Otro grande se juega en el banquillo
El primer grande de la temporada levanta el tel¨®n con siete ganadores del Grand Slam como entrenadores y Djokovic, asesorado por Becker, buscando soluciones ante Nadal
Andy Murray lo compara con quedar por primera vez con la chica de sus sue?os. Y se r¨ªe. ¡°Los primeros meses que estuve trabajando con Ivan Lendl iba nervioso a los entrenamientos. Como en el comienzo de una relaci¨®n con una mujer, con tu novia, intentaba impresionarle¡±. El Abierto de Australia levant¨® el tel¨®n esta madrugada con un pu?ado de tenistas que acuden a los entrenamientos con mariposas en el est¨®mago. Novak Djokovic estrena su alianza con Boris Becker. Roger Federer inicia su aventura con Stefan Edberg. Kei Nishikori lo hace con Michael Chang. Marin Cilic con Goran Ivanisevic. Como Richard Gasquet trabajar¨¢ este curso con Sergi Bruguera (ausente en Melbourne) y Lleyton Hewitt sigue con Tony Roche, el resultado es el siguiente: 25 t¨ªtulos grandes, siete excampeones y tres ex n¨²meros uno se sientan en los banquillos en 2014. No hay mejor ejemplo de la pujanza econ¨®mica y medi¨¢tica del tenis. Hasta ahora, los tenistas en activo nunca pudieron seducir al mismo tiempo a tantas leyendas para que abandonaran su dulce retiro y volvieran a la vida viajera.
¡°Estos t¨ªos han ganado torneos de Grand Slam. Comprenden por qu¨¦ tomas ciertas decisiones en la pista, y la presi¨®n, dos cosas que son dif¨ªciles de entender para quienes no las han vivido¡±, resume Murray, que ya ha celebrado dos grandes con Lendl y que sabe las cifras que se manejan en el mundillo: las leyendas no se mueven por menos de 5.000 d¨®lares por semana de trabajo (m¨¢s de 3.500 euros), firman bonus y saben que su nombre y el de sus marcas asociadas (de ropa y academias, por ejemplo) se relanzan al volver a la primera l¨ªnea en compa?¨ªa de iconos como Federer; de estrellas como Nole o Murray; y de imanes para los patrocinadores asi¨¢ticos como Nishikori.
Que yo haya disputado tantas finales es algo que no se compra" Boris Becker
En Melbourne, las leyendas act¨²an como gestores cualificados de las emociones en un deporte individual. Todos sus empleadores buscan lo mismo: adem¨¢s de pulir alg¨²n aspecto estrat¨¦gico (?qui¨¦n se atrever¨ªa a corregir la t¨¦cnica de un Federer o de un Djokovic?), ganar ese cent¨ªmetro que les falta en la batalla mental, por ahora generalmente dominada por Rafael Nadal, que sigue entrenado por su t¨ªo Toni y debutar¨¢ ma?ana contra Tomic. ¡°Cuanto m¨¢s arriba est¨¢s, m¨¢s importa lo mental frente a lo t¨¦cnico¡±, asegura Murray. ¡°En eso es donde m¨¢s pueden ayudar¡±, confirma Djokovic, que en el fondo piensa que deb¨ªa haber ganado dos partidos de 2013 que perdi¨® ante el mallorqu¨ªn (semifinal de Roland Garros y final del Abierto de EEUU).
¡°Que yo haya ganado tantos grandes, que haya disputado tantas finales y tantas semifinales, es algo que no se puede comprar en una tienda¡±, le explica a este diario Becker. ¡°Tienes experiencia o no. Muchos detalles conforman un campe¨®n. No es solo el tenis o lo t¨¦cnico. Importan mucho las emociones, el lado mental de la competici¨®n¡±.
¡°Yo pas¨¦ por todas las situaciones, duras y f¨¢ciles, y tuve que digerirlas¡±, coincide Ivanisevic mientras llega su comida. ¡°Solo quienes lo han vivido pueden explicarle al tenista estos peque?os detalles que son tan importantes hoy. Jugu¨¦ contra muchos de estos campeones que ahora vienen como entrenadores. Empezamos esta era de tenis r¨¢pido que ahora se ha llevado a otro nivel¡±, sigue, antes de subrayar la clave del ¨¦xito para esas duplas cargadas de fuertes personalidades: ¡°Para ser entrenador, tienes que dejar en casa el ego. Si el ego te acompa?a, no puedes serlo. Da igual cu¨¢ntos grandes ganaste o cu¨¢ntos no ganaste. El jugador debe ser lo m¨¢s importante. Tu trabajo es ayudarle. Si se juntan esos dos egos, es imposible¡±.
En Australia, varios excampeones aprenden a dejar de ser el espect¨¢culo para pasar a ser parte del espect¨¢culo. De eso puede depender una cosa muy importante: quiz¨¢s, qui¨¦n gana el Abierto.
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