Los seis Juegos de Albert Estiarte

Si Manel Estiarte marc¨® un punto y aparte en la historia del waterpolo espa?ol, la culpa es de Albert (Manresa; 1957), cuatro a?os mayor. Fue su estela la que sigui¨® el m¨ªtico 5 de la mejor selecci¨®n que haya dado la historia del waterpolo espa?ol, que en Londres 2012 ha completado su sexta participaci¨®n en unos juegos, ejerciendo como galeno del equipo espa?ol de waterpolo. Albert, doctor en medicina interna, adjunto a la direcci¨®n general de la Fundaci¨®n Altaya, que agrupa los hospitales del Bag¨¦s, comarca del interior de Catalunya, y responsable de la Cl¨ªnica Sant Josep, se estren¨® en Barcelona 92 como m¨¦dico de la Villa Ol¨ªmpica. Y ya enrolado en el equipo de waterpolo, su deporte, vivi¨® el oro de Atlanta 96, el final ag¨®nico en Sidney 2000, donde su hermano fue abanderado espa?ol, el cambio generacional de Atenas 2004, la irrupci¨®n de los Molina y compa?¨ªa en Pek¨ªn 2008 y la maravillosa explosi¨®n de las chicas en Londres 2012.

De los todos sus juegos, se?ala tres momentos estelares: ¡°La medalla de Atlanta, porque se la merec¨ªan, por lo que significo y todav¨ªa significa¡±, cuenta; el ag¨®nico partido contra Rusia en Sidney -25 minutos de pr¨®rroga, en el adi¨®s de su hermano a la selecci¨®n-; y, por supuesto, la plata de las chicas en estos juegos de Londres. ¡°Su m¨¦rito es incalculable. Lo que han hecho estas chicas por el waterpolo trasciende a la medalla¡±, reflexiona. Al comparar, expone: ¡°Los Juegos, en s¨ª mismos, han cambiado poco en esencia, pero la manera en la que se trabaja es muy distinta. En Atlanta las charlas de Joan Jan¨¦ [el t¨¦cnico] eran de un minuto; ahora, se analizan partidos, se miran v¨ªdeos¡­ en eso s¨ª ha cambiado mucho el deporte¡±.

Si ¨¦l no se hubiera tirado a la piscina en Manresa con el gorro, su hermano se hubiera dedicado a otra cosa

Cuentan que Albert es un tipo tranquilo, que maneja los valores con id¨¦ntica honradez que su hermano, que es mucho menos vehemente que y que contagia tranquilidad. ¡°T¨² vas con un dolor, no te hace nada, te explica lo que tienes, lo que va a pasar, y curado¡±, aseguran todos los que han pasado por sus manos. Albert empez¨® la carrera en la residencia Blume de Barcelona, donde vivi¨® becado tres a?os junto a grandes de este deporte como Pere Robert, Pepe Alc¨¢zar y el difunto Manolo Molinero, y compagin¨®, primero los estudios y despu¨¦s el trabajo con el waterpolo, que practic¨® hasta los 35 a?os, siempre en el Manresa, como boya, pese a lo peque?o que era. ¡°Cuanto m¨¢s mayor, m¨¢s marrullero, se las sab¨ªa todas¡± dicen los que coincidieron con ¨¦l en la piscina. ¡°Fui a un torneo con los juniors en 1989 y llevo seis Juegos. Nunca lo hubiera imaginado¡±, admite ahora, mientras celebra en Londres el hito conseguido por las chicas.

Si hablar de Estiarte es hablar de la historia del waterpolo espa?ol, Albert tiene, seguramente, tanta culpa como su hermano Manel. O m¨¢s. A fin de cuentas, es probable que si ¨¦l no se hubiera tirado a la piscina en Manresa con el gorro puesto, su hermano se hubiera dedicado a otra cosa. Y nada ser¨ªa igual.