Ona se ba?a en bronce
La solista espa?ola, digna heredera de Mengual y Fuentes, brilla en la final de libre La china Huang, plata por detr¨¢s de la rusa Romashina
Marilyn Monroe es imbatible. Svetlana Romashina se pint¨® un lunar en la mejilla izquierda y se embuti¨® en un escalofriante ba?ador de luces para interpretar a la legendaria actriz nadando al comp¨¢s de I want to be loved by you. Su ejercicio en la final de solo libre fue inexorablemente bendecido por la medalla de oro. La china Huang Xuechen fue plata y la espa?ola Ona Carbonell conquist¨® un bronce que promete ser el inicio de una prodigiosa carrera.
El ¨¦xito puede ser de cualquier color. Todo depende de su significado. El bronce de Ona supuso la constataci¨®n de que la nadadora posee una reserva de talento todav¨ªa por explotar. El Palau Sant Jordi se conmovi¨® ante la ejecuci¨®n emocionada y pl¨¢stica de la ni?a de Valvidrera, que a sus 23 a?os se internaba en el incierto territorio del solo. Tras las agotadoras jornadas iniciales, que por poco la hacen zozobrar en la sesi¨®n preliminar, su ¨²ltima exhibici¨®n fue la mejor. La que resolvi¨® con m¨¢s energ¨ªa, la que expres¨® con m¨¢s soltura, liberando demonios y desplegando por la l¨¢mina de agua un repertorio espl¨¦ndido de curvas, giros, salidas, y espagats, al hilo del relato coreogr¨¢fico de Barcelona, la canci¨®n que inmortalizaron Freddie Mercury y Montserrat Caball¨¦ durante los Juegos de Ol¨ªmpicos de 1992.
Los jueces le dieron 94.290 puntos, 1.000 menos que a la China y 3.000 menos que a la rusa. Ella se dio por satisfecha. ¡°Me he sentido genial¡±, dijo, ¡°y considerando que apenas tengo experiencia en solos, me voy contenta porque he podido disfrutar y brillar. Todo aquello que pod¨ªa controlar lo he controlado¡±.
¡°El llanto es bueno¡±
La matriarca de la nataci¨®n sincronizada asi¨¢tica, la japonesa Masayo Imura, es una se?ora impasible. Cierto d¨ªa, mientras somet¨ªa a Huang Xuechen a un ejercicio de descarga muscular, not¨® que su pupila sollozaba.
¡ª?Est¨¢s llorando?, le pregunt¨®.
¡ªS¨ª, gimote¨® la ni?a.
¡ªLlorando o riendo, lo importante es que la pr¨¢ctica no se interrumpa¡ª, le dijo Masayo, con un leve gui?o, ¡ªla risa y el llanto son buenos para la ventilaci¨®n.
Huang, de 23 a?os, la principal nadadora china, plata ayer en el solo libre, confes¨® que mientras preparaba los Juegos de Pek¨ªn, confinada en un centro de alto rendimiento, alejada de sus padres desde la ni?ez, hab¨ªa d¨ªas en que el agotamiento la quebraba por dentro hasta quitarle la verg¨¹enza, y lloraba. Y que la se?ora Masayo promov¨ªa las l¨¢grimas porque las consideraba una purga. Una catarsis en la dura senda hacia la perfecci¨®n que entre 2006 y 2011 hizo de China, un pa¨ªs sin ninguna tradici¨®n en la disciplina, la segunda potencia mundial.
Ayer el Palau Sant Jordi asisti¨® al avance implacable de China en este deporte a costa de conquistar el terreno que hab¨ªa pertenecido a Espa?a. El m¨¦todo es duro, pero, de momento, no se conoce otro para quienes buscan lo m¨¢s alto del podio.
Espa?a baj¨® un escal¨®n respecto a la plata del solo libre de los ¨²ltimos Mundiales, pero gan¨® una excelente int¨¦rprete, una digna heredera de Andrea Fuentes y Gemma Mengual. El primer paso en la preparaci¨®n de los Juegos de R¨ªo, en 2016, fue un paso firme. Mengual, ahora en el equipo t¨¦cnico, pondera con optimismo la progresi¨®n de su alumna y excompa?era a la luz de una coreograf¨ªa especialmente dise?ada para la principiante: ¡°La m¨²sica casi no hubo ni que pensarla. El solo de Barcelona en Barcelona. Yo si hubiera tenido la oportunidad de nadar un solo aqu¨ª habr¨ªa cogido esa m¨²sica tambi¨¦n. Seguramente m¨¢s adelante meteremos m¨¢s figuras verticales. Pero Ona est¨¢ aprendiendo a nadar solos y hab¨ªa que hacer una coreograf¨ªa en la que se sintiera c¨®moda, que hiciera los movimientos que a ella le salen naturales. Poco a poco se lo complicaremos m¨¢s y con la capacidad que tiene de asimilar tendr¨¢ un margen de crecimiento enorme¡±.
El bronce de Ona cerr¨® un ciclo y comenz¨® otro nuevo. Hace 10 a?os, en los Mundiales de Barcelona de 2003, Gemma Mengual, la fundadora de la saga de la nataci¨®n espa?ola, obtuvo su primera medalla en una gran competici¨®n: tambi¨¦n fue un bronce, el primer trofeo de una larga serie que dej¨® simiente y que se prolong¨® en Andrea Fuentes y en Ona Carbonell.
Ona prepar¨® Barcelona con Gemma y con Montserrat Caball¨¦, la soprano que acompa?¨® a Freddie Mercury en el concierto de la Plaza de Espa?a en 1992, y que le instruy¨® en el arte de la expresi¨®n corporal en el escenario. ¡°Me dijo que pensara mucho con el alma¡±, record¨® Ona, ¡°que es una canci¨®n de celebraci¨®n de Barcelona, de la ciudad, del Mediterr¨¢neo, que ten¨ªa que llegar a la gente, que saliera contenta, que expresase con los brazos, pero que tambi¨¦n tuviera un momento para mirar a todos los jueces y al p¨²blico en plan celebraci¨®n. Fue una s¨²per experiencia¡±.
Ona Carbonell se colg¨® su cuarta medalla con Barcelona. No fue la plata que so?aba pero puso los fundamentos de una larga y pr¨®spera carrera en solitario.
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