Silencio, juega Nasri
El mediapunta, ninguneado por el exseleccionador Raymond Dom¨¦nech, brilla con Laurent Blanc y rasga a Inglaterra
Ars¨¨ne Wenger le llam¨® al m¨®vil nada m¨¢s enterarse de la noticia. ¡°Entre nosotros todo sigue igual. No te preocupes. Haz unas buenas vacaciones y vuelve tranquilo¡±, le dijo el t¨¦cnico del Arsenal en tono paternal, como siempre hace con sus futbolistas, la mayor¨ªa j¨®venes talentos por explotar. Samir Nasri (Marsella, Francia; 1987) le agradeci¨® el gesto, pero le pudo la furia. ¡°Respeto al entrenador, pero no lo entiendo y estoy decepcionado. Dicen que me he comportado mal. ?Cu¨¢ndo?¡±, solt¨®, desgarrado, impotente. Resultaba que Raymond Dom¨¦nech, exseleccionador de Francia, le hab¨ªa apartado del Mundial de Sud¨¢frica como ya hiciera con Benzema, m¨¢s atento a los galones que al talento de la generaci¨®n del 87, donde tambi¨¦n est¨¢n Ben Arfa y Menez. ¡°Nasri necesita hablar menos y jugar m¨¢s. Tiene talento, pero es individualista y debe confiar m¨¢s en sus compa?eros¡±. El tiempo, sin embargo, parece haberle dado la raz¨®n al mediapunta, ya en el Manchester City, que se bast¨® con sus movimientos de cintura y pies para desequilibrar a Inglaterra, con su disparo para igualar el duelo.
En 2007, Zidane pidi¨® personalmente darle el premio al mejor jugador joven de la Liga francesa.
Ten¨ªa Nasri ganas de brillar en un gran torneo. Sobre todo porque no solo no viaj¨® a Sud¨¢frica, sino que en la anterior Eurocopa su participaci¨®n se redujo a 32 minutos. Ante los pross, jug¨® todo el encuentro y con Blanc parece claro que dirigir¨¢ todas las ofensivas bleus, toda vez que es su futbolista favorito para el pase definitivo, tambi¨¦n protegido porque no hace tanto se form¨® un revuelo por unas supuestas declaraciones racistas del t¨¦cnico. Y Nasri, como su ¨ªdolo, como el jugador con el que le comparan indefectiblemente a cada buena actuaci¨®n, como Zidane, es marsell¨¦s de ra¨ªces argelinas. ¡°Soy Nasri y punto¡±, se defiende El Peque?o Pr¨ªncipe, como le bautizaron en el V¨¦lodrome, estadio del Marsella; ¡°Zidane s¨®lo habr¨¢ uno¡±. El propio Zizou ¡ªque en 2007 pidi¨® personalmente darle el premio al mejor jugador joven de la Liga francesa¡ª le respald¨®: ¡°Lo que hace en el c¨¦sped es incre¨ªble. Pero siempre ser¨¢ Nasri¡±.
Ante los pross, jug¨® todo el encuentro y con Blanc parece claro que dirigir¨¢ todas las ofensivas bleus
Frente a Inglaterra lo hizo en el Dombass Arena de Donetsk. Y fue un recital. Cobraron de nuevo fuerza las palabras de Albert Emon, esas que expres¨® nada m¨¢s hacerle debutar con el OM: ¡°Cuando ves a todos los jugadores darle el bal¨®n sin vacilar, te das cuenta de que es el coraz¨®n del equipo¡±. En Ucrania no solo fue el que m¨¢s corri¨® de Francia (11.104 metros por los 10.415 de Rib¨¦ry, el segundo en la estad¨ªstica), sino que tambi¨¦n fue el quarterback del equipo ¡ªcomo en esa asistencia que Benzema no pudo definir¡ª y el punto final.
Primero prob¨® un disparo raso, desde el balc¨®n del ¨¢rea, que le cuchiche¨® al palo. Despu¨¦s, solt¨® un latigazo casi id¨¦ntico. La diferencia fue que super¨® a Hart, su compa?ero de equipo en el Manchester City, y envi¨® el bal¨®n a la red. Pero entonces, le volvi¨® a salir la rabia. Se tir¨® el ¨ªndice a la boca e hizo el gesto de mandar callar a alguien. Su objetivo, el peri¨®dico deportivo franc¨¦s L'Equipe que? hab¨ªa criticado su comportamiento en varias informaciones publicadas antes de la Eurocopa.
Acabado el encuentro, Nasri apareci¨® en la sala de prensa con una aparatosa bolsa de hielo en la rodilla derecha. Pero regalaba una sonrisa todav¨ªa m¨¢s grande.
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