aunque el asturiano no marc¨®, aport¨® esa querencia vertical y esa facilidad para enfocar la puerta. Justamente el ego¨ªsmo que se le echa en falta a Alexis. ¡°?Pero chuta!¡±, grit¨®, desesperado, Iniesta al chileno despu¨¦s de que combinara con Xavi cuando pod¨ªa haber tirado. Alexis solo remat¨® una vez en todo el partido. Si en Palma no tuvo reparos en reconocer que no lleg¨® a tocar el bal¨®n en el primer gol del Bar?a y se?al¨® a Messi, en Mil¨¢n, de nuevo, confundi¨® el grano y la paja. Le cost¨® reclamar protagonismo individual. ¡°Est¨¢ aprendiendo¡±, le disculpan en el vestuario. ¡°Paciencia¡±, piden en el cuerpo t¨¦cnico, satisfechos del rendimiento del joven sudamericano, todav¨ªa en fase de adaptaci¨®n futbol¨ªstica y personal.

¡°Me voy mal porque el equipo no gan¨®. Y, sin hacer un gran partido, lo mereci¨® m¨¢s¡±, reivindic¨® Messi

¡°Nos falt¨® el gol¡±, resumi¨® Messi tras el partido. Como acostumbra, el argentino tir¨® m¨¢s que ning¨²n otro compa?ero (seis remates, dos a puerta) y admiti¨® irse con mal cuerpo de San Siro. ¡°Me voy mal porque el equipo no gan¨®. Y, sin hacer un gran partido, lo mereci¨® m¨¢s¡±, reivindic¨® La Pulga, que lleva 12 goles en los ocho partidos que ha jugado este curso en Europa y al que cada vez es m¨¢s frecuente ver en el campo dar ¨®rdenes a sus compa?eros, en especial a los m¨¢s j¨®venes.

¡°?Levanta la cabeza!¡±, le dijo a Cuenca contra el Granada. ¡°?Centra!¡±, reclam¨® a Tello en una jugada contra el Milan cuando desbord¨® y tir¨® a puerta buscando el palo corto de Abbiati. ¡°Hace tiempo que no juega solo pensando en ¨¦l, que aprendi¨® a escoger en funci¨®n de la necesidad del juego¡±, resalt¨® hace meses Menotti.

Messi es el l¨ªder indiscutible del Barcelona y, en consecuencia, aconseja y manda como corresponde al tres veces bal¨®n de oro, como si, en vez de 24 a?os, fuera un veterano de 31. Como Di St¨¦fano, Pel¨¦ o Cruyff, Messi ha llegado a saber lo que tiene que hacer ¨¦l y lo que deben hacer los dem¨¢s. ¡°Confiamos en tener m¨¢s acierto en la vuelta. Ser¨¢ importante marcar pronto para que se abran¡±, concluy¨® se?alando el camino que debe llevar al Bar?a a las semifinales de la competici¨®n.