?xtasis en el Ciutat de Val¨¨ncia

En el tercer partido de Liga ya hubo milagro en el Ciutat de Val¨¨ncia. Los jugadores granota tirados por el suelo al t¨¦rmino del encuentro (Juanfran llorando) y el p¨²blico extasiado, celebrando la victoria como si fuera un t¨ªtulo. No era para menos. El Levante volvi¨® a vencer a la l¨®gica: con un jugador menos en el tramo final, marc¨® en el minuto 93 despu¨¦s de remontar un 0-2 en contra de la primera parte. Un retoque t¨¢ctico de JIM en el descanso lo cambi¨® todo: entr¨® M¨ªchel, retras¨® a Barkero y comenz¨® a someter a un Espanyol insulso en todo el partido. El cuadro de Pochettino provoc¨® la ira de sus aficionados pericos desplazados a Valencia, que corearon gritos contra la directiva.

Nunca con tan poco el Espanyol se hab¨ªa encontrado con tanto: un 0-2 antes del descanso. Dos disparos a puerta, dos goles, el segundo de alta escuela: Tejera envi¨® un tiro enroscado desde la frontal del ¨¢rea hacia la escuadra derecha de Mun¨²a. Claro que sin ninguna oposici¨®n. La defensa granota estaba entretenida pidiendo unas manos de un atacante perico. El cuadro de Pochettino ya hab¨ªa advertido antes que pod¨ªa disparar a la meta de Mun¨²a con mucha facilidad desde fuera del ¨¢rea. E incluso desde dentro. El larguirucho Longo, delantero italiano cedido por el Inter, de 20 a?os, aprovech¨® un rechace de Ballesteros para volear violentamente a gol.

El Levante qued¨® retratado a poco que el Espanyol apret¨® el gatillo y se movi¨® con cierta soltura: el dinamismo de V¨ªctor S¨¢nchez y la precisi¨®n de Verd¨² en el pase. Suficiente para derribar a un Levante escu¨¢lido en este primer periodo, nost¨¢lgico de todos los que se fueron: la potencia de Kon¨¦, la velocidad de Valdo, el equilibrio de Xavi Torres¡­ El conjunto de JIM se hab¨ªa quedado en los huesos, sin nadie en la medular que le diera sentido al juego, sin nadie en el ataque que ofreciera profundidad. El ¨¢rea de acci¨®n de Gekas fue reducid¨ªsima.

La ¨²nica opci¨®n granota pasaba por un harakiri de su rival, opci¨®n siempre factible cuando est¨¢ en el campo Wakaso, el primer amonestado y, m¨¢s tarde, abroncado por sus compa?eros Capdevila y Ra¨²l Rodr¨ªguez para afearle por alguna de sus extravagancias. El partido se carg¨® de tarjetas sin ser especialmente intenso ni bronco sino porque el ¨¢rbitro, con querencia a interrumpir constantemente el juego (30 faltas pitadas al Levante por 20 al Espanyol), m¨¢s que la autoridad ejerci¨® el autoritarismo.

JIM solt¨® lastre tras el descanso: un mediocentro defensivo menos (Diop) a favor de un mediapunta (M¨ªchel) que estirara el equipo. Lo logr¨®. Un par de arreones le sirvieron para igualar el encuentro. Enganchados a la magn¨ªfica zurda de Juanlu, que lanz¨® una bomba desde la esquina del ¨¢rea a gol. La defensa perica se derriti¨® y el lateral alem¨¢n Lell aprovech¨® el tembleque para empatar.

Barkero, ahora de mediocentro, mejor¨® la circulaci¨®n de bal¨®n granota. Reaccion¨® Pochettino adelantando a Forl¨ªn para recuperar el centro del campo: H¨¦ctor Moreno afianz¨® la defensa. La apuesta definitiva de JIM (al ataque con ?ngel y Rub¨¦n) se produjo justo antes de sufrir la expulsi¨®n de Iborra. Con uno menos, el Levante no se arrug¨® sino que busc¨® con ah¨ªnco la victoria hasta el final. Lleg¨® en una arrancada de M¨ªchel por la izquierda: su centro rebot¨® en Ra¨²l Rodr¨ªguez, despist¨® a Cristian ?lvarez y entr¨® en la porter¨ªa. Vibr¨® el Ciutat de Val¨¨ncia. Premio a la fe granota y a la intuici¨®n de JIM para transformar la cita con un simple apunte t¨¢ctico.