Lamar no cambiar¨¢
Odom siempre ha sido inconsciente, inestable e impredecible

Lamar Odom ha llegado a Espa?a. Ha firmado un contrato con el Laboral Kutxa (antes Tau Cer¨¢mica) y posiblemente har¨¢ su debut el s¨¢bado ante el Valladolid. La pregunta es: ?funcionar¨¢ la cosa?
Cuando la mayor¨ªa de la gente piensa en Lamar Odom, piensa en su per¨ªodo en los Lakers de Los ?ngeles, en su matrimonio con la m¨¢s rellenita de las Kardashian, en el v¨ªdeo en el que aparece cantando una canci¨®n de rap en el ba?o de un hotel probablemente colocado, y sin camisa. Es f¨¢cil contemplar el comportamiento impredecible y dudoso de Odom como una consecuencia de la fama; pensar en Lamar Odom como una moraleja para los que persiguen esa fama. Pero Lamar Odom se convirti¨® en Lamar Odom mucho antes de encontrarse con las Kardashian.
Si Odom funciona ser¨¢ porque Laboral Kutxa lo ha cogido por el lado bueno de la onda sinusoidal que sigue la pista de su estado emocional
Despu¨¦s de ir a tres institutos diferentes, Odom eligi¨® la Universidad de Nevada-Las Vegas, cuyo programa de baloncesto se encontraba en medio de una tentativa por reconquistar la cumbre que representaron los mejores d¨ªas de Larry Johnson y Stacey Augmon. Sin embargo, antes de que pudiese jugar ni siquiera un partido en la UNLV, la carrera de Odom sufri¨® un duro tropiezo: se dio por sentado que la puntuaci¨®n de su examen de ingreso hab¨ªa sido falseada, y fue citado por haber solicitado una prostituta. Nunca jug¨® en la UNVL sino que, por el contrario, fue traspasado a la Universidad de Long Island, donde permaneci¨® un a?o antes de declararse candidato al draft de la NBA.
A continuaci¨®n vinieron los Clippers de Los ?ngeles; luego, los Heat de Miami; luego, los Lakers; luego, los Mavericks de Dallas; luego, otra vez los Clippers. A lo largo de todo esto, Odom fue una semiestrella inestable, lo bastante buena como para ser la tercera opci¨®n de un equipo, pero nunca lo bastante fiable para nada m¨¢s. Y ahora, Espa?a.
Lamar Odom podr¨ªa encajar de maravilla en Vitoria. Es posible que haya dedicado los dos ¨²ltimos meses a quedar limpio, tanto de mente como de cuerpo, y que haya estado esperando como un le¨®n enjaulado, listo para hacer de la NBA su ?u herido. Cabe la posibilidad de que siempre haya sentido debilidad por la cultura vasca y que le emocione la perspectiva de los pintxos despu¨¦s del partido; que no quepa en s¨ª de alegr¨ªa porque dentro de poco estar¨¢ a menos de una hora del Guggenheim de Bilbao. Puede ser que alguien cercano a ¨¦l le haya avisado de que la ACB no es una Liga menor, y que grandes jugadores han fracasado antes all¨ª.
Pero yo no apostar¨ªa por ello.
Se dice que uno de los mayores errores que cometen las mujeres que est¨¢n pensando en casarse es creer que sus hombres cambiar¨¢n. Por lo general, los hombres no cambian. Y tampoco los jugadores de baloncesto.
Odom siempre ha sido inconsciente, inestable e impredecible. Es posible que tenga suficiente talento como para lograr que su estancia en Vitoria sea provechosa para ambas partes, pero si Lamar Odom funciona con Laboral Kutxa ser¨¢ porque Laboral Kutxa lo ha cogido por el lado bueno de la onda sinusoidal que sigue la pista de su estado emocional.
No porque Lamar Odom se haya estabilizado.
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