¡°Prefiero cero medallas a medallas que huelan mal¡±

Ram¨®n Cid (San Sebasti¨¢n, 1954) simboliza el cambio en la Federaci¨®n Espa?ola de Atletismo. El nuevo seleccionador, el primero en 24 a?os que no se llama Jos¨¦ Mar¨ªa Odriozola, fue triplista, el mejor de Espa?a, y ha sido responsable de los saltadores los ¨²ltimos a?os. As¨ª que es un hombre de la casa. Pero con un discurso nuevo ¡ªalgo as¨ª como m¨¢s que el resultado importa el proceso, un atletismo de rostro humano¡ª que explica antes de su primera gran competici¨®n, los Europeos de pista cubierta el fin de semana que viene en Gotemburgo.

Pregunta. ?Qu¨¦ ha cambiado en la federaci¨®n con su nombramiento?

Respuesta. Aparece la figura del director t¨¦cnico. Yo hago la selecci¨®n, he hecho mi equipo t¨¦cnico y ser¨¦ responsable, sobre todo cuando salga mal y un poquito si sale bien. Es mi responsabilidad y ah¨ª tengo que asegurar que Odriozola no se est¨¢ metiendo.

P. La lista mira a R¨ªo 2016, pero este a?o al menos va a estar condicionado por la crisis. ?C¨®mo afecta a la planificaci¨®n un entorno en el que los atletas reciben menos becas, ustedes, menos dinero del CSD...?

R. La mitad de mi trabajo consiste en pedir perd¨®n por las miserias que gestiono. Los atletas son razonables, lo est¨¢n pasando muy mal. No solo pierden la financiaci¨®n p¨²blica sino otras fuentes, como los clubes, Ayuntamientos¡­ Todos los grifos est¨¢n cerrados. Es muy duro. Pero en la din¨¢mica de estos dos meses estoy viendo que el atleta es pele¨®n. Hay gente que est¨¢ compitiendo bien, est¨¢ reaccionando, se va a pelear. El victimismo no vale para nada. Los cambios son duros y va a ser m¨¢s duro para los veteranos que para los chavales que vienen.

P. Algunos veteranos se hab¨ªan acostumbrado a una vida algo funcionarial, ?no?

R. Antes el que no era funcionario ganaba mucho dinero, pero ahora el mismo atleta gana la mitad o menos. Tenemos que cambiar no solo din¨¢micas por el dinero, sino tambi¨¦n motivaciones. Volver al romanticismo, a la marca, a querer ganar...

P. ?Puede afectar la crisis a los Mundiales?

R. Van a ir alrededor de 40, que es menos de lo normal. Me parecen disparatadas algunas m¨ªnimas. Las medidas que yo voy a buscar, y a ver si consigo la mitad, deber¨ªan tener un impacto m¨¢s sordo, que igual ni se nota. Podemos trabajar bien y no tener medallas en R¨ªo y podemos trabajar muy mal y tener tres. La unidad de medida de la medalla me parece muy injusta. Cuando el secretario de Estado me pregunt¨® cu¨¢l era mi objetivo para R¨ªo le dije: ¡°Sentarme con Jorgito \[Gonz¨¢lez Amo\], con Antonio, coger una caipirinha, mirar al Pan de Az¨²car y decir: ¡®hemos hecho lo que hemos podido¡±. Vosotros dir¨¦is: ¡°El atletismo est¨¢ jodido¡±. A m¨ª eso me dar¨¢ igual si hemos hecho lo que hemos podido.

P. En una sociedad que mide el ¨¦xito del deporte por el n¨²mero de medallas¡­

R. Asumir¨¦ mi papel de fracasado. Para mis amigos, y para m¨ª, har¨¦ mi evaluaci¨®n.

P. ?Hay cantera? Los nombres son casi los mismos y m¨¢s viejos.

R. Nosotros vivimos mucho del azar, del talentazo, y lo tenemos que optimizar. Pero esa es una reflexi¨®n mucho m¨¢s amplia que la que puede hacer el director t¨¦cnico o la federaci¨®n. Tendremos el atletismo que queramos tener. Yo tendr¨¦ buenos atletas extreme?os si el Gobierno extreme?o quiere. Ahora mismo debemos generar ilusiones. En mayo vamos a hacer un congreso: club de atletismo como modelo de negocio y escuela de valores. Hemos sido un deporte que hemos dependido mucho de la escuela del Ayuntamiento: el entrenador no cobra y los ni?os no pagan. Lo bueno que tienen las crisis es que te modernizan. Cambiar es lo que nos puede salvar. No podemos vivir de las subvenciones. Tenemos que hacer clubes porque nuestro producto es buen¨ªsimo, nuestro deporte ense?a valores y hay que venderlo. El futuro viene por ese tipo de estructuras y ese es el trabajo que no se va a ver.

P. Usted habla de un atletismo de rostro humano y la sociedad reclama uno sobrehumano.

R. Yo no voy a ir por ah¨ª. S¨¦ que probablemente sea v¨ªctima de eso a medio plazo. Cuando yo fui al INEF iba por unos valores. Yo no quiero renunciar a eso. En esta historia mi vanidad est¨¢ satisfecha. He venido aqu¨ª a hacer lo que yo creo. Y si no son medallas, no ser¨¢n. En esta sociedad estamos obligados a dar ejemplo. Somos referentes, pues vamos a aportar algo m¨¢s que medallas. Ese rostro humano no lo quiero perder. Igual soy un poco idealista...

P. El pasado reciente no es especialmente ejemplar, como han demostrado varias operaciones policiales. ?Cu¨¢l ser¨ªa el mejor escenario para poder pasar p¨¢gina de los casos de dopaje?

R. Mis hijos hacen atletismo y estoy encantado. Veo que est¨¢n creciendo bien. Lo que me mata de esto es que a m¨ª me encanta hablar de atletismo y de valores y me veo obligado a hablar de otras cosas porque as¨ª debe ser. Lo que tiene que funcionar es el sistema. Hay entidades para combatir el dopaje. Que funcionen. Que la ley funcione. Lo mejor que puede pasar es que si hay pus, que salga. No pasa nada. No s¨¦ qu¨¦ miedo hay.

P. ?Qu¨¦ har¨ªa si en los Europeos le salta un positivo?

R. Si un atleta de la selecci¨®n da positivo se va a la mierda. Me da mucho asco. ?Sabe por qu¨¦? Yo conozco el gremio y tengo infinidad de atletas que se dejan la piel y son honestos. Autom¨¢ticamente un positivo hace sospechosos a todos, adem¨¢s de ir en contra de los ideales que defiendo. Pero lo tengo que ver. Yo si veo a un tipo que viene por la calle dando tumbos y la nariz roja digo: ¡°este lleva un pedo¡­¡±. Si soy polic¨ªa tendr¨¦ que hacerle soplar. Ahora mi papel es ese.

P. Puede tener m¨¢s precauci¨®n si le ve as¨ª todos los d¨ªas.

R. Yo no tengo ning¨²n problema. Nunca he hecho nada. Pero como soy novato no s¨¦ si me paso o me quedo corto.

P. O si le enga?an...

R. Es tambi¨¦n un estado de ¨¢nimo. Tiendo a inocente deliberadamente, no por ingenuidad. Por salud mental. Porque no puedo vivir toda la vida sospechando de todo el mundo. Yo trato a muchos atletas y me resulta imposible pensar as¨ª de ellos.

P. Eso no impide que est¨¦ bien informado. ?Sabe qui¨¦n es el entrenador de cada atleta?

R. No de todos. Estoy en ello.

P. ?Marta Dom¨ªnguez? Miras su ficha y no viene entrenador.

R. Ni lo he mirado ni he hablado con ella. No s¨¦ si voluntaria o involuntariamente lo he obviado. No s¨¦ nada de ella. Alguien me dijo que no sab¨ªa si iba a seguir. Quiz¨¢, como tiene licencia, y es la atleta que es, tendr¨ªa que llamarla.

P. ?Lo ve como un problema heredado?

R. Voy por otro lado. Por el modelo de clubes, por si Eusebio \[C¨¢ceres\] est¨¢ en su nivel¡­ Entiendo que con lo otro tengo que convivir. Estoy siendo idealista, pero no me importa.

P. La crisis es un buen momento para ser idealista.

R. Si tiene que haber catarsis que la haya. La inocencia a lo mejor tiene el precio en medallas. Desde luego prefiero cero medallas que medallas que huelan mal. Y necesitamos que se valore este comportamiento, que se diga: ¡°Qu¨¦ bien, el 13?¡±.

P. Tambi¨¦n est¨¢n despidiendo a grandes t¨¦cnicos.

R. Me estoy haciendo especialista en tratar con los problemas por falta de dinero. Por eso esas iniciativas con los clubes, para buscar v¨ªas de autogesti¨®n.

P. ?Hay alg¨²n ejemplo?

R. El Muntanyenc de Sant Cugat. Est¨¢n robando gente al equipo de f¨²tbol. Esas son las v¨ªas para combatir la miseria.