N¨²meros de impresi¨®n
Sagan, que cede ante Trentin, ha sido segundo en tres etapas, cuarto en otras tres y quinto en la que peor resultado ha tenido
Tras el golpe de ri?¨®n de Sagan en la l¨ªnea de meta de Nancy, el espectador apasionado ¡ªyo uno de ellos¡ª ha resoplado con alivio: ya era hora chaval, te lo has merecido. Incluso su rival ¡ªen este caso verdugo¡ª ha parecido pensar lo mismo, pues en apenas unos segundos le estaba felicitando al eslovaco por su victoria cuando a¨²n segu¨ªan lanzados con la velocidad del espr¨ªn.
Pero no, la fotofinish ha aclarado que la percepci¨®n hab¨ªa sido err¨®nea por la progresi¨®n de Sagan en los ¨²ltimos 20 metros. El primero en cruzar la meta hab¨ªa sido Trentin, el verdugo que no se cre¨ªa ganador y que asumi¨® con deportividad su papel de perdedor. La cara de Sagan en la ceremonia del podio indicaba que esta derrota le hab¨ªa dolido especialmente, cosa nada extra?a si analizamos sus resultados en lo que llevamos de carrera. Sagan ha sido segundo en tres etapas, cuarto en otras tres y quinto en la que peor resultado ha conseguido. Sus verdugos han sido dos, Kittel y Trentin: Kittel con superioridad en ambos casos, y Trentin que de manera sorprendente aguant¨® la presi¨®n de Sagan en un espr¨ªn que lanz¨® desde muy lejos. Incre¨ªbles n¨²meros en etapas tan diferentes.
Trentin fue el verdugo que no se cre¨ªa ganador y que asumi¨® con deportividad su papel de perdedor
Los puntos cosechados por Sagan gracias a estos resultados le hacen portar de manera indiscutible el maillot verde. Adem¨¢s est¨¢ situado en tercera posici¨®n en la general, pero la oportunidad de vestir el maillot de l¨ªder ya se le ha escapado definitivamente; primero por los dos segundos que consigui¨® Nibali de margen en Sheffield, y despu¨¦s por el tiempo perdido con respecto al italiano en Arenberg.
Y no s¨®lo es cuesti¨®n de resultados, sino de actitud. En las dos etapas ideales para sus facultades ¡ªla segunda y la de este viernes¡ª, se mostr¨® hiperactivo en las cotas finales y se movi¨® con maestr¨ªa. Pero el Astana y Nibali un d¨ªa, y la sorpresa de Trentin otro, han frustrado hasta ahora sus tentativas. Y es que el peso de ser el gran favorito es un lastre dif¨ªcil de llevar.
Y hablando de protagonistas, no podemos olvidarnos de otro hombre del que no se est¨¢ hablando tanto pero que tambi¨¦n est¨¢ protagonizando una carrera espectacular, tambi¨¦n de manera hiperactiva y con una actitud multiherramienta. No es otro que Kwiatkowski. El polaco (m¨¢s f¨¢cil referirse a ¨¦l de esta manera debido a su impronunciable apellido) lanz¨® a Cavendish el primer d¨ªa. Fue tercero el segundo, el d¨ªa de Nibali. El d¨ªa del pav¨¦ fue s¨¦ptimo ¡ªsegundo si tenemos en cuenta los hombres de la general¡ª a tan s¨®lo 48 segundos de Nibali. Anteayer atac¨® en el ¨²ltimo kil¨®metro y abri¨® un hueco que por un momento le hizo so?ar. Y este viernes lanz¨® con fuerza a su compa?ero Trentin y hay que adjudicarle una gran parte del porcentaje de la victoria del italiano. Por si esto fuera poco, estamos hablando del cuarto clasificado en la general, del l¨ªder del maillot blanco, y de un corredor que, por sus caracter¨ªsticas, est¨¢ dotado para mantenerse en esas posiciones hasta Par¨ªs. Y quiz¨¢ para algo m¨¢s.
Para terminar, otro protagonista que tambi¨¦n lo est¨¢ haciendo bien y del que se est¨¢ hablando tambi¨¦n poco. Aunque esta vez protagonista para su desgracia. Talansky se cay¨® por desviar la atenci¨®n unas mil¨¦simas de segundo en un punto de m¨¢xima tensi¨®n. Un error de juventud que espero que no le pase factura. Un error que no cometer¨¢ dentro de 9 o 10 a?os, si es que entonces sigue por aqu¨ª dando guerra.
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