¡®Vedettes¡¯ con mono de trabajo

Cincelado a golpe de talonario por el megal¨®mano Al Mansour bin Zayed Al Nahyan, que ha desembolsado alrededor de 645 millones de euros para moldear un proyecto que germin¨® en 2008, el fondo de armario del Manchester City es tan rico como caprichoso. Frente a la brega y el oficio que aportan obreros como Kompany, Milner o Barry, apreciados sobremanera por Roberto Mancini, el camerino del cuadro ingl¨¦s cuenta con un repertorio de solistas extraordinario que no reh¨²ye el mono de trabajo. El italiano conserva el bloque del curso pasado, aderezado solo por algunos retoques complementarios ¨CJavi Garc¨ªa (Benfica), Rodwell (Everton), Nastasic (Fiorentina), Maicon (Inter de Mil¨¢n), Sinclair (Swansea) y Wright (libre)¨C que alimentan un plantel fabuloso. Acorazado atr¨¢s, inspirado en el despliegue de Tour¨¦ Yaya en el centro del campo y los movimientos diab¨®licos de Nasri y Silva entre l¨ªneas, la r¨²brica final es demoledora con la p¨®lvora de vedettes como T¨¦vez, Ag¨¹ero o el d¨ªscolo Balotelli.

- HART. Precisaba Inglaterra un portero que sellase su porter¨ªa y no la convirtiese en motivo de burla, como as¨ª ha sido desde que Peter Shilton colgase los guantes y diese paso a metas como Seaman, James o Green, y parece haberse zanjado el debate con la irrupci¨®n de este guardameta de pelo oxigenado. La muralla (1,96) m¨¢s s¨®lida de la Premier el curso pasado ¨Ccon 29 goles encajados, fue el menos goleado¨C, un valladar de reflejos soberbios y rapid¨ªsimo en sus movimientos bajo los palos, sufre m¨¢s cuando tiene que salir de la cueva y dominar la pelota con los pies. Amo y se?or de la porter¨ªa, uno de los bastiones del City, se ha asentado tambi¨¦n en el marco de los three lions.

- ZABALETA o MAICON. Uno de los pocos supervivientes a la marea de petrod¨®lares y el desfile de jugadores que ha habido en la caseta desde el aterrizaje del jeque, el argentino es un lateral correoso, poco dado a descuidar la guardia e incisivo cuando se asoma al balc¨®n contrario. Sin estridencias, se maneja de forma aceptable con la pelota, aunque mejora con el bal¨®n en carrera y metros por delante. Se ha ganado la confianza de Mancini en el carril derecho, bien cubierto pese a la baja del forzudo Richards. Una posici¨®n a la que aspira el brasile?o Maicon, un caballo desbocado de largo kilometraje, poderoso f¨ªsicamente y que acostumbra a pisar la l¨ªnea de fondo para asistir. Posee adem¨¢s un disparo envenenado, pero tambi¨¦n deja metros a sus espaldas y exige a los zagueros. Honra al 2 protot¨ªpico brasile?o, triunf¨® en el Inter de Mourinho y ahora pone a prueba su cilindrada en la liga inglesa.

- KOMPANY y LESCOTT. Imperial, el central belga fue nombrado mejor jugador de la Premier el a?o pasado y elev¨® el primer cetro del City en 44 a?os. Expeditivo, sensacional al cruce y con criterio en la salida de bal¨®n, actu¨® en origen como mediocentro, pero a Mancini le fascina como cierre. Autoritario en el juego a¨¦reo, capit¨¢n por derecho propio y una de las voces autorizadas del vestuario, corrige los deslices de su compa?ero en el eje. Lento, trabado con el cuero, el ingl¨¦s intenta compensar su anarqu¨ªa t¨¢ctica, su dispersi¨®n y una cadera bastante entumecida con su amenaza en las acciones a bal¨®n parado. Pese a todo, el t¨¦cnico sigue apostando por ¨¦l.

- CLICHY o KOLAROV. Muy dotado t¨¦cnicamente, el franc¨¦s creci¨® al calor de Ars¨¨ne Wenger, pero emigr¨® a Manchester en busca de trofeos. Fogoso, certero a la hora de seleccionar el pase y dosificar las subidas, aporta profundidad a la banda izquierda, aunque tiende a sufrir un poco en el cuerpo a cuerpo. Se alterna en la titularidad con el serbio, una daga que hace las veces de extremo cuando se suma al ataque. Capital en el lanzamiento de las faltas y los c¨®rners, es menos disciplinado que el galo, pero su zurda puede desestabilizar el partido de un plumazo.

- RODWELL o JAVI GARC?A. Reci¨¦n recuperado de una lesi¨®n Barry, el guerrillero predilecto de Mancini en el c¨ªrculo central, y exiliado De Jong, ahora embistiendo con la camiseta del Milan, el joven ingl¨¦s ¨C21 a?os¨C es el enlace entre la retaguardia y el centro del campo. Pulido en la escuela del Everton, contabiliza ya casi 90 partidos en la Premier y es internacional con Inglaterra. A su rigor t¨¢ctico a?ade su facilidad para interpretar el juego al primer toque. Ese mismo desempe?o es el que ha conducido al espa?ol al City of Manchester. Tallado en La F¨¢brica del Madrid, curtido despu¨¦s en el Benfica, barre toda la medular y llega con peligro al ¨¢rea, como ya demostr¨® el pasado fin de semana con un testarazo que dio un punto a su equipo ante el Stoke.

- NASRI. El franc¨¦s es un enfant terrible con el rostro de un ¨¢ngel. Aparentemente fr¨ªo, se las tuvo tiesas con Laurent Blanc y la Prensa durante la pasada Eurocopa y hace dos a?os plant¨® al Arsenal, que fue a buscarlo a Marsella por su f¨²tbol pl¨¢stico, su desequilibrio callejero y su facilidad para meter la sexta marcha y descoser al rival. El¨¦ctrico, genial en el regate y decisivo para hallar la fisura en la defensa rival, se le reclama mayor presencia en las citas de altos vuelos. Vers¨¢til, su punto de partida natural es la mediapunta, pero en el City juega escorado a la banda derecha. Su asociaci¨®n con Silva es esencial para vertebrar el juego de su equipo.

- YAYA TOUR?: Lugarteniente de Mancini sobre el verde, el africano es el verdadero termostato del City. Clarividente, exquisito para facilitar la transici¨®n defensa-ataque, fue reclutado como mediocentro, central ocasional a veces, pero ahora act¨²a como engarce entre la l¨ªnea de tres cuartos y los hombres de ataque. Su zancada y sus cent¨ªmetros son vitales para los citizen, que tienen en ¨¦l un int¨¦rprete fino para discernir los tiempos de la presi¨®n y el repliegue. Atesora, adem¨¢s, una pegada fuera de toda duda: sus nueve goles de la temporada pasada ¨Cseis en liga, tres en la Champions¨C y los tres que acumula en esta dan fe de ello. Serio en el campo, risue?o fuera de ¨¦l, los jeques le tratan con mimo: con 13 millones de euros anuales en su cartilla, es el quinto jugador mejor pagado del planeta.

- SILVA: En momentos de oscuridad, el espa?ol siempre emerge como la linterna que ilumina al cuadro de Mancini. De zurda sutil, derrib¨® muchos tab¨²es cuando algunos le auguraban un recorrido ef¨ªmero en Inglaterra por su chasis, menudo, pero menos fr¨¢gil de lo que aparenta. Letal en el ¨²ltimo pase y milim¨¦trico en la finta, est¨¢ muy valorado entre los pesos pesados del vestuario, que le perciben como un l¨ªder silencioso cuyas credenciales proceden de su trato hacia la pelota. Su calidad y su br¨²jula son imprescindibles para desencallar los pulsos en los que las musas no atienden la llamada.

- T?VEZ: Entonado, con siete kilos menos y comprometido de nuevo con la causa del f¨²tbol, El Apache ha recuperado su mejor versi¨®n. Aquella que garantiza pelea, mordiente y goles: tres en los cuatro primeros partidos de la Premier. Reconciliado con su oficio, atr¨¢s quedan los desaires hacia su t¨¦cnico y las espantadas a Argentina. ¡°Mi pelea con Mancini fue una bendici¨®n¡±, asegura el artillero, que ya acumula 60 dianas en poco m¨¢s de 100 partidos con el Manchester City. Ausente Ag¨¹ero, su pareja de baile natural, ha tirado del carro en el inicio de curso. Y su entrenador, claro, se muestra encantado: ¡°Estoy feliz. Ha trabajado duro y ha mejorado su comportamiento¡±. El delantero que maravill¨® en Boca, el United y su etapa primigenia en el City ha vuelto.

- AG?ERO o BALOTELLI: Reinsertado despu¨¦s de pasarse un mes en la enfermer¨ªa, la presencia del Kun en la partida es una inc¨®gnita. Repuesto ya de su lesi¨®n en la rodilla derecha, pero escaso de rodaje y sin minutos en el ¨²ltimo envite frente al Stoke City, el argentino es en cualquier caso el gran referente ofensivo de su equipo. La campa?a pasada firm¨® 30 goles ¨C23 en la liga¨C. Uno de ellos, el ¨²ltimo, esencial para que los sky blues festejasen el t¨ªtulo de la Premier. Su huella, por tanto, ser¨¢ all¨ª eterna. Tambi¨¦n la de Balotelli. Histri¨®nico, el italiano es noticia permanente. Lo mismo por los fuegos artificiales que prende en su lujosa casa de Manchester que por sus temibles zambombazos en el campo. Despu¨¦s de completar una buena Eurocopa, ha comenzado sin hacer ruido. Ni dentro ¨Ccero goles en tres partidos¨C ni fuera del estadio. El bosnio Dzeko, un martillo pil¨®n en el ¨¢rea, es la tercera alternativa.