Un Atl¨¦tico sin pase ni remate

Despu¨¦s de haber presenciado c¨®mo 21.000 espectadores acud¨ªan al entrenamiento matinal previo al derbi. Despu¨¦s de haber interiorizado la fe que ten¨ªa la hinchada rojiblanca en que esta vez su equipo podr¨ªa acabar con los 13 a?os sin ganar al Real Madrid, el Atl¨¦tico se descolg¨® con un partido para olvidar, sobre todo en ataque. No le afloraron ninguno de sus recursos m¨¢s fiables. No tuvo juego por las bandas, sin Filipe Luis y con Juanfran pendiente de un Cristiano muy escorado a la banda. No contragolpe¨® tampoco el Atl¨¦tico tras recuperaci¨®n. Ni sac¨® provecho de las jugadas de estrategia. Firmaron los rojiblancos su peor registro en remates en lo que va de curso (cuatro), tres de ellos de Falcao ¡ªel otro fue de Mario Su¨¢rez¡ª. Hasta el s¨¢bado, el Atl¨¦tico registraba una media de 15 disparos por partido. La imprecisi¨®n con la pelota en las entregas dej¨® al Atl¨¦tico sin capacidad de respuesta.

Hasta el s¨¢bado, el Atl¨¦tico registraba una media de 15 disparos por partido. Ante el Madrid, logr¨® cuatro

Durante la semana, Simeone hab¨ªa insistido a sus futbolistas en la necesidad de ser ¡°precisos¡± en el pase para no provocar los contragolpes del Madrid y tambi¨¦n para hacerle da?o en un partido en el que preve¨ªa que era necesario aprovechar al m¨¢ximo cada concesi¨®n del Madrid. Le irritaron m¨¢s las pifias a la hora de armar los ataques r¨¢pidos. Es en ese aspecto en el que Simeone hab¨ªa hecho saber a su equipo que para ganar los partidos grandes deb¨ªan mejorar.

Hubo al menos cuatro ocasiones en los que el t¨¦cnico sinti¨® que su equipo estuvo en condiciones de llegar al ¨¢rea de Casillas con peligro, pero las imprecisiones o la tardanza en ejecutar los pases, con Falcao en pleno desmarque y con visos de salir de ellos, le desesperaron. Arda, junto a Koke, el destinado a canalizar el juego en los ¨²ltimos metros, perdi¨® 11 balones. Le apareci¨® al Atl¨¦tico esa versi¨®n que lo convierte en un equipo poco da?ino cuando sus futbolistas ofensivos no logran combinar con rapidez tras recuperar la pelota. Ninguno fue capaz de armar juego en un d¨ªa en el que s¨ª se ech¨® en falta todo lo que le daba Diego al equipo en citas como la del Bernab¨¦u. En el derbi del Calder¨®n de la temporada pasada el brasile?o fue capaz, mientras le dur¨® la gasolina, de poner en jaque al Madrid con sus pases entre l¨ªneas y sus regates.

¡°Es mejor que Filipe Luis se haya perdido un partido, aunque sea el derbi, que no perderlo para cinco o seis¡±, refrendan desde el club

En el club vieron a Simeone visiblemente enfadado por la manera en la que se produjo la derrota, aunque comparten su decisi¨®n de haber reservado a Filipe Luis pese a lo que eso supon¨ªa para el juego ofensivo. Cata D¨ªaz solo realiz¨® un centro al ¨¢rea cuando el promedio del lateral brasile?o alcanza la media docena de pases desde su costado, adem¨¢s de lo que contribuye al desequilibrio del contrario en las ayudas para el dos contra uno. ¡°Es mejor que Filipe Luis se haya perdido un partido, aunque sea el derbi, que no perderlo para cinco o seis¡±, refrendan desde el club, que, como Simeone, maneja los n¨²meros como terapia a una derrota m¨¢s dolorosa desde el rival que desde la aritm¨¦tica.

¡°Como dice Simeone, el pasado no existe, ni el bueno ni el malo y a¨²n le sacamos cinco puntos al Madrid¡±, dice un directivo colchonero.