Gloria y misterio del mediocampo

El f¨²tbol de vanguardia se define por la concentraci¨®n de talento en el medio campo. Siguiendo lo que parece el hilo de la tendencia, el Madrid ha invertido 200 millones de euros en los ¨²ltimos tres a?os en hermosear su l¨ªnea de volantes. Alonso, Kroos, Khedira, Modric, Di Mar¨ªa, James, Isco e Illarramendi componen la reuni¨®n m¨¢s exuberante del mundo en esta l¨ªnea. Son estupendos. Pero hay un problema: tres atacantes (Cristiano, Benzema y Bale) que, por imposiciones de la estrategia del club, deben jugar. Tres jugadores que bajan muy poco a ayudar a los volantes y que obligan al entrenador, Carlo Ancelotti, a elegir: o quita a uno, o quita a dos y prescinde de figuras primordiales, o mete la tijera en su grandiosa fila de centrocampistas y se aleja del f¨²tbol vanguardista para insistir en el contragolpe. La decisi¨®n inicial del t¨¦cnico es clara: insistir en el contragolpe.

Ancelotti confirm¨® ayer que el principio fundamental contragolpeador sigue en pie. Bale, Cristiano y, quiz¨¢ en menor medida, Benzema, continuar¨¢n siendo el fin ¨²ltimo del modelo. ¡°En general no pienso cambiar de sistema¡±, dijo. ¡°En un partido, puntualmente, puede ser que algo pueda cambiar. Pero la idea general ser¨¢ la del a?o pasado¡±.

La idea general es el 4-3-3 que da libertad a Bale y Cristiano para desprenderse de los tres del medio. Est¨¢ previsto as¨ª. Se exime a los atacantes de agobiarlos con funciones defensivas y de construcci¨®n. De otro modo Ancelotti se inclinar¨ªa por un 4-2-3-1, o por un 4-5-1. Pero de eso nada. Eso, en opini¨®n del italiano, implicar¨ªa renunciar al fabuloso potencial de Bale y Cristiano para correr a los espacios.

Resuelta la primera cuesti¨®n, se abre la inc¨®gnita del medio campo. El club ha invertido una fortuna en fichar talentos con la idea de enriquecer esta l¨ªnea, pero solo hay sitio para tres.

La directiva tiene su propia visi¨®n: los ¨²ltimos en llegar deben ser los primeros en jugar, sobre todo cuando han supuesto un esfuerzo tan grande como James, que cost¨® m¨¢s de 80 millones de euros. Esta m¨¢xima da prioridad a Kroos, James e Isco sobre Modric, Alonso y Di Mar¨ªa. Pero el entrenador anda buscando soluciones intermedias. En la Supercopa de Europa, aprovechando que Alonso estaba sancionado, puso en su lugar a Kroos y funcion¨® de maravilla. Ahora que Alonso est¨¢ disponible, puede poner a los dos: Alonso delante de la defensa y Kroos como volante, en el puesto que ha desempe?ado Di Mar¨ªa.

El centro del campo es estupendo, pero los tres atacantes bajan poco a ayudar a los volantes

Por delante del mediocentro, Kroos deber¨¢ cubrir m¨¢s campo. ¡°Los volantes interiores tienen que hacer un trabajo m¨¢s din¨¢mico¡±, explic¨® Ancelotti. ¡°Tienen que ser jugadores m¨¢s din¨¢micos. En cambio, el mediocentro, que juega por delante de los centrales, tiene que tener velocidad t¨¢ctica, mover el bal¨®n r¨¢pido, y tener capacidad para controlar el juego con buen criterio¡±.

Ancelotti no cree que Alonso est¨¦ en condiciones de correr como ha corrido Di Mar¨ªa por el carril del diez. El entrenador tampoco piensa que Kroos sea esa clase de atleta pero est¨¢ dispuesto a probarle. Quiz¨¢ hoy mismo. Sabe que contra el 90% de los equipos no tendr¨¢ dificultades y el Atl¨¦tico puede ser una medida de la m¨¢xima exigencia, a la altura del 10% restante. ¡°Kroos aporta m¨¢s experiencia y m¨¢s calidad¡±, dijo el t¨¦cnico. ¡°Es h¨¢bil para tener una posesi¨®n eficaz y para verticalizar el juego hacia los delanteros¡±.

Falta a?adir un volante. Modric y Di Mar¨ªa est¨¢n probados. James, que nunca jug¨® como interior hasta ahora, necesita experimentar. ¡°James¡±, juzg¨® Ancelotti, ¡°lo ha hecho bien. Lo que ocurre es que cambi¨® un poco su posici¨®n habitual, que era por detr¨¢s del delantero centro. Tiene que acostumbrarse a jugar un poquito m¨¢s atr¨¢s. No le falta nada. Solo tiene que adaptarse¡±.

Ajustes aparte, el Madrid apuesta por la sofisticaci¨®n. Florentino P¨¦rez parece decidido a abolir la norma no escrita que impon¨ªa pivotes netamente defensivos, pepes, khediras, gravesens, pablos garc¨ªas, o diarras, en las alineaciones titulares.