Vargas impulsa al Valencia

Adem¨¢s de veloz, el chileno Eduardo Vargas es un especialista en el salto y el remate de cabeza pese a medir 1,75 metros, una amenaza para Espa?a en la primera fase del pr¨®ximo Mundial de Brasil. El atacante cedido por el N¨¢poles revolucion¨® al Valencia en la ¨²ltima hora, desatado el conjunto de Pizzi tambi¨¦n por la fulgurante entrada de Feghouli. Lanzados por la consistencia de Keita (no pasan por ¨¦l los a?os, 34) y por la clase de Parejo, el cuadro de Pizzi sentenci¨® la eliminatoria ante un Dinamo sin recursos. Fulgen los fichajes de invierno (Vargas y Keita, sobre todo) y crece el cuadro de Pizzi, que control¨® durante una hora y remach¨® en la ¨²ltima media, seg¨²n las previsiones del entrenador argentino. A falta de la vuelta en Mestalla de la pr¨®xima semana, y ante la escasa oposici¨®n este jueves del Dinamo, ya se atisba un cruce con el Lazio en octavos de final.

En un paisaje fantasmal, en el estadio neutro de Nicosia ¡ªlas gradas blancas vac¨ªas salvo unos pocos seguidores y familiares de los futbolistas¡ª, se escuchaban las voces de los jugadores, como si se tratase de un entrenamiento, dominado con facilidad por el centro del campo del Valencia, aunque otra vez sin llegar afilado al ¨¢rea contraria, como le sucedi¨® hace cuatro d¨ªas en la primera parte frente al Sevilla en el S¨¢nchez Pizju¨¢n. Pizzi ha logrado que el equipo se suelte a jugar fluido en la medular, sostenido esta vez por Keita y por Javi Fuego, armonizados por el pase raso y preciso de Parejo, en plena madurez profesional. Le acompa?¨® bien M¨ªchel en el control en este primer periodo, pero se echaron en falta los agitadores, jugadores con desborde para abastecer al desconectado Paco Alc¨¢cer.

El Dinamo apenas mostr¨® los dientes, lastrado por casi dos mes y medio sin competir (la abstinencia del invierno ucranio) y atormentado por las dram¨¢ticas noticias procedentes de Kiev, decenas de muertos en un pa¨ªs alzado contra el r¨¦gimen represor de Yanuk¨®vich.

El aire de choque amistoso se prolong¨® en la segunda parte cuando, al lesionarse de un tir¨®n el meta Shovkovskiy, su sustituto, Ribka, se lo tom¨® con calma para entrar, casi cinco minutos. El segundo tiempo, muy interrumpido, tom¨® un rumbo anodino del que trat¨® de escapar Pizzi d¨¢ndole entrada a Eduardo Vargas por Alc¨¢cer. El chileno ocup¨® la media punta y adelant¨® a Jonas. El centro desde la izquierda del brasile?o lo cabece¨® potente Vargas, pero respondi¨® en la estirada muy ¨¢gil Ribka. El Valencia necesitaba desequilibrar y la segunda apuesta de Pizzi fue Feghouli, mucho m¨¢s profundo que M¨ªchel, sabiendo que era una oportunidad para resolver la eliminatoria.

El Valencia bombarde¨® a cabezazos al Dinamo en el ¨²ltimo cuarto. Magn¨ªfico Vargas atacando al primer palo el centro de c¨®rner de Parejo; y, a continuaci¨®n, rematando tambi¨¦n la testa Keita, recordando su poder¨ªo a¨¦reo de los viejos tiempos. En ambos casos se agigant¨® Ribka, un cat¨¢logo de reflejos hasta que la insistencia de Vargas acab¨® con la oposici¨®n del portero. Otra vez al primer poste, otra vez un env¨ªo desde la derecha de Parejo. La exhibici¨®n cabeceadora de Vargas continu¨® con un remate al hierro tras un precioso centro desde la izquierda de Bernat, lanzada la jugada por un cada vez m¨¢s s¨®lido Keita. Tras un centro raso de Jo?o Pereira, el gol en el descuento de Feghouli, favorecido por un rebote de la defensa, confirm¨® todas las sensaciones: Vargas y el volante argelino hab¨ªan reactivado al Valencia. Tras vivir en penumbra durante la primera parte de la temporada, Pizzi ha liberado al equipo para que disfrute en el tramo final del campeonato.