Un d¨ªa feliz en Suecia
Juan Carlos Higuero, Kevin L¨®pez y Natalia Rodr¨ªguez lideran al nuevo equipo espa?ol, que cumple casi todos los objetivos de la primera jornada de competici¨®n
Si el nuevo atletismo espa?ol del que habla el seleccionador Ram¨®n Cid deber ser una mezcla perfecta de hombres y mujeres expertos y un chute de savia joven no hay mejor cartel que el 3.000 metros que se corri¨® en los Europeos de pista cubierta. Coincidieron en la misma serie Juan Carlos Higuero, un veterano de 34 a?os que apunta a medalla, y Roberto Alaiz, debutante de 22 a?os, que le adelant¨® al final por un suspiro. Se fajaron cada uno a su manera, el sabio controlando en todo momento, el joven intentando meter algo m¨¢s de ritmo al principio, y el resultado fue el mismo: los dos estar¨¢n en la final de hoy.
Y si el atletismo espa?ol ya no debe medirse en funci¨®n del n¨²mero de medallas que se lleva el equipo en la maleta, como tambi¨¦n defiende Cid, sino por la forma en que compiten los atletas, cada uno a su nivel, cada uno seg¨²n sus posibilidades, tambi¨¦n fue una buena jornada para los espa?oles en la soleada y fr¨ªa Gotemburgo. Porque Natalia Rodr¨ªguez, directa tambi¨¦n a las medallas, e Isabel Mac¨ªas dominaron sus respectivos 1.500 metros y estar¨¢n, tambi¨¦n hoy, en la final; y los chicos del 800 metros, Kevin L¨®pez y Luis Alberto Marco, con autoridad, y Francisco Rold¨¢n por tiempos (el m¨¢s r¨¢pido de todos ellos porque tambi¨¦n la suya fue la serie m¨¢s r¨¢pida), tambi¨¦n pasaron de ronda, aunque a estos deben superar a¨²n unas semifinales. Hasta Patricia Sarrapio, tan desafortunada en otras competiciones, logr¨® hacerse un hueco en la final de triple, para mayor alegr¨ªa de Cid, que fue triplista en su ¨¦poca y responsable de los saltadores en la federaci¨®n, a los que sigue dando instrucciones desde la grada. Dice el entrenador de Sarrapio, Juan Carlos ?lvarez, que la madrile?a, que ha logrado entrar en su primera gran final a los 30 a?os, ha encontrado en el aliento de Ana Peleteiro en su cogote, la chispa motivante que echaba de menos desde que se retir¨® Carlota Castrejana, a quien emulaba desde juvenil.
Para todos ellos la jornada pareci¨® f¨¢cil vista desde fuera, como si visualizaran el objetivo respectivo y lo lograran sin aparente esfuerzo. A la espera de retos m¨¢s dif¨ªciles. Aunque despu¨¦s del 3.000, Higuero y su compa?ero se sometieran a un tratamiento expr¨¦s de hielo y masaje para recuperar sus maltrechas piernas o Natalia Rodr¨ªguez se quejara de un gemelo que le viene dando guerra en las ¨²ltimas semanas. Aunque antes de su 800, Marco siguiera preocupado por una infecci¨®n de garganta que hasta el mismo jueves le oblig¨® a medicarse y le tiene en Gotemburgo, un sevillano siempre con una bufanda al cuello.
He preferido reservar¡±, asegura Higuero, ya tranquilo, tras la prueba
Pero eso son sensaciones. Las palabras iban por otro lado. Higuero, que ya sabe lo que es subir al podio en este campeonato ¡ªaunque fuera en el 1.500, aunque la ¨²ltima vez lo hiciera en 2007¡ª, resumi¨® como un profesional su prueba. ¡°He ahorrado todo lo que he podido. Me quedaba alg¨²n cambio m¨¢s, pero he preferido reservar¡±, asegur¨®, ya tranquilo. El Le¨®n de la Blume dice que ha recuperado la ilusi¨®n que ten¨ªa cuando debut¨®, hace m¨¢s de una d¨¦cada. Su entrenador, Antonio Serrano, que ha viajado a Gotemburgo por su cuenta porque quiere apoyar a su pupilo y es consciente de que este puede volver a hacer algo grande, est¨¢ de acuerdo: "Le veo muy bien. Ha controlado muy bien la carrera. Es un veterano y sabe c¨®mo hacerlo. Le quedaban a¨²n un par de cambios...".
Por eso a ninguno de ellos les importa hablar de medallas, aunque son muy conscientes de que est¨¢ dif¨ªcil: ayer vieron al azerbaiyano Ibrahimov dar un golpe innecesario y costoso de exhibicionismo en su serie para ganarla con m¨¢s de cinco segundos de ventaja, y saben que el irland¨¦s O¡¯Lionaird, que gan¨® la otra, se entrena en Oreg¨®n con el grupo de Salazar, el mago de Mo Farah y Galen Rupp, y tiene una muy buena marca en la milla.
?ramos muy pocas y nadie quer¨ªa arriesgar¡±, explicaba Natalia Rodr¨ªguez
Tampoco le importa hablar de medallas a Natalia Rodr¨ªguez, que fue plata en 2009 y ha venido a Suecia a luchar por otra. ¡°He llegado con much¨ªsimas ganas a este campeonato y me he encontrado muy bien. Ha sido una carrera limpia. ?ramos muy pocas y nadie quer¨ªa arriesgar¡±, explicaba a¨²n sudorosa reci¨¦n acabada su prueba sobre la peque?a pista azul de los Europeos. Incluso Mac¨ªas, 5? hace dos a?os, y que empez¨® su serie con cara de susto para ganarla al final no renuncia a la lucha: ¡°Tanto Natalia como yo vamos a salir a por todas¡±, dec¨ªa con una enorme sonrisa.
Es la sonrisa que lucieron un d¨ªa feliz en Suecia los que saben que han hecho lo que deb¨ªan, que siguen vivos en los campeonatos. Por el camino se quedaron los vallistas, aunque Jackson Qui?¨®nez y Francisco L¨®pez llegaron a semifinales, y los triplistas, con Vicente Docavo rozando la final hasta el ¨²ltimo momento, y los cuatrocentistas. Pero esa es otra historia. Porque por ahora el atletismo espa?ol respira optimismo en Gotemburgo, fr¨ªa y soleada.
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