¡°El dinero se ha acabado¡±
Komissarova, apoyada por Putin tras quedar paral¨ªtica en los Juegos, intenta recuperarse en Marbella sin ayuda del Gobierno ruso
Vladimir Putin se present¨® en el hospital, seguido por una cohorte de fot¨®grafos. Si los Juegos son tambi¨¦n una guerra de s¨ªmbolos, ah¨ª ten¨ªa el presidente un icono de la Rusia que cae y se levanta: sobre la cama de un hospital de Sochi, donde en febrero se celebr¨® la cita ol¨ªmpica de invierno, yac¨ªa Maria Komissarova, de 23 a?os, paralizada de cintura para abajo tras un accidente en un entrenamiento de esqu¨ª acrob¨¢tico. ¡°Se har¨¢ todo lo posible¡±, dijo Putin. Tres meses despu¨¦s, Komissarova pide dinero a quien pueda d¨¢rselo, desde sus seguidores a ONGs. Est¨¢ en Marbella. Paga unos 1.500 euros diarios en una cl¨ªnica regentada por un doctor ruso. Tras sufrir una dislocaci¨®n y fractura de la decimosegunda v¨¦rtebra que afect¨® a la m¨¦dula espinal, le hab¨ªan desahuciado. Aqu¨ª le han dicho que tiene un 90% de posibilidades de volver a andar. Las autoridades rusas ya no est¨¢n al costado de su cama. Queda su sudor, el dolor de una terapia infernal, y el dinero que ponga quien quiera para seguir el tratamiento.
Aqu¨ª me entreno seis horas al d¨ªa, trabajo duro siete d¨ªas a la semana. En Alemania [donde se oper¨®] solo me ense?aban a vivir en una silla de ruedas y a prepararme para esa nueva vida Maria Komissarova
¡°El dinero de la Federaci¨®n se ha acabado, ya solo me ayudan con cuestiones dom¨¦sticas¡±, explica desde Marbella la esquiadora, que calcula que tendr¨¢ que pagar unos 765.000 d¨®lares para intentar recuperarse. ¡°Hasta ahora, pagaron por la operaci¨®n a la que me somet¨ª en Alemania y por los dos meses que pas¨¦ haciendo rehabilitaci¨®n all¨ª¡±, contin¨²a Komissarova, que en su p¨¢gina web ofrece distintas opciones para hacerle llegar fondos. ¡°He venido a Espa?a siguiendo el consejo de un amigo que, tras pasar cinco a?os en una silla de ruedas y probar diferentes m¨¦todos por todo el mundo, vino aqu¨ª y pudo notar los efectos (del tratamiento)¡±, a?ade la deportista, que tras el accidente y una operaci¨®n a vida o muerte dej¨® de sentir el cuerpo del ombligo para abajo. ¡°Aqu¨ª me entreno seis horas al d¨ªa, trabajo duro siete d¨ªas a la semana. En Alemania (donde se oper¨®) solo me ense?aban a vivir en una silla de ruedas y a prepararme para esa nueva vida¡±.
¡°La Federaci¨®n recogi¨® fondos para su tratamiento en Alemania (300.000 euros)¡±, explica el portavoz Michael Verzhba. ¡°Tambi¨¦n le solicit¨® al gobernador de San Petersburgo que le asignara un c¨®modo apartamento, y ya se le ha encontrado. La Federaci¨®n ha iniciado el proceso para otorgarle una subvenci¨®n del fondo de apoyo a los deportistas ol¨ªmpicos rusos, que recibir¨¢ mensualmente durante 10 a?os, adem¨¢s de la pensi¨®n social que le corresponde seg¨²n la ley, y del seguro que recibi¨® como miembro del equipo ol¨ªmpico¡±, subraya. ¡°Se le compr¨® una silla para desplazarse y mucho m¨¢s (¡) El tratamiento, m¨¢s la estancia de los acompa?antes en Alemania, m¨¢s los viajes de los especialistas, m¨¢s otros gastos¡Todo esto alcanza una suma de cerca de 400.000 euros¡±.
La Agencia Federal M¨¦dico-Biol¨®gica rusa, explican en la federaci¨®n, ofreci¨® a la esquiadora un plan para recuperarse en Rusia que habr¨ªa sido gratis. ¡°Los neurocirujanos m¨¢s famosos y respetados en el mundo no se atreven a asumir un caso tan complejo¡±, dicen. En Espa?a, sin embargo, Komissarova no escuch¨® eso. ¡°El paciente con un trauma de esta naturaleza debe permanecer en un proceso de rehabilitaci¨®n activa al menos durante 40 horas a la semana¡±, explican en la cl¨ªnica marbell¨ª. ¡°La operaci¨®n que le practicaron a Maria en Alemania fue impecable. Precisamente por la intervenci¨®n tan perfecta es posible aplicar las nuevas t¨¦cnicas de rehabilitaci¨®n del Dr. Blum y darle un porcentaje tan alto de probabilidades de recuperar por completo sus funciones y habilidades motoras. Por ahora no hay quejas respecto al optimismo e intencionalidad de Maria, as¨ª que el proceso sigue¡¡± El proceso, claro, sigue mientras haya dinero. Komissarova lucha por levantarse de la silla de ruedas.
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