La venganza del Piojo Herrera

Todo en la selecci¨®n mexicana parece pasar por el filtro de su controvertido entrenador, Miguel Piojo Herrera, protagonista del Tri desde que se hizo cargo del equipo antes de eliminar en la repesca a Nueva Zelanda camino del Mundial de Brasil 2014. Alimentado por un viejo resentimiento de su ¨¦poca de jugador del Atlante: el entonces seleccionador, Mej¨ªa Bar¨®n, lo excluy¨® del Mundial de Estados Unidos 94 por haber acabado a golpes con un espectador del Le¨®n; recientemente, Herrera tach¨® a Mej¨ªa Bar¨®n de ¡°desviado sexual¡± en alusi¨®n a una supuesta homosexualidad. En 1993, vistiendo la camiseta del Tri, Piojo entr¨® en una pelea contra jugadores del Atl¨¦tico de Madrid en un partido amistoso. Ya como entrenador, triunf¨® en el Atlante y en el Am¨¦rica, sin olvidar su lado pendenciero, antes de recalar en la selecci¨®n.

All¨ª se ha encontrado con la tensi¨®n latente entre los jugadores que juegan en su pa¨ªs y los que act¨²an en el extranjero, mirados con recelo desde tiempo inmemorial. Uno de ellos, Carlos Vela, el delantero zurdo de la Real Sociedad, se ha convertido a su pesar en una de las personas m¨¢s odiadas del pa¨ªs por su renuncia a jugar con el Tri tras distintos enfrentamientos con los dirigentes de la federaci¨®n. Otros, como Giovani (Villarreal) o Chicharito (Manchester United), s¨ª acudir¨¢n a la llamada de Herrera aunque sepan que el favorito de la hinchada sea Peralta, el goleador del Santos mexicano. El Piojo es un l¨ªder ¡°carism¨¢tico¡±, seg¨²n fuentes de la federaci¨®n, capaz de entrar en discusi¨®n futbol¨ªstica en Twitter con miles de seguidores. O de bromear sobre su intento de pescar un pez vela en alusi¨®n a la negativa a alistarse del extremo realista. El Piojo, por fin, va a un Mundial y tiene ganas de revancha.