Milagro a coste cero en Vallecas
El Rayo, en concurso de acreedores, no ha gastado ni un euro en fichajes desde 2007
La dignidad de la ropa tendida en los bloques de viviendas de ladrillo visto que rodean al estadio de Vallecas, el olor a las frituras del f¨²tbol ma?anero que emana de los bares de los bulevares adyacentes al feudo franjirrojo... Cuando aterriz¨® en el Rayo Vallecano, ese paisaje cotidiano trasladaba a Piti, ¨²nico superviviente junto al capit¨¢n, M¨ªchel, de la escalada de Segunda B a Primera, a las Cinco Rosas, la barriada humilde de Sant Boi en la que se cri¨®.
¡°Cuando llegu¨¦, la Primera se ve¨ªa un poco lejos, aunque el objetivo era ir paso a paso¡±, recuerda Piti, que hab¨ªa debutado con el Zaragoza en la ¨¦lite y que no sab¨ªa si volver¨ªa a ser jugador de la m¨¢xima categor¨ªa. ?l marca tres claves que han obrado el milagro de que un club actualmente en situaci¨®n concursal y que dej¨® de pagar a su plantel en plena pelea por el ascenso a Primera la campa?a pasada haya conseguido llegar hasta lo m¨¢s alto del f¨²tbol espa?ol y mantenerse pese a las turbulencias internas que lo acecharon y a¨²n le agobian (recientemente, los administradores han denunciado al entrenador, Jos¨¦ Ram¨®n Sandoval, y a los jugadores por cobros indebidos acus¨¢ndoles de mala fe al firmar los acuerdos contractuales con la entidad).
¡°El sentir de la gente de Vallecas, que cuando te pones la camiseta te hace pensar que juegas para trabajadores humildes; la fuerza del bloque ante los impagos y el ojo para fichar del director deportivo, Felipe Mi?ambres, han sido fundamentales para este milagro¡±, analiza el interior zurdo, obsequiado con una pe?a que lleva su nombre y fundamental en la pizarra de Sandoval. ¡°Cuando vine al Rayo, mi objetivo era disfrutar como futbolista y he podido comprobar que mi f¨²tbol, mis regates y mis pases, pese a venir de Segunda B, son v¨¢lidos para Primera¡±, comenta.
¡°El sentir de la gente de Vallecas, la fuerza del bloque ante los impagos y el ojo para fichar de Felipe Mi?ambres han sido fundamentales para este milagro¡± Piti, jugador del Rayo Vallecano
Mi?ambres, ex jugador del Sporting y el Tenerife y mundialista espa?ol en Estados Unidos 1994, aterriz¨® en el Rayo en 2007 de la mano de sus antiguos propietarios, la familia Ruiz-Mateos. Desde entonces, cada temporada ha tenido que dise?ar una plantilla nueva sin gastar un euro en fichajes. De todas las contrataciones realizadas, elige las de Diam¨¦, Lass y Michu como paradigmas de su trabajo. ¡°A Diam¨¦, que estaba en el Linares, lo descubrimos porque segu¨ªamos a un jugador del Talavera. En cuanto le vi, me dije: ¡®Lo tenemos que hacer como sea¡¯. ?bamos a verle y muchas veces no jugaba. Ten¨ªa otras ofertas y fue un fichaje dif¨ªcil¡±. Fue la singularidad de Vallecas, cuya afici¨®n entona como grito de guerra una versi¨®n de La Marsellesa, lo que le llev¨® hasta el Rayo: ¡°Ten¨ªa un compa?ero en el Linares que le explic¨® lo que era Vallecas y jugar para nosotros y tambi¨¦n que estar en Madrid ser¨ªa un gran escaparate para ¨¦l. Le traspasamos al Wigan por cuatro millones de euros¡±. Diam¨¦ sinti¨® el mismo calor que ahora siente Diego Costa, cedido gratis por el Atl¨¦tico junto a Pulido y Joel y fundamental con sus goles en la permanencia: ¡°Ven¨ªa de una lesi¨®n complicada y sus compa?eros apenas le entraban en los entrenamientos. En cuanto se ca¨ªa al suelo, todos iban a ver qu¨¦ le ocurr¨ªa porque sab¨ªan de su importancia. Aqu¨ª se siente la estrella y eso ha sido clave para su rendimiento¡±.
Tiene asumido Mi?ambres que el Rayo necesita ser un club vendedor para sobrevivir. Sin dinero para pagar fichajes, la anticipaci¨®n y la confianza que transmita sobre el club a la hora de negociar con los representantes y familiares de los jugadores que desea contratar son sus ¨²nicas bazas. ¡°Yo no puedo ir con el dinero por delante porque no pagamos mucho. Si acaso, a los extranjeros, que dudan m¨¢s, les puedo ofrecer una parte del porcentaje de un futuro traspaso. Los agentes y las familias de los futbolistas te preguntan por el concurso de acreedores, por la situaci¨®n del club, por las garant¨ªas de cobro... Es normal. Yo solo puedo darles mi palabra y que ellos me crean. Eso sucedi¨® con Michu, que quer¨ªa venir, pero su fichaje se retras¨® por la burocracia a la que te obliga estar en ley concursal. Tambi¨¦n tuvimos suerte porque sus representantes se lo ofrecieron a muchos equipos de Primera y ninguno le quiso¡±.
Sin dinero para pagar fichajes, la anticipaci¨®n y la confianza que transmita a la hora de negociar son las ¨²nicas bazas del Rayo Vallecano
Las aventuras europeas de futbolistas africanos en busca de un futuro econ¨®mico es otra de las fuentes de las que trata de abastecerse el Rayo. ¡°No pagamos su estancia cuando vienen a probar. Se la costean sus agentes. Lass lleg¨® as¨ª¡±, recuerda Mi?ambres; ¡°hace poco, un t¨¦cnico de las categor¨ªas inferiores me preguntaba: ¡®?Pero cu¨¢ntos m¨¢s me vas a traer a probar?¡±. ¡°Con que nos salga bien uno, ya es suficiente. Lass, con muchas novias y revalorizado, es el ejemplo¡±, le respond¨ª. Un futuro traspaso del camerun¨¦s puede incrementar los seis millones de euros que ha hecho ingresar al club el director deportivo sin pagar nada a cambio.
Mi?ambres tambi¨¦n se?ala a Sandoval como art¨ªfice de los ¨¦xitos: ¡°Fue ¨¦l quien se reuni¨® con los Ruiz-Mateos y les convenci¨® de que le dieran el primer equipo. Es muy atrevido, por ejemplo, a la hora de contar con la cantera. A Lass le hizo debutar desde el juvenil sin pasar por el filial de Segunda B¡±. ¡°Tambi¨¦n el m¨ªster ha sido atrevido con el estilo porque nosotros no sabemos jugar a defendernos y eso lo ha mantenido. No hemos sido el t¨ªpico equipo reci¨¦n ascendido que se refugia en su ¨¢rea y busca el 1-0¡±, matiza Piti.
Con la permanencia ya lograda, el camino hacia otra temporada de supervivencia en Primera tiene las mismas piedras. Hacer otro equipo en el que la defensa es objetivo prioritario. ¡°Tengo varios jugadores apalabrados, pero la burocracia de la ley concursal me impide cerrarlos¡±, asegura Mi?ambres, que tambi¨¦n mira a la cantera como un vivero necesario para el club. Sin embargo, aqu¨ª tambi¨¦n tiene amenazas muy cercanas: ¡°El Madrid se llev¨® a una docena de juveniles la temporada pasada y no nos dieron nada a cambio, ni siquiera unos balones¡±. ¡°Nosotros tambi¨¦n nos llevamos jugadores de clubes m¨¢s peque?os, pero, en la medida de nuestras posibilidades, intentamos darles algo¡±, concluye Mi?ambres, a punto de emprender otro de sus viajes semanales para buscar talentos a coste cero donde otros no miran o lo hacen m¨¢s tarde.
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