Las miserias de la miseria

Dirigir una federaci¨®n deportiva en Espa?a es, sencillamente, gestionar la miseria: una historia cotidiana de penurias y contradicciones que a todos les deja tristes, sin argumentos m¨¢s all¨¢ de los recortes impuestos. Eso ocurre todas, tambi¨¦n en la m¨¢s ol¨ªmpica de todas, la de atletismo.

¡°Me estoy haciendo especialista en tratar con los problemas de falta de dinero", confiesa Ram¨®n Cid, el director t¨¦cnico del atletismo espa?ol, quien, a veces, se ve obligado a apelar a la amistad o a la pasi¨®n para convencer a algunos de los mejores t¨¦cnicos nacionales para que trabajen por sueldos de 300 euros al mes, o menos. ¡°Hace unos a?os la federaci¨®n ten¨ªa 27 t¨¦cnicos, luego se redujo a 20 y ahora quedamos 10¡±. Entre las v¨ªctimas, algunos de los m¨¢s excelentes, como Miguel Escalona, a quien despidi¨® en octubre pasado la misma federaci¨®n que le hab¨ªa premiado como mejor t¨¦cnico del a?o en 2009.

Escalona cobraba mil euros al mes de la federaci¨®n por entrenar, entre otros, a Natalia Rodr¨ªguez, la ¨²nica atleta espa?ola que ha ganado una gran medalla recientemente (bronce en el Mundial de Daegu de 2011). Esa cantidad le permit¨ªa al t¨¦cnico, catedr¨¢tico de Educaci¨®n F¨ªsica, dedicar solo media jornada a su trabajo en en un instituto de Tarragona y la otra media a llevar su grupo de atletismo, en el que hab¨ªa una decena m¨¢s de deportistas, la mayor¨ªa atletas j¨®venes. ¡°Ahora, como con el sueldo de media jornada no llego a fin de mes, vuelvo a estar a jornada completa en el instituto, por lo que ahora solo puedo atender a los atletas un d¨ªa por semana¡±, dice Escalona. ¡°Me excomulgan y los atletas no tienen dinero para pagarme. Natalia no es problema, porque sabe lo que tiene que hacer, pero los j¨®venes me preocupan a medio y largo plazo. Ten¨ªa 11 y quedan ocho. Solo Natalia es de gran nivel, pero tengo unos chavales marroqu¨ªes que apuntan maneras¡±.

¡°En mi despido no hubo razonamiento t¨¦cnico", se queja Miguel Escalona

La situaci¨®n de Natalia Rodr¨ªguez, una de las esperanzas espa?olas este fin de semana en los Europeos indoor de Gotemburgo (donde, tras el desastre de Londres, donde fue eliminada en series, buscar¨¢ sobre todo, moral de cara a los Mundiales de Mosc¨² en verano), era puesta habitualmente como ejemplo del atletismo que se buscaba, en el que se permit¨ªa a los atletas desarrollarse en su entorno, con entrenadores cercanos, habitualmente los de toda la vida, los que les ayudaron a desarrollarse desde cadetes, sin desarraigarse, como ocurre con el modelo de los Centros de Alto Rendimiento.

¡°Yo entiendo que los recortes obligan¡±, dice Escalona, quien llevaba a?os notando cierta frialdad en el trato que recib¨ªa del anterior director t¨¦cnico, y presidente federativo, Jos¨¦ Mar¨ªa Odriozola. ¡°Pero estoy cabreado con las formas en que se ha llevado a cabo mi despido, con una llamada del secretario de la federaci¨®n. Y en ella no se hizo menci¨®n a ning¨²n problema t¨¦cnico, solo a los recortes, nada m¨¢s. No hubo razonamiento t¨¦cnico¡±.

Y razones t¨¦cnicas las pod¨ªa haber habido tranquilamente, y Escalona, con sano juicio autocr¨ªtico, las habr¨ªa admitido. ¡°Es que para despedirme, en la federaci¨®n ni alegaron siquiera que la actuaci¨®n de Natalia en Londres hab¨ªa sido un desastre¡­, que lo habr¨ªa entendido. Y tambi¨¦n entiendo que con el rid¨ªculo que hicimos en Londres se lo pusimos f¨¢cil. No supe parar la bola de las expectativas creadas por ella en alg¨²n momento. Quiz¨¢s los Juegos le vienen grandes. No estaba preparada para el despliegue medi¨¢tico¡±, admite Escalona. ¡°Pero, de todas maneras, estoy contento porque soy fiel a lo que me gusta, entrenar¡±.