¡°?Amarilla a Cesc por tirarse!¡±
Espa?a empieza a trabajar en Curitiba con una charla del ¨¢rbitro Vergara, en contraste con la tensi¨®n que gener¨® Collina en 2012
De un tiempo a esta parte la tradici¨®n dice que en las fases finales de los campeonatos del Mundo y de las Eurocopas empieza con la visita del ¨¢rbitro. Y as¨ª sucedi¨® ayer, cuando el chileno H¨¦ctor Vergara ¡ª14 partidos mundialistas repartidos entre Jap¨®n-Corea 2002, Alemania 2006 y Sud¨¢frica 2010¡ª se person¨® en las instalaciones de Club Atl¨¦tico Paranaense, conocidas popularmente como Caj¨², donde Espa?a ha instalado su centro de trabajo en el Mundial.
A diferencia de lo que ocurri¨® con la visita de Pier Luigi Collina a los jugadores en Gnewino (Polonia) antes del inicio de la Eurocopa 2012, cuando la relaci¨®n entre los jugadores del Barcelona y del Madrid era el¨¦ctrica y el italiano subi¨® el voltaje utilizando de ejemplo im¨¢genes de la expulsi¨®n de Pepe por una entrada a Alves durante la semifinal de la Champions de aquel a?o, ayer la reuni¨®n discurri¨® de manera muy diferente. M¨¢s relajada.
De entrada, el chileno reparti¨® entre los jugadores tarjetas rojas y amarillas, que los futbolistas deb¨ªan usar a su criterio en funci¨®n de las im¨¢genes que les iba poniendo. ¡°?Es penalti?¡±, pregunt¨® en una jugada en la que se ve¨ªa a Cesc F¨¤bregas durante un partido del Barcelona barrido claramente por un defensa dentro del ¨¢rea que desat¨® las primeras risas: ¡°?Amarilla a Cesc por simulaci¨®n!¡±, se escuch¨® en la sala, ante las carcajadas generales. Eso dio pie al ¨¢rbitro para hacer hincapi¨¦ con lo estrictos que ser¨¢n con quienes traten de enga?ar al colegiado de turno durante los partidos.
Los jugadores se instalaron en habitaciones austeras pero funcionales
Igualmente advirti¨® que no se tolerar¨¢n protestas. Igual de estrictos ser¨¢n con los insultos y la alevos¨ªa en las protestas como con los aspavientos exagerados ¡°que enciendan al p¨²blico¡±, avis¨® Vergara. El excolegiado us¨® a Piqu¨¦ para tratar de mantener el buen ambiente en la reuni¨®n cuando explic¨® que en un partido los jugadores le rodearon dentro del ¨¢rea: ¡°Piqu¨¦, Piqu¨¦, me gritaban. Y yo le buscaba a usted, pero no estaba. Luego ca¨ª: su apellido coincide con las siglas Penalti Kick [lanzamiento del penalti]!¡±. Acto seguido, en otra jugada que trataba de valorar la simulaci¨®n de un jugador le pregunto ¡°?Es penalti, Piqu¨¦?¡±. A lo que el grupo core¨®: ¡°Pi-qu¨¦, pi-qu¨¦¡±.
En general, el ambiente no puede ser mejor en el grupo, nada que ver con el 2012. Tampoco pod¨ªa haber elegido mejor la federaci¨®n el lugar de trabajo, como se confirm¨® por la tarde, tras un d¨ªa de lluvias, cuando la apareci¨® el bal¨®n en la primera toma de contacto con los campos de entrenamiento de la ciudad deportiva del Atl¨¦tico Paranaense, el que oficialmente llevan por nombre el de Alfredo Gottardi, pero que todos conocen como el centro de Caj¨², que hasta la reforma de la Granja Comari, en Teres¨®polis, sede de la federaci¨®n brasile?a, pasaba por ser, junto a las del CA Cruzeiro, las mejores instalaciones del pa¨ªs. Est¨¢n situadas a 15 kil¨®metros del centro de la capital del estado de Paran¨¢, donde ayer murieron tres personas v¨ªctimas de los aguaceros torrenciales ca¨ªdos en los ¨²ltimos d¨ªas. El centro donde trabajar¨¢ Espa?a se descubri¨® como un excelente lugar, al que solo le falta por instalar unas mesas de ping pong y algunas m¨¢quinas de v¨ªdeo juego, aunque la tendencia de los jugadores para matar el rato cada vez pasa m¨¢s por las partidas de cartas y de parch¨ªs.
Los jugadores, que la noche del domingo se instalaron en las austeras pero funcionales y c¨®modas habitaciones del centro de formaci¨®n, comprobaron el buen drenaje de los campos, acostumbrados a copiosas lluvias durante todo el a?o. No es casual que a Curitiba, gris fr¨ªa y lluviosa, sea conocida como el Londres brasile?o.
El centro de trabajo del barrio de Umbar¨¢ acoger¨¢ el trabajo de la selecci¨®n al menos durante la primera fase, a excepci¨®n de los d¨ªas previos a los partidos contra Holanda, cuando se trasladar¨¢n a Belo Horizonte. Los internacionales de Del Bosque dedicaron tambi¨¦n una buena parte de la ma?ana realizando tr¨¢mites fotogr¨¢ficos para las acreditaciones. En el cuartel general de Curitiba, La Roja ya se huele a Mundial.
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