¡°Lanzar a lo Panenka no es locura, es clase¡±
Abreu, que ha marcado 22 penaltis ¡°de picada¡±, uno en un Mundial, destaca la valent¨ªa de tirar as¨ª en una gran cita

?scar Tab¨¢rez hab¨ªa decidido que fuese el tercer lanzador, pero ¨¦l pidi¨® que le dejasen el quinto penalti. Se jugaba Uruguay el pase a las semifinales del Mundial de Sud¨¢frica 2010 ante Ghana y Sebasti¨¢n Abreu enfil¨® el camino que separaba el centro del campo, con todos sus compa?eros abrazados ¡ªmenos Su¨¢rez, que se fue al vestuario para no mirar¡ª, del ¨¢rea, donde le esperaba Kingson. Sebasti¨¢n Eguren estaba convencido de lo que iba a pasar. La v¨ªspera, en el entrenamiento, los charr¨²as hab¨ªan ensayado los lanzamientos desde los 11 metros. Abreu ejecut¨® tres y los err¨® todos. El ¨²ltimo, para m¨¢s inri, ¡°de picadita¡±, a lo Panenka. Eguren suspiraba. Pero El Loco le tranquiliz¨®: ¡°Calma, Sebita, que ma?ana yo lo liquido con el sello de la casa¡±.
Ese mismo detalle, la locura elevada a la categor¨ªa de excelencia, con el que Andrea Pirlo, 36 a?os y cuatro d¨ªas despu¨¦s de que Antonin Panenka universalizase una forma de lanzar los penaltis, desestabiliz¨® al meta ingl¨¦s Joe Hart el domingo. ¡°Es un tipo de remate muy particular, muy decisivo, determinante. Es significativo que, normalmente, sean los grandes jugadores quienes lo realizan¡±, comenta Dino Zoff, leyenda italiana bajo los palos, que sufri¨®, ya como seleccionador, a Totti cuando se le ocurri¨® hacer il cucchiao (la cuchara) ante Holanda certificando el pase a las semifinales de la Eurocopa de 2000. ¡°No pensaba que Pirlo pudiese hacerlo. No me lo esperaba, vaya. Es un jugador maravilloso, pero este tipo de acciones te las esperas o las comprendes m¨¢s en futbolistas como Totti, jugadores de fantas¨ªa¡±, a?ade Zoff.
Los 'hijos' de Panenka
- Francesco Totti, en los cuartos de final de la Eurocopa de 2000
- H¨¦lder Postiga, en los cuartos de la Euro de 2004
- Zinedine Zidane, en la final del Mundial de 2006
- El ucranio Artem Milevski, ante Suiza, en los octavos del mismo Mundial
- Sebasti¨¢n Abreu, en el Mundial de 2010, con Uruguay ante Ghana
- Andrea Pirlo, ante Inglaterra, el domingo
¡°Hay jugadores para ganar los torneos y otros para los momentos decisivos¡±, argumenta Abreu, de 35 a?os, consciente, y contento, de encajar en el segundo grupo. La parte psicol¨®gica, explica, es determinante. La batalla mental que se libra entre el portero y el lanzador. ¡°Hay que tener claro que el objetivo es hacer gol, que la pelota acabe dentro, y para ello hay que burlar al arquero, ir contra la l¨®gica. No es una locura, es clase¡±, afirma Abreu, que sabe de memoria sus lanzamientos ¡°de picadita¡±: 24. Solo ha fallado dos. Para el primero, en su etapa en M¨¦xico, tiene excusa: ¡°El portero ten¨ªa 37 a?os y los veteranos no vuelan, sino que se vuelcan. Es algo que hay que tener en cuenta¡±. Para el segundo, ya con el Botafogo, su actual club, tuvo una compensaci¨®n: cuatro minutos despu¨¦s de su desatino, volvi¨® a lanzar otro. De la misma manera. Y lo meti¨®.
Aprendido el error, el delantero uruguayo explica, como si se tratase de una tesis sobre el asunto, que hay que hacerlo en los partidos decisivos, en los que haya algo en juego. Cuando los nervios afloran y la concentraci¨®n es m¨¢xima. Como hizo Panenka en 1976, Totti en 2000 o Zidane seis a?os despu¨¦s, cuando dej¨® en el suelo a Buffon mirando c¨®mo entraba lentito el bal¨®n en la final de un Mundial. Como hizo, en definitiva, Pirlo ante Hart. ¡°Vi que estaba muy motivado. Centrado. Quer¨ªa meterle un poco de presi¨®n. Pens¨¦ que lo m¨¢s f¨¢cil para eso era tirar el penalti como lo tir¨¦¡±, dijo al acabar el encuentro el medio italiano, elogiado por el seleccionador, Cesare Prandelli. ¡°Me ha sorprendido. Me gust¨® que lo hiciera, que quisiera presionarles, porque les ha creado dificultades¡±, resalt¨® ayer el t¨¦cnico azzurro. No era la primera vez que Pirlo lo intentaba. Hace dos a?os, siendo a¨²n jugador del Milan, en un trofeo Joan Gamper vio c¨®mo Pinto, el segundo portero del Barcelona, le deten¨ªa una pena m¨¢xima de igual manera. ¡°En esos momentos quieres que el arquero piense que, como ya lo has hecho antes, como hay mucho en juego, no te vas a atrever. Obviamente, t¨² tambi¨¦n dudas. Piensas que igual te lo puede parar porque lo has intentado otras veces, pero siempre juegas con ventaja: t¨² eres el que toma la ¨²ltima decisi¨®n¡±, asevera Abreu.

Il cucchiao, la picadita, a lo Panenka..., como se quiera llamar, est¨¢ reservado ¡°a los grandes jugadores¡±, recuerda Zoff, que algo sabr¨¢ de penaltis: ¡°Lo importante no deja de ser que el bal¨®n tiene que acabar en la red, en gol, pero solo ellos son capaces de hacerlo as¨ª¡±.
La primera vez que Abreu os¨® rematar de esa forma tan peculiar fue en el ¨²ltimo minuto de la ¨²ltima jornada de la Liga de Invierno de M¨¦xico en 2000. El ¨¢rbitro hab¨ªa decidido que no habr¨ªa m¨¢s jugadas despu¨¦s del penalti. El Loco enganch¨® el bal¨®n y lo clav¨® en las mallas: su tanto n¨²mero 29, el que le dejaba como m¨¢ximo goleador de la competici¨®n en su primera temporada en el Tecos: ¡°Lo que tengo claro es que prefiero decir 100 veces que me equivoqu¨¦ a no pensar una qu¨¦ habr¨ªa pasado si...¡±, rememora Abreu.
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