Bronce redentor

Espa?a prolonga su edad de oro con un bronce. La de Eslovenia ya es la 15? medalla en categor¨ªa absoluta del baloncesto espa?ol masculino, la octava en las ¨²ltimas 11 grandes citas ¨Cincluyendo Europeos, Mundiales y Juegos-. Una cosecha que estuvo a punto de interrumpirse en Liubliana a fuerza de ventajas mal gestionadas, pr¨®rrogas mal resueltas, dureza mal combatida y liderazgos mal resueltos, pero que acab¨® salv¨¢ndose a fuerza de defensa ¨Cla mejor del campeonato- y talento ¨Cnotable a pesar de las ausencias-. Bast¨® un solvente partido ante Croacia para subir al tercer escal¨®n del podio.

La primera cuesti¨®n a dirimir ten¨ªa que ver con la actitud. El encuentro por el bronce mide siempre a dos equipos magullados por la derrota a las puertas de la gloria. La medalla era el premio a la capacidad para enderezarse y Espa?a luci¨® aplicaci¨®n en su puesta en escena. Un 14-4 de parcial en los primeros cinco minutos liderado por Calder¨®n otorg¨® la iniciativa a los de Orenga. Ejerciendo de director desde el puesto de escolta, el extreme?o lanz¨® los primeros contragolpes del partido aprovechando los desajustes de la defensa croata. El jugador de Dallas era el ¨²nico del actual equipo que estaba presente en 2005 la ¨²ltima vez que Espa?a disput¨® el partido por el tercer y cuarto puesto. En aquella ocasi¨®n, en el Eurobasket de Serbia, el remate final devino en un zarandeo (98-68 a favor de Francia) que le acab¨® costando el puesto al entonces seleccionador, Mario Pesquera.

¡°Me arrepiento de aquel partido y de que esta generaci¨®n no tenga una medalla m¨¢s¡±, se?al¨® Calder¨®n en la v¨ªspera. Se trataba de que el bronce brillara tanto para Espa?a como para Croacia anunci¨® el seleccionador. Se trataba de batirse el cobre por la medalla prometieron los jugadores. Pero el primer estir¨®n dio paso a la distensi¨®n defensiva. Repesa decidi¨® contener a su rival emulando su plan y reuni¨® en pista a dos bases para dinamizar a su equipo. Draper y Ukic atajaron las carreras de la selecci¨®n espa?ola y lucieron clarividencia en ataque. Y bajo la doble batuta croata se desat¨® Bogdanovic, sin cadenas en el per¨ªmetro.

Llull, desenfocado durante todo el torneo, ensay¨® la redenci¨®n

El alero del Fenerbah?e ofreci¨® un curso de tiro desde el 6,75 (3 de 4 en triples y 7 de 10 en tiros de campo en los primeros 20 minutos) y su punter¨ªa puso en ¨®rbita a Croacia (27-28, m. 16). Bogdanovic lleg¨® al descanso con 19 puntos en su hoja de servicios, casi la mitad de los que sum¨® su equipo en el partido que abri¨® el torneo para las dos selecciones. Aquel 68-40 a favor de Espa?a en el debut espole¨® a los de Repesa hasta el punto de devolverles a las semifinales del torneo 18 a?os despu¨¦s de su ¨²ltima presencia cuando alcanz¨® el bronce en 1995. Pero la reacci¨®n no alcanz¨® la medalla.

Bronce redentor

Cuando arreciaba la tormenta Bogdanovic, Orenga reclut¨® a Llull. Calder¨®n se march¨® al banquillo ¨Cno regres¨® hasta los minutos finales- y el menorqu¨ªn, desenfocado durante todo el torneo, ensay¨® la redenci¨®n. Ocho puntos del jugador madridista en el segundo acto, unidos al trabajo de Claver en la pintura, encarrilaron de nuevo a Espa?a en el partido (47-36, m. 20).

Ni Tomic ni ninguna de sus parejas en pista eran capaces de aportar defensa, continuidad y alternativas al buen trabajo de su per¨ªmetro. Y, como le ocurriera ante Lituania en semifinales, Croacia se apag¨® tras el paso por los vestuarios. Marc Gasol y Claver se hicieron fuertes bajo los aros, Llull dispar¨® sus prestaciones y la ventaja se fue hasta los 14 puntos a favor de Espa?a (63-48, m. 30). No hubo m¨¢s historia que el tranquilo paseo de Espa?a hasta el tercer escal¨®n. Espa?a sac¨® brillo al bronce.