Un infierno en el viento
Carla Su¨¢rez y Marcel Granollers, debutantes frente a los remolinos de la central, se deshacen en el saque y suman solo tres juegos frente a Serena y Djokovic, los n¨²meros uno
El resultado es abrumador, 30 juegos contra tres. Ese es el c¨®mputo global de los partidos que enfrentan a Carla Su¨¢rez y Marcel Granollers contra los n¨²meros uno del mundo: 6-0 y 6-0 para Serena Williams en cuartos y 6-3, 6-0 y 6-0 para Novak Djokovic en octavos, respectivamente. Los espa?oles pagaron la diferencia de clase frente a dos pesos pesados, pero no solo eso. Ellos, que son dos pesos pluma, acabaron desarbolados por los remolinos de la pista m¨¢s grande del planeta (casi 25.000 espectadores), donde a¨²lla el viento y proliferan los torbellinos. Debutantes en la Arthur Ashe frente a dos tenistas habituados a sus trampas, Su¨¢rez y Granollers fueron engullidos por el brillante juego de sus contrarios y los malos consejos que susurraba el aire en sus o¨ªdos. Frente al muro del viento en contra, la canaria solo dispar¨® un 56% de primeros saques, por el 74% de Serena; y Granollers se ahog¨® en un paup¨¦rrimo 48%, por el 72% de Nole.
¡°Serena estuvo impecable. Carla se sinti¨® muy peque?a¡±, dice su t¨¦cnico
¡°Al jugar contra Serena y con viento en contra, Carla se sinti¨® muy peque?a¡±, resumi¨® el t¨¦cnico Xavi Bud¨® sobre su pupila, que solo permaneci¨® 58 minutos en pista y eso, adem¨¢s, porque los descansos eran m¨¢s largos para que se emitieran los anuncios televisivos, seg¨²n brome¨® la espa?ola. ¡°Por supuesto, Serena estuvo impecable y Carla fallona, pero sobre todo le perjudic¨® el viento, porque al ser peque?a lo puede compensar menos. Serena, la central, viento... Es una combinaci¨®n muy dura, porque te obliga a llegar mejor a la bola y Carla no tiene tantas palancas¡±, prosigui¨® el entrenador de la primera espa?ola en cuartos desde 1998 (Arantxa S¨¢nchez Vicario), que tambi¨¦n es la segunda tenista que se marcha en bicicleta (6-0 y 6-0) desde el inicio de la Era Abierta (1968). ¡°Carla mide 1,62m¡±, subray¨® Bud¨®. ¡°Cuando juega con tenistas de envergadura tan grande [Serena mide 1,75m] se queda sin ver porter¨ªa, no ve espacios para hacer da?o. Eso, agravado por el viento en contra, hizo que no tuviera tiempo ni de jugar ni de pensar. La avasallaron¡±, certific¨® sobre la primera espa?ola en el top-15 desde hace un decenio. ¡°A nivel t¨¦cnico, le influy¨® lo mental. Pegaba pensando en el ob¨²s que le iba a venir luego. Por ejemplo, durante todo el torneo, tras el saque, ca¨ªa dentro de la pista. Ante Serena, ca¨ªa fuera, su cuerpo se iba para atr¨¢s. Su cabeza le dec¨ªa: ¡®?Cuidado! ?Viene un bomba!¡¯ Y con la derecha igual. Cambi¨® sus gestos biomec¨¢nicos¡±, cerr¨®.
¡°Es una pista un poco diferente, muy grande, en la que coger las medidas si no est¨¢s acostumbrada no es f¨¢cil¡±, explic¨® Sara Errani, la n¨²mero cinco mundial en individuales y n¨²mero uno en dobles, una tenista de 1,64m que sirve de espejo a la espa?ola, y una que entiende perfectamente lo que sufri¨® ante Serena porque ella perdi¨® 6-0 y 6-1 con la estadounidense este a?o en semifinales de Roland Garros. ¡°Carla y yo, contra Serena, lo tenemos muy dif¨ªcil. Las que juegan a winners igual pueden zafar alg¨²n juego. Intentas forzar un poco de m¨¢s y haces m¨¢s errores. A m¨ª me ha pegado muchas palizas. El 6-0 y 6-0 no debe preocupar a Carla¡±, prosigui¨® antes de emplear un peculiar argumento que tiene eco en el vestuario. ¡°Al contrario, debe sentirse orgullosa. Serena entr¨® a full, cuando en otros partidos empieza poco a poco, relajada, regalando alg¨²n juego. Quiere decir que para Serena Carla es una adversaria muy buena, que sabe que si no est¨¢ atenta Carla le puede hacer da?o. Demuestra su preocupaci¨®n¡±, explic¨® la italiana, haciendo de altavoz a quienes piensan en la caseta que a la canaria le perjudic¨® haber jugado un buen partido de dobles contra las Williams esta misma semana (ella y Silvia Soler le ganaron un set a las hermanas estadounidenses). Esta es la teor¨ªa: Serena, que le tiene tomada la matr¨ªcula a Su¨¢rez desde que elimin¨® a Venus en el Abierto de Australia 2009, quer¨ªa marcar territorio, y adem¨¢s conoc¨ªa el territorio. Como dijo ella misma: ¡°No me afect¨® tanto el viento porque llevo como 50 a?os jugando aqu¨ª¡±.
¡°Las condiciones eran dif¨ªciles. No sent¨ªa la pelota¡±, explica el jugador catal¨¢n
?Fue eso lo que ocurri¨® en el Djokovic-Granollers? No, ah¨ª no hab¨ªa cuentas pendientes... pero s¨ª la novedad de la central y el viento, una combinaci¨®n explosiva. Los muros de la pista m¨¢s grande del mundo se van abriendo y recogen el aire que entra a trav¨¦s de sus inclinados vomitorios, creando molestos remolinos.
¡°Entr¨¦ m¨¢s nervioso de lo normal, y las condiciones eran dif¨ªciles¡±, cont¨® ayer Granollers, que adem¨¢s jug¨® agotado por haber disputado sus tres partidos anteriores a cinco sets. ¡°El viento me complic¨® mucho. No sent¨ªa la pelota¡±. ¡°Con viento en contra me era muy complicado, y saqu¨¦ bastante mal todo el partido, cosa que era muy importante¡±, cerr¨® tras escuchar murmullos de desaprobaci¨®n de la grada.
En Nueva York, dos espa?oles se llevaron un castigo, superados por los contrarios y las circunstancias de juego. Anoche, mientras tanto, otros tenistas de La Armada buscaban las semifinales: David Ferrer contra Richard Gasquet y Rafael Nadal contra Tommy Robredo.
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