Otro golpe de autoridad con toque
La selecci¨®n espa?ola sub-21 termina primera de grupo tras derrotar a Holanda con otro gran partido y elude a Italia en semifinales El s¨¢bado espera la rocosa Noruega
Hay equipos bonitos de ver por lo que transmiten, por lo que llenan los ojos con esa manera de interpretar el f¨²tbol donde cada acci¨®n tiene tanta fluidez como sentido. Es el caso de esta selecci¨®n sub-21 que ayer se asegur¨® el primer puesto del grupo tras bailar a Holanda. El triunfo le vali¨® a los futbolistas de Lopetegui para eludir a la complicada Italia en semifinales. El s¨¢bado ser¨¢ la rocosa Noruega la que ponga a prueba tanta destreza con la pelota, tanto saber elegir, tanto distinguir espacios y apoyos. Tanto atacar y defender siempre con la pelota como referente.
No jug¨® Holanda con ninguno de los titulares que la han convertido en una de las grandes favoritas del torneo. Pero tampoco aline¨® Espa?a a su once titular. Mantuvo Lopetegui el espinazo con De Gea, ??igo Mart¨ªnez, Thiago e Isco. Una manera de asegurarse fiabilidad atr¨¢s, con los dos primeros, y la superioridad con la pelota con los dos ¨²ltimos. Suficiente porque el resto escolt¨® con solvencia y el mismo estilo a esa columna de intocables.
ESPA?A, 3; HOLANDA, 0
Espa?a: De Gea; Carvajal, ?lvaro, ??igo Mart¨ªnez, Nacho; Thiago (Muniesa, m. 79), Camacho (Illarramendi, m. 52), Isco (?lvaro V¨¢zquez, m. 62); Sarabia, Morata y Muniain. No utilizados: Joel, Mari?o; Montoya, Bartra, Moreno, Koke, Rodrigo y Tello
Holanda: Bizot; Leerdam, Van der Horm, Nuy Tinck, Van Aanhlot; Fer, Clasie, Trindade (Maher, m. 71); Jozefzoon, Hoesen y Depay. No utilizados: Zoet, Marsman; Van Rhijn, De Vrij, Indi, Blind, Strootman, Van Ginkel, De Jong, John y Wijnaldum.
Goles: 1-0. M. 26 Morata. 2-0. M. 32. Isco. 3-0. M. 90. ?lvaro V¨¢zquez.
?rbitro: 0vidiu Hetegam (Ruman¨ªa). Amonest¨® a Illarramendi, Morata, Fer y Hoesen.
Unos 15.000 espectadores en el Ha Moshava de Petah Tivka.
Marcaron primero Morata? e Isco, dos de las grandes sensaciones del torneo. El delantero est¨¢ enrachado y el mediapunta con lo que juega le da para el brillo individual y colectivo. En esos dos tantos se dibuj¨® ese patr¨®n identitario que hace reconocible a Espa?a desde sus juveniles hasta sus mayores. El primer tanto naci¨® de un pase al hueco de Isco mal despejado por la defensa holandesa. La pelota le cay¨® a Sarabia, que ten¨ªa condiciones favorables para intentar el gol. No lo hizo, por el rabillo del ojo detect¨® a Morata solo en el segundo palo y le ofreci¨® la pelota para que cumpliera con el tr¨¢mite de empujarla. En varias acciones previas, Sarabia y Morata ya hab¨ªan ense?ado que se buscan y se encuentran con facilidad. La misma generosidad tuvo Sarabia en el tercer tanto con ?lvaro V¨¢zquez, que, como Morata, solo tuvo que poner el pie y salir corriendo a festejar.
Quiz¨¢ fue el tanto de Isco el que mejor represent¨® esa cadena de transmisi¨®n convencida que recorre los escalafones del f¨²tbol espa?ol. Rompi¨® Isco por el medio con la sorpresa de un nueve mentiroso para recoger el virtuoso pase que le filtr¨® Muniain. Su primer gesto bebi¨® directamente de las bases del juego: el control. Se orient¨® la pelota con la escuela, aceler¨® y meti¨® la punta de su bota izquierda por debajo del bal¨®n para dibujar un gol majestuoso en la elaboraci¨®n y en la definici¨®n. Dos futbolistas de baja estatura que se irguieron rodeados de jugadores m¨¢s altos y musculados, pero a los que result¨® imposible detectar a tiempo el l¨ªo que les hab¨ªan preparado con la pelota.
Le vino bien a Muniain la acci¨®n para levantarse de la gris temporada que lleva. Necesita un poco m¨¢s de revuelo cerca del ¨¢rea, pero tambi¨¦n sentirse capacitado para combinar cuando aparece por la segunda l¨ªnea.
Domin¨® Espa?a y cuando Holanda se le acerc¨® apareci¨® De Gea, otra buena noticia con tres acciones trascendentales. Un uno contra uno que sac¨® con el pie, una manopla para desviar la pelota al larguero en una falta lejana y una mano dura a un trallazo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.