Seve sigue ¡®cumpliendo a?os¡¯

Ni los 25 a?os que se cumpl¨ªan del tercer y ¨²ltimo Open Brit¨¢nico de Seve Ballesteros, en Royal Lytham en 1988, animaron a la tropa espa?ola a hacer algo grande. Amag¨® Miguel ?ngel Jim¨¦nez en las dos primeras jornadas, liderato incluido, y apenas hubo rastro de la versi¨®n brillante de Sergio Garc¨ªa. El ¨²ltimo grande sigue teniendo fecha del siglo pasado, el Masters de Olaz¨¢bal de 1999, y es precisamente el jugador vasco quien sigue ¨²ltimamente dando m¨¢s glorias al golf espa?ol: la victoria en la Ryder como capit¨¢n y el premio Pr¨ªncipe de Asturias.

-Miguel ?ngel Jim¨¦nez, incombustible. 13? con +5. Pocos esperaban que despu¨¦s de cinco meses de baja por una pierna rota, a los 49 a?os, y en el que puede ser su ¨²ltimo curso en el circuito, Jim¨¦nez fuera el l¨ªder en solitario del Open despu¨¦s de la segunda ronda. Pero ah¨ª estaba El Pisha, el m¨¢s feliz del mundo, levantando una ola de admiraci¨®n por su juego y su c¨¢racter. Pese a la reciente lesi¨®n, y pese al codo izquierdo sobrecargado, Jim¨¦nez cumpli¨® en Muirfield y fue de nuevo el espa?ol mejor clasificaco. Sobre el futuro, ya se ver¨¢. ?l quiere seguir en la ¨¦lite compitiendo con los j¨®venes.

-Eduardo de la Riva, cierre por lo alto. 15? con +6. Una ¨²ltima ronda de dos bajo par es un excelente broche para alquien que debuta en un grande, y m¨¢s en un campo torturador como Muirfield. Adornado, adem¨¢s, con un eagle en hoyo nueve tras un putt de siete metros. El catal¨¢n, de 31 a?os, se va impesionado por el ambiente, por el p¨²blico, por la dureza del campo, "que desgasta, que no perdona nada, para cada birdie hay que sudar much¨ªsimo". Poco a poco le fue cogiendo el punto a los greens y acab¨® feliz. "Ya he demostrado este a?o que estoy jugando bien. Poco a poco ir¨¦is viendo al mejor Eduardo", anticipa.

-Sergio Garc¨ªa, desaprovechado. 21? con +7. Quiz¨¢s la mejor fotograf¨ªa de su actuaci¨®n la den los finales de jornada. En la primera, en la segunda y en la cuarta ronda acab¨® con un bogey en el hoyo 17 y otro en el hoyo 18, un s¨ªntoma significativo de c¨®mo acab¨® su participaci¨®n, con los brazos bajados en lugar de luchando por una clasificaci¨®n mejor. Otra vez part¨ªa entre los favoritos y otra vez tuvo una actuaci¨®n discreta. En la jornada final solo sal¨ªa un golpe peor que Mickelson, al final ganador. El estadounidense s¨ª crey¨® en una m¨ªnima posibilidad de victoria, no as¨ª el espa?ol.

-Rafael Cabrera-Bello, aprendiendo. 21? con +7. Su mejor papel en un grande. En los cuatro anteriores no hab¨ªa pasado el corte (US Open y PGA 2012), fue 47? en el US Open de 2010 y 81? en el Open Brit¨¢nico de 2012. En su quinta participaci¨®n en el Grand Slam ha demostrado temple y calma y capacidad para competir con los mejores, confianza en s¨ª mismo y una buena mentalidad. Antes de salir a competir en la ¨²ltima jornada, escribi¨®: "Si crees en ti mismo, nada es imposible". A los 29 a?os, y con dos victorias en el circuito europeo, este canario tiene pista por delante. "Aunque todav¨ªa regalo errores. Voy aprendiendo a base de golpitos".

-Gonzalo Fern¨¢ndez-Casta?o, desilusionado tras las expectativas. "Me voy triste por el Open que he hecho, bastante pobre. Ten¨ªa las expectativas m¨¢s altas". Despu¨¦s de ser 20? en el Masters de Augusta, y 10? en el US Open (su primera clasificaci¨®n entre los 10 mejores), el madrile?o deja Muirfield "desilusionado". Lleg¨® con un buen juego en la bolsa, pero los cambios en el swing, "por el viento, porque lo vas tocando por el campo", le han descentrado. Lo positivo, que ha pasado un nuevo corte en un grande y que acumula experiencia de cada a su pr¨®ximo destino, jugar el circuito estadounidense y mudarse al otro lado del charco la pr¨®xima temporada.

-?lvaro Quir¨®s: sigue sin encontrarse. El ¨²nico de los seis espa?oles que no pas¨® el corte en Muirfield. El gaditano sigue entre tinieblas, sin ver la luz al final del t¨²nel. Las lesiones en las mu?ecas lastraron una carrera en ascensi¨®n y ahora, despu¨¦s de pasar por el quir¨®fano, no halla el pulso firme ni las buenas sensaciones. Son ya 18 meses en los que no se encuentra. "Mi juego no est¨¢ mal del todo, pero me falta algo, un clic. Es un juego fr¨¢gil, sobre todo con el putt". En busca de una soluci¨®n, compaginar¨¢ sus entrenamientos con Pep¨ªn Rivero con los consejos de Butch Harmon, el preparador que forj¨® a Tiger Woods y que le ayud¨® a ganar ocho grandes hasta 2004. Unas conversaciones en Muirfield y una pr¨®xima cita en Las Vegas o a final de a?o pueden servir a Quir¨®s para salir a flote. Uno de los mejores pegadores del circuito est¨¢ en la encrucijada.