El azote de Rosell
¡°Solo quer¨ªa saber por qu¨¦ le pagaron 40 millones al padre de Neymar¡±, afirma Jordi Cases, el socio que present¨® la querella
Todo empez¨® durante una cal?otada en Perafort, un pueblo de Tarragona, en febrero de 2011. Como de costumbre, cuando Carles, Manel, I?aki, Josep Ramon, Ramon y Andreu se juntaban para comer, hablaban del Bar?a. Aquel d¨ªa, el tema de debate fue el acuerdo que la directiva acababa de cerrar para que el equipo llevara en la camiseta la publicidad de Catar. Llegados los carajillos, uno de los asistentes, fotoperiodista, explic¨® que durante la campa?a electoral, en junio del a?o anterior, inmortaliz¨® una entrevista con Javier Faus en la que el actual vicepresidente econ¨®mico reconoc¨ªa la voluntad de la candidatura de Sandro Rosell de poner publicidad en la camiseta. Juan Jos¨¦ Castillo, asesor de Rosell, inst¨® al periodista a ignorar tal declaraci¨®n ¡ª¡°se ha equivocado, no quer¨ªa decir eso¡±¡ª y sus llamadas posteriores evitaron que se publicara. El fotoperiodista, pasado el tiempo, comprendi¨® que hab¨ªan sido enga?ados y que la voluntad de Rosell, pese a ocultarlo, era poner publicidad a la camiseta.
¡°El caso Catar me demuestra que las mentiras solo se mantienen mintiendo¡±
En aquella mesa estaba Jordi Cases, farmac¨¦utico de Olesa, socio de la tercera grader¨ªa, el hombre que present¨® la denuncia por el contrato de Neymar que ahora estudia el juez Pablo Ruz, y el mismo que trat¨® de sacar adelante una moci¨®n de censura que dur¨® dos telediarios, los que tard¨® el club en encontrar una rendija legal para solicitarle el 15% de las firmas en vez del 5%. A punto de finalizar el ¨¢gape, uno de los asistentes propuso recoger firmas para solicitar a la asamblea de compromisarios la convocatoria de un refer¨¦ndum. Su objetivo era que la decisi¨®n de relegar Unicef para dar protagonismo a Catar fuera votada por los socios. Aquel grupo de amigos se agrup¨® y naci¨® Consulta Catar, que a trav¨¦s de las redes sociales se ha convertido en un grano para la directiva. Mut¨® de nombres ¡ªConsulta Bar?a, ahora Go Bar?a¡ª y de activistas, nunca m¨¢s de 10 que cotizan 500 euros al mes, pero en todas aparece Jordi Cases, alias el demonio para la junta del Barcelona, el mismo que, ahora, se siente ¡°superado por los acontecimientos¡±.
¡°Estaba convencido de que en el club me dir¨ªan algo, y que si no me lo pod¨ªan explicar todo, por lo menos me atender¨ªan: ¡®mira, o lo hac¨ªamos as¨ª o no lo hac¨ªamos¡±, relata mientras recuerda el burofax que envi¨® en noviembre del a?o pasado al club para aclarar las cuentas del fichaje de Neymar. Todav¨ªa espera respuesta. Se sinti¨® despreciado como socio y actu¨® en consecuencia. Recuerda que su querella se?ala a Rosell y no al Bar?a porque la experiencia ¡ªel caso Catar¡ª le demuestra que ¡°las mentiras solo se mantienen mintiendo¡±. Y en el caso de Neymar, ¡°s¨®lo quer¨ªa saber en concepto de qu¨¦ le hab¨ªan pagado 40 millones a la empresa del padre del jugador¡±. Reconoce: ¡°Si me llegan a decir: ¡®en concepto de nada, pero en caso contrario Neymar no habr¨ªa venido al Bar?a¡¯, me hubiera bastado. Pensar¨ªa que siguen mintiendo, pero solo quer¨ªa una respuesta¡±.
¡°No creemos que nadie se quede dinero; pero queremos saber c¨®mo se justifica el gasto¡±
¡°Ahora tengo tiempo y ganas¡±, se justifica Cases ante quienes le recuerdan que durante la presidencia de Laporta nunca estuvo interesado en saber demasiado. ¡°Laporta tom¨® un club en la bancarrota deportiva¡±, responde. Cases ha elaborado la teor¨ªa de las casualidades, por la que pretende demostrar que personas vinculadas a la actual directiva, de forma directa o indirecta, colaboraron con Robert Blanch, presidente de la Asociaci¨®n en Defensa de los Derechos del Socio y entre cuyas actuaciones est¨¢ la de apoyar la demanda conocida como la de los avales impulsada por Vicen? Pla contra algunos directivos de Laporta. El grupo de Cases ha denunciado tambi¨¦n las conexiones del presidente con la empresa Viagogo, que revende entradas en el Camp Nou, y otras (Ailanto, ISL, BSM) que vulnerar¨ªan el c¨®digo ¨¦tico creado por el propio Rosell para su directiva. Tambi¨¦n es corresponsable de la pancarta ResPEPct, que mostraba un dibujo de Pinotxell, ¡ªun Rosell con nariz de Pinocho¡ª que el club oblig¨® a retirar del Camp Nou.
Reconoce Cases que se ha reunido varias veces con portavoces del club y se muestra tan agradecido a Joan Trayter, catedr¨¢tico de derecho y miembro de la comisi¨®n de reforma de los estatutos, como descorazonado por el trato recibido de otros. ¡°La prepotencia es mala consejera y las amenazas se pueden volver en contra¡±, afirma en referencia a Toni Freixa, portavoz del club. Cases lamenta que el club se vea envuelto en una desagradable situaci¨®n jur¨ªdica: ¡°La querella es a Rosell, no al Bar?a. En cualquier caso, no pensamos que nadie se haya quedado dinero; solo queremos saber c¨®mo justifica los gastos, porque no est¨¢ claro¡±.
Amenazado de ser demandado por da?os y perjuicios, Cases asegura tener la conciencia ¡°muy tranquila¡± y de vez en cuando se acerca al Restaurante Tall¨®n, en Olesa de Montserrat, para juntarse con los amigos, hablar del Bar?a y re¨ªrse de los que aseguran que poseen pruebas de que Florentino P¨¦rez est¨¢ detr¨¢s suyo, a la espera de que el juez Ruz decida qu¨¦ acontece.
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