¡°No s¨¦ dejar la piragua ni en vacaciones¡±
Tras varios homenajes, la medallista Maialen Chourraut se prepara para el Campeonato de Espa?a la pr¨®xima semana
No es muy de celebraciones, pero no le ha quedado otra. Una medalla en unos Juegos, en un deporte en el que un fallo te puede dejar en ascuas, bien lo merece. Maialen Chourraut lleg¨® ayer a Euskadi, por la noche, al aeropuerto de Hondarribia, donde fue recibida por decenas de personas que la llevaron hasta las inmediaciones de la playa de La Concha. All¨ª, el Club Atl¨¦tico San Sebasti¨¢n, su equipo ten¨ªa preparado un homenaje a toda la delegaci¨®n de pirag¨¹ismo de aguas bravas. Pero eso fue el fin de fiestas, el m¨¢s emotivo quiz¨¢s ¨C¡°con la familia, los amigos..¡±- que se prolong¨® hasta casi la una de la madrugada, ¡°muy tarde para lo que han sido estos d¨ªas¡±, concede la palista guipuzcoana.
El traj¨ªn de Chourraut, en realidad, comenz¨® el jueves, pasadas las cinco y media de la tarde, en el Canal de Lee Valley, en Londres. Hab¨ªa bajado por ¨²ltima vez ese torrente de 300 metros que tanto le gust¨® la primera vez que lo vio, el a?o pasado. Con cara de circunstancias. Hab¨ªa concluido en tercera posici¨®n y faltaba una palista por descender. ¡°Fue una bajada muy dura, y yo quer¨ªa el oro¡±, ha recalcado muchas veces, todav¨ªa lo hace, Chourraut. Pero aquella cara le cambi¨® al instante, consciente de que lo que hab¨ªa obtenido era hist¨®rico: la primera medalla del pirag¨¹ismo espa?ol de aguas bravas en unos Juegos. ¡°Al minuto ya estaba sonriendo, c¨®mo no lo iba a hacer¡±, aclara por tel¨¦fono la lasartearra, que no ha querido ver repetida su ¨²ltima bajada: ¡°De momento, no, lo prefiero, porque s¨¦ que no me va a gustar¡±.
De momento prefiero no ver la bajada final porque s¨¦ que no me va a gustar"
Sin tiempo siquiera para adecentarse comenz¨® su peregrinaje: por la entrega de medallas, atendiendo a los medios, que tanto han hablado y escrito sobre ella estos d¨ªas ¨Cen la maleta guarda una colecci¨®n de recortes de prensa que le regalaron ayer-, a la fiesta que le ten¨ªan preparada en la Casa de Espa?a, en el centro del Londres¡ as¨ª hasta la una de la madrugada en la que, ¡°agotada¡±, lleg¨® a la Villa Ol¨ªmpica. Con el tiempo justo para echar una cabezadita, hacer la maleta y partir, a las 5.30, hacia el aeropuerto. ¡°He tenido que dejar cosas, porque no me entraban. A la ida, llevaba los chalecos salvavidas y el material de agua guardados dentro de la piragua, pero es que al acabar la prueba no tuve ni tiempo ni para recoger bien mis cosas. Ah¨ª se han quedado¡±. ?Solo el material de agua? ¡°Bueno, tambi¨¦n las zapatillas que nos dieron para andar por ah¨ª¡±, admite entre risas.
La palista se ve en R¨ªo, pero pide tendr¨¢ que luchar por el puesto con el resto de chicas: "Es una lucha bonita, que nos hace crecer"
Despu¨¦s de cinco d¨ªas intensos de competici¨®n, de una vuelta muy cansada con escala en Madrid, Chourraut se oye relajada al otro lado del tel¨¦fono. Transmite m¨¢s tranquilidad de lo que ya de por s¨ª suele ser habitual en ella. Quiere disfrutar de los Juegos¡ por la televisi¨®n. Aunque sin bajar la guardia. Ma?ana volver¨¢ a La Seu, donde vive y se entrena, para prepararse para el Campeonato de Espa?a del pr¨®ximo fin de semana, que pondr¨¢ punto y final a la temporada. ?Y R¨ªo, se ve en los Juegos dentro de cuatro a?os? ¡°S¨ª¡±, responde tajante, y matiza: ¡°Pero hay que disput¨¢rselo con el resto de chicas, es una lucha muy bonita, que nos hace crecer¡±.
Para eso quedan cuatro a?os. Ahora lo suyo ser¨¢n unas vacaciones, ¡°muy merecidas¡±: ¡°Creo que despu¨¦s de este ciclo ol¨ªmpico me las merezco¡±. Un descanso a camino entre La Seu y Euskadi, quiz¨¢s para darse el ya famoso homenaje en el restaurante de Martin Berasategui. Para hacer un poco de bici tambi¨¦n. Y para remar¡ ?Remar? ¡°S¨ª, claro, no s¨¦ dejar la piragua ni en vacaciones¡±.
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