Alemania, revisi¨®n y evoluci¨®n
LO BUENO
La intenci¨®n. Tuvo m¨¢s que ver con el triunfo de Espa?a en el ¨²ltimo Mundial que con el lugar en que se disput¨® el campeonato, puesto que Brasil no se aplic¨® el cuento. ?Cu¨¢l es el cuento? Ser protagonista, no despreciar la tenencia de la pelota, provocar y no esperar el error del rival.
La fase previa fue atractiva por ese motivo y a partir de octavos el campeonato se hizo algo m¨¢s especulativo porque la fuerza del resultado redujo el sentido del riesgo de los equipos contendientes.
Alemania es el gran ejemplo. La selecci¨®n de Joachim L?w es el resultado de un pa¨ªs que decidi¨® cambiar el proceso formativo de su f¨²tbol hace 10 a?os. Lo que hizo es muy valioso porque los resultados de Alemania siempre han sido buenos. Revisar el proyecto sin sentirse empujado por malos resultados y que todos los clubes se sientan comprometidos con la revoluci¨®n tiene mucho m¨¦rito.
LO MALO
La pelota aument¨® su protagonismo, pero empez¨® a notarse la influencia de una ense?anza cada vez m¨¢s acad¨¦mica.
Los jugadores han mejorado mucho el control y el pase, que es la base del buen juego colectivo, pero cada d¨ªa vemos menos regateadores. En el pa¨ªs de Garrincha solo Robben por velocidad y James Rodr¨ªguez por talento puro eliminaban rivales y le abr¨ªan un panorama nuevo a la jugada.
Tiene que ver tambi¨¦n con la alergia al riesgo: nadie quiere apostar la pelota driblando a un rival porque la p¨¦rdida se paga cara. Pero hay lugares para intentarlo sin exponerse al peligro. Sin este tipo de jugadores el f¨²tbol se hace muy rutinario. Por eso admiramos tanto a Messi y esperamos tanto de jugadores como Hazard.
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