Un Bal¨®n selecto
El aperturismo de la votaci¨®n en 1995 posibilit¨® que los jugadores no europeos conquistaron un laurel negado a Pel¨¦ y Maradona, entre otros


La ra¨ªz del Bal¨®n de Oro data de 1956, cuando la revista France Football de Gabriel Hanot, precursor tambi¨¦n de la Copa de Europa, decidi¨® otorgar el premio al mejor jugador europeo del a?o. La condici¨®n excluyente priv¨®, entre otros, a Maradona y Pel¨¦, argentino y brasile?o, la posibilidad de alzarse con el galard¨®n. Una norma que sufri¨® la revisi¨®n y cambio en 1995, cuando se decidi¨® premiar al mejor futbolista del mundo, independientemente de su nacionalidad. As¨ª, ese mismo a?o, el liberiano George Weah, entonces en el Milan, inaugur¨® el aperturismo de la revista. A Maradona, en cualquier caso, le entregaron entonces un Bal¨®n de Oro honor¨ªfico.
En 2007 se le dio una nueva vuelta de tuerca al premio, puesto que se incluyeron las votaciones por internet de los periodistas acreditados. Ya era un premio global, por lo que en 2010 France Football y la FIFA, que ten¨ªa su propio premio, decidieron fusionarse para crear al ahora conocido FIFA Bal¨®n de Oro. Como ¨²ltima novedad, aplicada este a?o, han sido los aficionados los que han decidido, a trav¨¦s de la red, el mejor gol de la temporada, que ha reca¨ªdo en el eslovaco Miroslav Stoch.
El recorrido, que se inicia pues en 1956, lo abri¨® Stanley Matthews, por m¨¢s que tuviera 41 a?os y su carrera se viera entrecortada por la II Guerra Mundial. Extremo derecho, se granje¨® la reputaci¨®n mundial por su facilidad para descontar rivales y su caballerosidad. ¡°Nos ense?¨® c¨®mo se deb¨ªa jugar¡±, le reconoci¨® Pel¨¦. Lo perfeccion¨® Alfredo di St¨¦fano (1957 y 1959), que goleaba, organizaba y defend¨ªa.
La d¨¦cada de los sesenta la abri¨® Luis Su¨¢rez, ¨²nico espa?ol con el galard¨®n. Le sigui¨® el irritante Omar S¨ªvori (1961), que tiraba la pelota a la espinilla del rival para recogerla y luego regate¨¢rselo. Y dentro del talento se encuadran el atildado Gianni Rivera (1969) y el genial slalom de Josef Masopust (1962). Menci¨®n especial para Lev Yashin (1963), La Ara?a Negra, ¨²nico meta con el premio. Las tres grandes estrellas de la d¨¦cada fueron el atl¨¦tico Eusebio (1965), el terror¨ªfico Bobby Charlton (1966) y el rebelde y genial George Best (1968).
A Maradona le entregaron en 1995 un Bal¨®n de Oro honor¨ªfico
En los setenta se descubri¨® al indomable Gerd M¨¹ller, un bombardero con m¨¢s tino que Oleg Bloj¨ªn (1975), extremo r¨¢pido de poca constancia, y distinto de Allan Simonsen (1977), bien vistoso que triunf¨® con el M?nchengladbach y el Bar?a. Esta ¨¦poca, sin embargo, la cop¨® el f¨²tbol total de Johan Cruyff (1971, 1973 y 1974), la clase de Franz Beckenbauer (1972 y 1976), y S¨²per Rat¨®n Kevin Keegan (1978-1979).
Una saga de goleadores que no se sec¨® en la siguiente d¨¦cada, como Karl-Heinz Rummenigge (1980 y 1981), el punz¨®n Rossi (1982), y el medio Platini, de gran visi¨®n, habilidad en el tiro libre y sobre todo llegada. El resto fue monopolio del Milan.

El Mundial de Italia coron¨® al capo alem¨¢n Lothar Math?us y la Eurocopa de 1996 hizo lo propio con Matthias Sammer ante la incredulidad generalizada. Tampoco marcaron ¨¦poca Papin (1991) y Weah (1995). Pero s¨ª que brillaron Van Basten (1992), Roberto Baggio (1993), Hristo Stoichkov (1994), Rivaldo (1999) y Ronaldo (1997). M¨¢s de lo mismo hizo Zinedine Zidane (1998).
En este siglo, en una decisi¨®n controvertida, Fabio Cannavaro (2006) se hizo con el premio tras el Mundial. El resto de galardones fueron para dos medios con llegada, Nedved (2003) y Kak¨¢ (2007), y delanteros desequilibrantes: Owen (2001), Ronaldo (2002) y Shevchenko (2004). Tambi¨¦n iluminaron Luis Figo (2000) en la banda derecha y el mago Ronaldinho (2005). Hasta Cristiano Ronaldo (2008) y Lionel Messi (2009, 2010, 2011 y 2012).
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