Peleas de colegio

En un ambiente de western crepuscular, los viejos pistoleros, Valverde y Purito, por ejemplo, aferrado a sus lunares, cojeando como John Wayne o Gary Cooper, jadeando, pero defendiendo el fuerte de una derrota segura, los j¨®venes montan sus batallitas, que a los viejos pueden parecerles peleas de patio de colegio. Y a la afici¨®n, que busca el conflicto que no le ofrece Nibali, que navega solo (y est¨¢ harto de que le pregunten qu¨¦ ocurrir¨ªa si en el Tour siguiera Contador), le encanta.

Pinot, el m¨¢s fuerte de los j¨®venes, tiene miedo a bajar, lo ha dicho p¨²blicamente y en invierno se apunt¨® a un curso de carreras de coches sobre hielo para aprender a tomar las curvas sin quedarse cuadrado en la bicicleta, a tumbarse, a trazar. Los de Bardet, su rival en los corazones locales, los Ag2r, le quisieron examinar de sus progresos, y bajando el Izoard, aceleraron a tope, con Peraud, hombre que llega del BTT y baja como nadie, de piloto. Pinot aprob¨® por los pelos. Se qued¨® cortado, como tambi¨¦n Van Garderen, el quinto en discordia, el chico de Montana, pero terminaron enlazando en el m¨ªnimo valle de Guillestre antes de ascender hacia Risoul bajo un tiempo m¨¢s clemente que la v¨ªspera. "As¨ª me gusta correr a m¨ª, agresivo", dijo Bardet, tercero en la general a 13s de Valverde. "No lo hice por Pinot, sino contra todo el pelot¨®n. Y al final saqu¨¦ tiempo a Valverde, que es lo importante". "Me atacaron bajando porque saben que subiendo soy m¨¢s fuerte", dijo, soberbio, Pinot, quien, tambi¨¦n es orgulloso, ech¨® el resto para batir al sprint a Bardet, de quien le separan 16s por un triple premio: un puesto en el podio, ser el mejor franc¨¦s y tambi¨¦n el mejor joven. Tambi¨¦n en los kil¨®metros finales aceler¨® Van Garderen, aunque se mostr¨® m¨¢s limitado.

Si el Tour del 14, el que puede ser de la ruptura generacional, necesitara un lugar simb¨®lico, este ser¨ªa seguramente la subida a Risoul, donde en 2010, con solo 20 a?itos, y en dos ascensiones, en l¨ªnea y en contrarreloj, Nairo Quintana gan¨® el Tour del Porvenir. Ausente el colombiano del Tour grande, del que fue segundo en su debut, despu¨¦s de haber ganado el Giro y mientras se prepara para ganar la Vuelta, el honor de la victoria correspondi¨® a otro de su generaci¨®n, a Rafal Majka, un magn¨ªfico escalador, el ¨²ltimo superviviente de la larga fuga, que hizo m¨¢s que resistir: inici¨® la subida a Risoul con 1m 10s de ventaja sobre los mejores y la termin¨® con 24s sobre Nibali, 50s sobre los duelistas franceses y 1m 24s sobre Valverde.

Me atacaron bajando porque saben que subiendo soy m¨¢s fuerte." Thibaut Pinot

Majka es un polaco de noviembre del 89 que hizo un magn¨ªfico Giro hace nada y que hace un par de semanas deseaba haberse cortado la lengua antes de decir lo que dijo. Lo que dijo fue que le llevaban al Tour en contra de su voluntad, que no estaba preparado, que estaba muy cansado y que su equipo, el Tinkoff, no pensaba en la salud de sus corredores. Esto lo dijo despu¨¦s de que el equipo de Contador anunciara que no alinear¨ªa a Roman Kreuziger por sus problemas con el pasaporte biol¨®gico. Majka no se cort¨® la lengua, pero fue cambiando su discurso seg¨²n le indicaban sus patrones. Primero dijo que estaba encantado de correr el Tour y que lo dar¨ªa todo por Contador, y despu¨¦s de su victoria dijo incluso que ten¨ªa previsto correr el Tour desde enero, que la suya no fue una inscripci¨®n de ¨²ltima hora por el problema Kreuziger.

Por fortuna para los que luchan por el podio, Majka perdi¨® mucho tiempo en el llano (est¨¢ a 1h 48m de Nibali) y no es peligroso en la general, pero para desgracia de Purito, despu¨¦s de ganar la etapa que salva el Tour del Tinkoff anunci¨® que luchar¨ªa tambi¨¦n por el reinado de la monta?a: est¨¢ m¨¢s fresco y empatado a puntos con el catal¨¢n quien recibi¨® en la meta el apoyo en catal¨¢n de Manuel Valls, el primer ministro franc¨¦s, nacido en Barcelona, padre de un chico que se llama Joaquim, como Purito, y que prefiri¨® el Tour a las manifestaciones propalestinas que incendiaron Par¨ªs.