Javier Fern¨¢ndez luce su talento

Los patinadores se entrenan para repetir como si fueran robots sin dudas el mismo programa, los mismos saltos y pasos, bajo las mismas notas musicales. Es un deporte de repetici¨®n. Pero como son humanos, cuando llega la competici¨®n, la adrenalina y los nervios, muchos se ven obligados a cambiar sobre la marcha porque un salto o una combinaci¨®n no salen seg¨²n lo previsto y ah¨ª se descubre qui¨¦n tiene verdadero talento para otro arte de este deporte, el de la improvisaci¨®n. Lo vivi¨® de la forma m¨¢s amarga el espa?ol Javier Fern¨¢ndez en los Juegos de Sochi hace un mes (cuarto) y se ha desquitado este viernes en Saitama (Jap¨®n), donde ha repetido bronce mundial y, esta vez s¨ª, con esos tres cu¨¢druples que han hecho famoso su programa.

Como Fern¨¢ndez hab¨ªa acabado el primer d¨ªa de competici¨®n segundo, con la nota m¨¢s alta dada a un europeo en la historia, el resultado puede parecer decepcionante. Pero cuando el espa?ol pis¨® el hielo ya sab¨ªa que el asunto estaba complicado, el oro casi imposible. Machida y Hanyu, los dos mejores japoneses, no hab¨ªan cometido ning¨²n fallo importante, solo peque?as imprecisiones. Y la nota de Hanyu, el campe¨®n ol¨ªmpico, el compa?ero de entrenamientos de Fern¨¢ndez en Toronto, el hombre con quien divide las atenciones del entrenador Brian Orser, esos 282,59 puntos totales, parec¨ªa dif¨ªcil de alcanzar.

Tambi¨¦n sab¨ªa que el podio estaba casi asegurado porque el checo Verner se hab¨ªa desmoronado desde el primer salto y el chino Yan se hab¨ªa llevado un golpetazo al intentar recuperar el triple que se hab¨ªa comido en los primeros compases y tambi¨¦n estaba fuera de juego. Tal vez por eso, antes de competir Fern¨¢ndez parec¨ªa tranquilo, si hab¨ªa nervios no se reflejaban en su cara ni en los movimientos de su cuerpo. Empez¨® su programa confiado, clavando el primer cu¨¢druple y asegurando la primera combinaci¨®n de saltos. Seductor en la segunda parte, gust¨¢ndose a s¨ª mismo en esos pasos que los patinadores utilizan para tomar aire, para recuperar el aliento de cara al ¨²ltimo tramo, y en los que el espa?ol adem¨¢s aprovecha para seducir a p¨²blico y jueces, para conectar, solo tuvo dos dudas: se precipit¨® al enfrentar un triple que se qued¨® en una pirueta simple y que combin¨® con un doble, lo que le rest¨® alrededor de seis puntos, y se desequilibr¨® ligeramente en la ¨²ltima combinaci¨®n justo cuando el programa volv¨ªa a coger ritmo. Nada tr¨¢gico. Nada que ver con lo sucedido en Sochi cuando ni ¨¦l mismo se dio cuenta de que hab¨ªa perdido la medalla por improvisar si acordarse del reglamento.

Fern¨¢ndez se despidi¨® contento, como diciendo: ¡°Deber cumplido¡±. Hab¨ªa logrado introducir los tres cu¨¢druples que convierten su ejercicio en uno de los m¨¢s dif¨ªciles del mundo, algo que solo ¨¦l ha sido capaz de hacer en Saitama. Los jueces se lo recompensaron con 179,51 puntos, que sumados a la nota del programa corto, daban un total de 275,93. Otro r¨¦cord europeo. Mejor marca del a?o para el espa?ol. Pero por debajo de Hanyu y Machida. Bronce mundial otra vez, cerca de la plata del japon¨¦s (282,26) y muy lejos del cuarto, el ruso Kovtun (247,37).

Est¨¢ otra vez entre los mejores. Si es que la decepci¨®n ol¨ªmpica ¨Cesos 1,18 puntos que le separaron de la medalla y de hacer otra vez historia para el deporte espa?ol- le generaron alg¨²n tipo de inseguridad, esta ha sido superada. Puede que Hanyu, con sus programas el¨¦ctricos e intensos, con la juventud de esos 19 a?os, con su capacidad de improvisaci¨®n, haya sido mejor en el Mundial, como lo fue en Sochi, pero no est¨¢ en otra galaxia. Fern¨¢ndez, que tiene tres a?os m¨¢s y ya fue bronce mundial el a?o pasado, que es doble campe¨®n europeo, tambi¨¦n est¨¢ ah¨ª. Entre los mejores patinadores del mundo.