¡°Ahora, los jugadores son demasiado individualistas¡±
Neale Fraser (Melbourne, 1933) tiene manos gran¨ªticas. Con ellas alcanz¨® un ¨¦xito irrepetible: en el Abierto de EEUU de 1960 sum¨® todos los t¨ªtulos posibles (individual, dobles y doble mixto)
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
Neale Fraser (Melbourne, 1933) tiene manos gran¨ªticas. Con ellas alcanz¨® el n¨²mero uno amateur, tres t¨ªtulos individuales del Grand Slam, once de dobles y un ¨¦xito irrepetible: en el Abierto de EEUU de 1960 sum¨® todos los t¨ªtulos posibles (individual, dobles y doble mixto). Hoy se sienta para hablar del pasado y el presente en un sof¨¢ negro del palco de presidencia de la pista Rod Laver, bautizada en honor de su amigo, al que derrot¨® en dos finales grandes.
Pregunta. Manolo Santana, el pionero del tenis espa?ol, siempre cuenta que si gan¨® Wimbledon fue porque los australianos le ense?aron los secretos de la hierba. ?Por qu¨¦ ayudar al enemigo?
Respuesta. No era un enemigo. Como nosotros, era alguien que amaba el tenis. En la pista, luch¨¢bamos a muerte para ganarle, pero fuera de ella era alguien como de la familia, alguien de cuya compa?¨ªa disfrut¨¢bamos, igual que lo hac¨ªamos de sus vivencias. Cuando ¨¦ramos j¨®venes, cen¨¢bamos juntos cada noche, lo que nos apeteciera, porque nadie nos dec¨ªa esto s¨ª y esto no, y luego ¨ªbamos al cine o a jugar a las m¨¢quinas de pinball. Disfrut¨¢bamos de la vida. Nos sent¨ªamos afortunados. A los aussies, como estamos tan lejos de casa, nos resulta f¨¢cil establecer lazos fuertes entre nosotros y con otros. Nos pas¨® lo mismo con los suecos. Sol¨ªamos tener grandes batallas contra ellos en la Copa Davis, pero nos hicimos muy amigos. Es un aspecto que ha desaparecido del juego. Una decepci¨®n.
P. ?Con qu¨¦ espa?oles compart¨ªan vivencias?
R. Con Santana, Arilla y Gisbert. Nos divert¨ªamos mucho.
P. ?C¨®mo eran?
R. Gisbert era muy r¨ªgido jugando, rob¨®tico. Santana ten¨ªa tacto, estilo y clase. Un top-spin (efecto curvado) enorme. Hab¨ªa nacido para ser tenista. Le era natural. Gisbert trabaj¨® para ello.
P. ?Cu¨¢les eran los valores de aquellos tenistas australianos?
R. Nosotros viaj¨¢bamos como un equipo, en grupo. Todos ¨¦ramos hermanos: Laver, Rosewall, Newcombe, a cualquiera pod¨ªas pedirle que se entrenara contigo¡ Ese elemento se ha perdido. Ahora, todos los tenistas tienen lo que se llama entorno. Los jugadores son ahora demasiado individualistas. Tenemos que estar orgullosos de nuestro pa¨ªs, de estar juntos y jugar juntos, en lugar de ser muchos individuos que siguen cada uno su propio camino. Nosotros ¨¦ramos siete jugadores de los que cuidaba una sola persona, Hopman. Ahora, un jugador tiene a siete personas cuidando de ¨¦l. Es al rev¨¦s. Yo sol¨ªa ir a cenar con Rosewell, Newcombe, Hoad, Emerson¡ esta noche o la otra. Ahora ellos cenan con el entrenador, el m¨¢nager o la novia.
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P. ?Es una cuesti¨®n de dinero? Ustedes no cobraban.
R. El dinero ha creado esta situaci¨®n. Ahora pueden tener un entrenador a tiempo completo, un nutricionista, un fisio¡ porque hay mucho dinero. Es fant¨¢stico que reciban estos premios, pero eso de que Murray tenga seis o siete personas en su entorno me parece irreal.
P. ?Cu¨¢l fue su secreto para ganarle a Laver una final en Wimbledon?
R. A Rod no le gustaba jugar con zurdos...
P. El c¨¦sped de ahora es m¨¢s lento que entonces, seg¨²n Santana.
R. ?Yo nunca me podr¨ªa quejar de las pistas de Wimbledon!
P. ?En su tiempo se quejaban por jugar con 42 grados?
R. No recuerdo haber jugado con 42 grados, pero s¨ª con much¨ªsimo calor. Nuestro ritmo entre punto y punto era m¨¢s alto, porque no ten¨ªamos los 25 segundos de espera de ahora; no ten¨ªamos sillas en las que sentarnos entre juego y juego; pod¨ªas considerarte afortunado si te daban una bebida cuando cambiabas de lado de pista; y no hab¨ªa tie-breaks. Sentarse cada dos juegos como ahora, es una ventaja infernal. En mis tiempos, el jugador m¨¢s en forma era el que ganaba.
P. ?C¨®mo afrontaba usted aquello?
R. Solo me preocupaba mantener mi saque. Me daba igual llegar a un 10-8 con ese saque que ten¨ªa. En eso, los zurdos tenemos ventaja.
P. Nadal lo es y el saque no es su punto fuerte.
R. Yo no cambiar¨ªa nada en Nadal. Es el jugador m¨¢s r¨¢pido que nunca he visto. La forma en la que rodea la pelota para golpearla con el drive y no con el rev¨¦s¡ ?Qu¨¦ pies! El grip que tiene [forma de agarrar la raqueta] impide que saque plano. Se lanza la bola a un lado, en lugar de ech¨¢rsela a un lado. Su velocidad es fant¨¢stica.
P. ?C¨®mo lo definir¨ªa?
R. Odiar¨ªa jugar contra ¨¦l. Es divertido de ver.
P. ?Federer?
R. Lleno de armon¨ªa.
P. ?Djokovic?
R. Alguien que no es un tenista natural, sino un tenista que se ha hecho. Ha trabajado por ello. Ha conquistado el juego.
P. ?Hewitt?
R. No ha habido otro con su determinaci¨®n y sus agallas.
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