Un estadio desnudo

El refer¨¦ndum sobre la reforma del Camp Nou est¨¢ a la vista. La consulta ser¨¢ el d¨ªa 5 o 6 de abril, en funci¨®n de cu¨¢ndo juegue el Barcelona. Y el proyecto cuenta no solo con una remodelaci¨®n del aspecto interno y externo del campo, sino tambi¨¦n con un aumento de la capacidad: pasar¨ªa de 99.786 a unos 105.000 asientos. Sin embargo, el feudo azulgrana se vac¨ªa cita tras cita y descubre en cada comparecencia de los muchachos de Gerardo Martino m¨¢s asientos vac¨ªos. El equipo, que perdi¨® el ¨²ltimo fin de semana ante el Valencia el liderato de la Liga despu¨¦s de 59 jornadas consecutivas, jugar¨¢ los octavos de la final de la Champions contra el Manchester City (el pr¨®ximo d¨ªa 18, la ida, y el 12 de marzo, el partido de vuelta) y deber¨¢ confirmar su clasificaci¨®n para la final de la Copa de Rey el mi¨¦rcoles que viene en Anoeta. Pero algo pasa en el Camp Nou que sus gradas lucen hu¨¦rfanas de calor. Parecen haberse olvidado de arropar a su equipo. Ayer, en la ida de unas semifinales de Copa, visitaron el estadio solo 38.505, menos de la mitad de su capacidad.

¡°Los 25.000 que han venido son unos valientes¡±, hab¨ªa justificado Martino el mi¨¦rcoles pasado, en otro partido de Copa, frente al Levante, la peor entrada del curso. La noche, fr¨ªa y lluviosa, invitaba a no arrimarse al campo. Sin embargo, desde el vestuario echan de menos el calor de la afici¨®n. ¡°Me ha sorprendido ver la grada as¨ª de vac¨ªa siendo una semifinal de Copa, no me lo esperaba. Es posible que los horarios no acompa?en. La gente ma?ana trabaja y no es hora para los ni?os, los m¨ªos tampoco han venido¡±, apuntaba ayer Pinto.

La directiva azulgrana minimiza el asunto. El vicepresidente del ¨¢rea social, Jordi Cardoner, ha asegurado que el club no est¨¢ preocupado por la baja asistencia que se registra ¨²ltimamente.

En la temporada actual la asistencia media al Camp Nou es de 64.600 espectadores, 6.000 menos si se comparan los datos del curso pasado a estas alturas. Pero la estad¨ªstica va en descenso. En los primeros 13 partidos del Barcelona en su estadio hubo una asistencia media de 72.130 aficionados. Sin embargo, en los ¨²ltimos cinco se acercaron a Les Corts una media de 48.450 (23.680 menos). Si se observan los datos de enero de la temporada 2012-2013 la asistencia media ha disminuido en 13.000 espectadores. As¨ª que el invierno no ayuda a que la gente vaya al campo, pero tampoco parece hacerlo el equipo.

Resulta dif¨ªcil diagnosticar cu¨¢les son los motivos de la desafecci¨®n de la afici¨®n cul¨¦. Si el conjunto de Martino no emociona o se hace previsible su juego. Pero las gradas lo acusan. La llegada de Neymar invitaba a la ilusi¨®n, pero sin el brasile?o en el c¨¦sped y con una faceta menos goleadora de Messi, los atractivos para el seguidor blaugrana disminuyen. Tampoco ayuda que el campo est¨¦, en su mayor¨ªa, abonado: algunos no van al estadio y no liberan los asientos y otros se marchan antes de tiempo. Todo un sentido de propiedad.

Uno de los factores que podr¨ªa alejar a la gente del Camp Nou es la variabilidad de los horarios. No hay uno fijo (como en la Champions, siempre a las 20.45) y los aficionados no pueden organizarse con anticipaci¨®n. En esta temporada el Barcelona ha jugado seis partidos a las 10 de la noche o m¨¢s tarde y la media de aficionados fue de 44.441. Pero esta vez el fr¨ªo no pelaba y la Real pod¨ªa invitar a una mejor respuesta de la afici¨®n. La crisis econ¨®mica tampoco ayuda: las entradas oscilaban entre los 24 y los 169 euros, y los clubes, en su mayor¨ªa, como no ha hecho el Bar?a en este caso, no ponderan que la gente se acerque al campo. Manda la televisi¨®n. Y hay m¨¢s respeto por el telespectador que por el aficionado.

El Camp Nou nunca fue un campo especialmente caliente, pero la afici¨®n azulgrana se anima en las grandes citas: con la visita del Madrid o en jornadas de Champions. Ahora, con poco en disputa, la hinchada se anima para cantar alg¨²n gol, o ineludiblemente, para gritar en el minuto 17.14 por la independencia de Catalu?a. Ni la ruidosa salida del palco y de la presidencia de Sandro Rosell encendi¨® a la afici¨®n. No se han escuchado gritos en contra o a favor de este. El Camp Nou se queda desnudo.

¡°Los que no acuden al estadio no son tan cul¨¦s como dicen¡±, solt¨® Dani Alves, ya duchado, despu¨¦s de leer una pancarta en el Gol Sur dedicada a ¨¦l: ¡°Alves, tenemos la soluci¨®n: grada de animaci¨®n¡±.