El vuelo s¨®lido del Atl¨¦tico
La motivaci¨®n, el trabajo t¨¢ctico, los tantos de Falcao y las rotaciones, claves del ¨¦xito
M¨ªchel, Cesc, Vilanova... El f¨²tbol espa?ol habla ya del Atl¨¦tico como un candidato serio a la disputa del t¨ªtulo liguero. Este s¨¢bado se presentar¨¢ en el Bernab¨¦u con una ventaja de ocho puntos y la sensaci¨®n de que detr¨¢s de esa ventaja hay argumentos futbol¨ªsticos que le han generado ese balance de 11 victorias, una derrota y un empate. Se funde con armon¨ªa la trilog¨ªa del ¨¦xito de un equipo. Un entrenador, una idea y ¡°un vestuario sin fisuras¡±, como dice Filipe Luis.
El Simeone espiritual. Se?alado sin discusi¨®n en el vestuario y en el club como el art¨ªfice del ¨¦xito. Tard¨® un minuto en desprenderse del mito que fue como jugador para demostrar que ahora es un entrenador. Despu¨¦s de que sus jugadores presenciaran boquiabiertos c¨®mo 5.000 personas acudieron a su primer entrenamiento, les dijo: ¡°Muchachos, a m¨ª tambi¨¦n me pitaron¡±. En las ¨²ltimas semanas, pese a que el equipo ganaba, ha trabajado en la recuperaci¨®n de sus mejores virtudes, sobre todo ofensivas. Les hizo ver a los jugadores que sin algo m¨¢s de juego, del suyo, directo y r¨¢pido, partidos como el del Sevilla o el del Madrid no los podr¨ªan ganar. Al del Sevilla le dio tanta o m¨¢s importancia que la que le dar¨¢ al derbi. A Gabi, Miranda y Filipe Luis, que pod¨ªan perderse este partido si ve¨ªan una amarilla, les insisti¨® en que no jugaran con el freno echado.
El primer paso de Simeone fue que el equipo asumiera sus limitaciones
El Simeone t¨¢ctico. La primera piedra para construir ese equipo rocoso y tan inc¨®modo de jugarle fue el reconocimiento de las propias limitaciones. Simeone transmiti¨® desde el minuto uno a sus jugadores que el plantel no da para ser ganador desde una posesi¨®n ret¨®rica. Es el tercer equipo m¨¢s goleador del campeonato (29) siendo el und¨¦cimo en minutos de posesi¨®n. Y cuenta con un goleador superlativo, Falcao, que suma ya 50 goles de rojiblanco.
Para evitar una excesiva dependencia del colombiano, en esta faceta el t¨¦cnico ha trabajado mucho la llegada de la segunda l¨ªnea, que le ha ganado partidos. No es un entrenador de grandes peroratas. Sus mensajes son sencillos y cortos para explicar los partidos y analiza de forma concienzuda a los rivales, aseguran en el vestuario. Una de las frases que m¨¢s repite dentro y fuera de la caseta tiene que ver con la asunci¨®n plena de lo que puede y no puede hacer el equipo: ¡°Si nos desviamos de lo que somos y de la idea marcada, el ¨¦xito no es posible¡±. A partir de aqu¨ª, la primera premisa es la recuperaci¨®n tras la p¨¦rdida del bal¨®n. El Atl¨¦tico es uno de los equipos m¨¢s agresivos del campeonato en este aspecto. Juega al l¨ªmite del reglamento. O roba por anticipaci¨®n o incurre en la falta t¨¢ctica para parar la salida del contrario cuando pierde la pelota. Los rojiblancos son el s¨¦ptimo equipo que m¨¢s faltas hace por partido (15) y Gabi, el cuarto jugador (una cada 34 minutos). El estilo tambi¨¦n se refleja en que es el cuarto conjunto en recuperaciones de bal¨®n (71 por partido). Ese trabajo colectivo, preferentemente en campo contrario, supone que Courtois sea el segundo portero menos goleado (0,8 de media) de la Liga y tambi¨¦n el que menos remates recibe por duelo (8). La l¨ªnea defensiva, la ¨²nica que no rota en el torneo, la ha compuesto con dos laterales ofensivos (Juanfran-Filipe Luis) a los que ha trabajado en las ayudas y en las coberturas y, por primera vez en muchos a?os, con una pareja de centrales inamovible (God¨ªn-Miranda). No hace mucho, Simeone dedic¨® un entrenamiento de los que se denominan anal¨ªticos. Trabaj¨® a conciencia con los defensas c¨®mo perfilarse cuando les encaran.
Es el tercer conjunto m¨¢s goleador siendo el und¨¦cimo en posesi¨®n?
Las rotaciones. Simeone ha transformado en realidad el t¨®pico de que ¡°todos los futbolistas son importantes¡±. Lo anunci¨® en pretemporada y lo ha cumplido. Parte de su ascendencia en el vestuario nace de que ning¨²n miembro de la plantilla ha podido rebatirle como injustas sus decisiones en las alineaciones. ¡°Todo lo que ha dicho y prometido lo ha cumplido¡±, dicen en la caseta.
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