Djokovic, el waterpolista

Antes de plantarse en tercera ronda de Roland Garros (6-2, 6-0 y 6-2 al argentino Pella), el n¨²mero uno del mundo hace una de las suyas. Novak Djokovic se presenta en el club con un gorro de waterpolista para defenderse de los aguaceros, dispuesto a nadar si hace falta para buscar el ¨²nico grande que le falta. Par¨ªs es estos d¨ªas una ciudad de cielos plomizos. Se juega bajo finos chispazos de lluvia, se compite entre interrupciones por los aguaceros, calientan, paran y vuelven a calentar los tenistas, que no saben cu¨¢ndo comenzar¨¢n sus duelos.

Djokovic y Pella tienen que aguantar dos de esos parones antes de cerrar su encuentro. Los alrededores del vestuario se llenan de jugadores cargando platos de pasta sin salsa; de familiares que buscan un sitio donde sentarse; y de ex jugadores a la b¨²squeda de conversaciones. ¡°Un gigante¡±, corrobora John Big Mac McEnroe cuando habla con el entrenador de Lukas Rosol, verdugo de Rafael Nadal en Wimbledon 2012, y este pasa a su vera. ¡°Fue solo una tormenta de ideas¡±, defiende otro competidor de los que han colgado la raqueta sobre la reuni¨®n de los capitanes de la Copa Davis para estudiar nuevos formatos (bianual) y escenarios (estadio fijo, pidieron algunos) para la cita.

Todo eso pasa mientras Nole espera a que se reanude su encuentro y mientras Rafael Nadal aguarda a que comience el suyo, contra el eslovaco Klizan y por la tercera ronda. Eso no ocurre. El aguacero cancela el duelo y obliga al espa?ol a ganar tres partidos en cuatro d¨ªas si quiere estar en los cuartos de final de su partido fetiche.

2.000 d¨®lares de multa por una foto

J. J. MATEO, Par¨ªs

El ucraniano Stakhovsky, miembro del Consejo de Jugadores, ha sido multado con 2.000 d¨®lares (unos 1.500 euros)?por hacer una fotograf¨ªa de la marca que dej¨® en la arcilla una pelota que le discut¨ªa al juez de silla. "Espero que la multa no sea mucho", hab¨ªa dicho el n¨²mero 101 mundial la v¨ªspera, consciente de que su conducta durante su derrota con Gasquet contraven¨ªa el reglamento, como le advirti¨® el juez de silla mientras le amonestaba.

Las autoridades del tenis intentar¨¢n ahora restringir el uso de aparatos electr¨®nicos en los partidos: en Par¨ªs no solo se ha visto al ucraniano utilizar el m¨®vil, sino que tambi¨¦n lo hizo Gael Monfils, que grab¨® a la grada celebrando uno de sus juegos durante el encuentro que le enfrent¨® al let¨®n Gulbis.

En Roland Garros hace fr¨ªo. Llueve. Las pelotas se empapan, en consecuencia pesan m¨¢s que de costumbre y por ello disfrutan los pegadores. A la espera de que mejoren las circunstancias de juego, todos los favoritos intentar¨¢n hacer lo que hizo Djokovic durante un d¨ªa de perros: nadar, aunque sea con su gorro de waterpolista, y guardar la ropa.