¡°Quieren ser eternas¡±

¡°Ganar a Francia en Francia es ganarse la eternidad. Hemos hecho historia en este Europeo, pero si algo define a este equipo es la ambici¨®n y estas jugadoras quieren el oro para ser eternas¡±, en la v¨ªspera de la final (20.00, Tdp) el seleccionador espa?ol, Lucas Mondelo, desborda el mismo anhelo que su equipo sobre la pista. 20 a?os despu¨¦s de que la selecci¨®n femenina lograra la primera medalla de oro de la historia del baloncesto espa?ol en el Europeo de Perugia de 1993, el p¨®ster de Blanca Ares, Betty Cebri¨¢n, Pilar Alonso, Ana Bel¨¦n ?lvaro, Laura Grande, M¨®nica Messa, Carolina M¨²jica, Paloma S¨¢nchez, Pilar Valero, Mar Xantal, Marina Ferragut y Margarita Geuer, con Manolo Coloma al frente de la pizarra, puede reeditarse en Orchies con otro grupo de leyenda.

¡°Han llegado a la final la mejor plantilla que es Francia y el mejor equipo que somos nosotros¡±, analiza Mondelo. ¡°F¨ªsicamente son muy superiores, pero con mucho desgaste y siendo muy fuertes mentalmente vamos a intentar derribar ese muro. Nuestro estilo no les va nada bien. Ser¨¢ un partido de trampas, de intentar que no se sientan c¨®modas y no les lleve en volandas la Marsellesa, de cortarles su ritmo sin perder el nuestro. Es dif¨ªcil, pero es posible. Son favoritas, pero no vamos a salir a verlas venir¡±, prosigue. ¡°La clave es llegar con opciones al tramo final. Les puede pesar la presi¨®n y podemos darlas la puntilla¡±. Espa?a llega a la cita por el oro tras un campeonato excelso, con ocho victorias en otros tantos partidos, luciendo adem¨¢s la condici¨®n de m¨¢xima anotadora del torneo (73,9 puntos por partido por los 70,1 de Francia).

Mondelo se retrotrae a 2011 para encontrar el secreto de este equipo. ¡°Hay truco en la qu¨ªmica de este grupo. Con la mitad de estas jugadoras fuimos campeonas de Europa hace dos a?os y ahora son el n¨²cleo duro de esta selecci¨®n. Tanto el m¨¦todo de trabajo como los sistemas ya los conoc¨ªan. Al resto tambi¨¦n las hab¨ªa entrenado en categor¨ªas inferiores y as¨ª es m¨¢s f¨¢cil¡±, cuenta el que fuera el entrenador del hist¨®rico Perfumer¨ªas Avenida que gan¨® la Euroliga en Ekaterimburgo con Silvia Dom¨ªnguez, Alba Torrens, Sancho Lyttle, Marta Xargay y Laura Gil en sus filas. ¡°Hubo magia. Se cre¨® una complicidad ¨²nica entre jugadoras y cuerpo t¨¦cnico. ?ramos una sola persona, nos entend¨ªamos con la mirada, jugamos un baloncesto de alt¨ªsimo nivel, utilizamos el espacio a¨¦reo que apenas se utilizaba en chicas. Las cualidades de Sancho [Lyttle] y Alba [Torrens] nos permit¨ªan jugar por arriba, con palmeos junto al aro¡­Despu¨¦s ten¨ªamos el mismo ritmo fren¨¦tico que ahora, utiliz¨¢bamos a todo el equipo y entraban en pista con una intensidad que hac¨ªa que al final el otro equipo explotara. Eran incapaces de aguantar ese ritmo y esa concentraci¨®n¡±.

Despu¨¦s de cinco europeos consecutivos sin bajarse del podio (cuatro bronces y una plata entre 2001 y 2009), el noveno puesto en la cita de 2011 -que les cost¨® adem¨¢s perderse la cita ol¨ªmpica de Londres- se convirti¨® en una cuenta pendiente que ha sido el motor de Espa?a en este campeonato. ¡°La motivaci¨®n y el compromiso son m¨¢ximos, el equipo estaba muy dolido por lo que paso en el Europeo de hace dos a?os. El orgullo estaba herido. Se pod¨ªa reaccionar desde el lamento y la autocomplacencia o con rabia y car¨¢cter para reivindicar nuestra verdadera posici¨®n¡±, sigue Mondelo busc¨® ese interruptor motivacional desde el primer d¨ªa de concentraci¨®n. ¡°En la primera charla me dediqu¨¦ a repasar su curr¨ªculum y a decirlas: ¡®t¨² eres la leche y t¨² tambi¨¦n y t¨² m¨¢s todav¨ªa, t¨² has ganado mil cosas¡­pero cuando empiece el Europeo, cuando lancen el primer bal¨®n al aire, no sois m¨¢s que novenas de Europa. Ni campeonas de Liga, ni de Europa, ni nada de nada. Est¨¢ en vosotras hacer algo para cambiarlo¡±, recuerda.

La reivindicaci¨®n del estatus perdido se ha llevado a cabo con un baloncesto din¨¢mico, intenso y ambicioso que ha llevado a Espa?a a ganar sus ocho partidos por una media de 17,75 puntos de ventaja (incluidos un +24 ante Suecia, un +36 ante Eslovaquia o el +19 de la semifinal ante Serbia). Una selecci¨®n de veteranas y noveles que ha fusionado a la perfecci¨®n caminos de ida y vuelta en direcci¨®n a la posteridad. ¡°Las veteranas, Amaya [Valdemoro] y Elisa [Aguilar], han dado ese punto de experiencia y de madurez que se las supon¨ªa, asumiendo un rol muy diferente al que han tenido hasta ahora y ayudando mucho fuera y dentro de la cancha. Lo han ganado todo, son dos estrellas y han sido las superjefas del baloncesto espa?ol durante a?os y aqu¨ª puntualmente han intervenido de forma decisiva en el juego. Hay que hacerlas un monumento. Se van a retirar a lo grande, como se merecen¡±. ¡°Despu¨¦s, Sancho [Lyttle] nos da el factor diferencial de m¨²sculo y calidad por dentro; Alba [Torrens] es una jugadora de dibujos animados, capaz de hacer cosas imposibles; Silvia [Dom¨ªnguez] y Laia [Palau] han sido claves en el puesto de base y Marta [Xargay] es la multiusos¡­lleva el bal¨®n, postea como un p¨ªvot, ayuda en el rebote y es la mejor defensora. Todas ellas y el resto de j¨®venes han mezclado a la perfecci¨®n. Son hijas de la misma idea y gracias al m¨¦todo FEB, el trabajo estaba adelantado en clubes y selecciones inferiores. Han jugado y crecido juntas, mir¨¢ndose en el espejo de las mayores, y cuando llegan a la absoluta lo hacen con una educaci¨®n competitiva y un sentimiento grupal que han aprendido desde ni?as¡±.

En el atlas del baloncesto espa?ol Orchies y Perugia est¨¢n separadas por 1.500 kil¨®metros de distancia y 20 a?os de esfuerzo en busca del oro. Europa busca reinas de la canasta y de nuevo Francia, como en 1993, ser¨¢ el rival en la lucha por el trono.